Mi hija es lo mejor que ha venido de mi

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En Konoha, Tsunade permaneció toda la tarde y noche en su cuarto al cuidado de su hija Raynade, quién la atendía lo mejor posible del mundo, aunque ella no es tan buena en eso como su padre que cuida muy bien a su mamá.

Ambas pasan un buen tiempo de madre e hija, incluso duermen por unas horas en el cuarto de Tsunade, ignorando por completo que Jiraiya ha pasado por un momento complicado en la misión a escoltar al señor feudal al país del viento, pues el mismo Kakashi y Jiraiya le dijeron a Tsunade que la misión solo duraría un día, pero en realidad duraría más de dos días, esto con el fin de no preocupar a Tsunade.

Madre e hija volvieron a compartir como hacía meses no lo hacían, y Tsunade estaba muy feliz por esto a pesar de que la culpa de todo lo malo que ha hecho los meses anteriores aún sigue en su corazón, pero siente que, con ayuda de su hija y esposo, podrá sanar esta gran herida que ella misma ha causado.

A la 1:00 am de la mañana, Tsunade se despierta sin explicación y recuerda la primera vez que escuchó de Jiraiya la palabra TE AMO, fue cuando se conocieron, el dijo que si le enviaba cartas de amor, Tsunade respondió con un golpe que mandó a volar a Jiraiya, años después se arrepintió de dicha situación tan inmadura, para lo cual Jiraiya la había perdonado por eso, durante años el rechazó sus propuestas amorosas y casi siempre lo callaba con un golpe que lo lastimaba, pero él siempre la perdonaba, realmente Tsunade era muy cerda con Jiraiya en muchas ocasiones, pero ni eso pudo evitar que Jiraiya la dejara de amar de manera incondicional, se volvió mujeriego por culpa de Tsunade, el buscaba en mujeres rubias el cariño que Tsunade no le daba, y en mujeres diferentes Tsunade solo buscaba compañía, Tsunade lo juzgaba por ser mujeriego, pero nunca se atrevió a ver más allá de Jiraiya, sin embrago, gracias a la perseverancia de él, Tsunade se enamoró de él perdidamente poco a poco, hasta el punto de desarrollar cierta dependencia hacia él, la cual nunca mostró excepto cuando se le entregaba a él, y nisiquiera en el climax era capaz de decirle te amo, su orgullo y mala suerte de perder a sus seres amados, era suficiente para ocultar sus sentimientos por Jiraiya.

Pese a que ella se perdonó hace mucho esa indiferencia hacia Jiraiya, esta ahora se le suma a la infidelidad que ella le hizo, pero ella poco a poco y con la aceptación de su esposo e hija, se ha dado cuenta que el amor es mas grande, y que solo aquellos con corazón valioso y paciencia incansable, pueden perdonar cosas que la mayoría vemos imperdonables.

Todo esto se le viene a la mente a Tsunade, es lo que la hizo despertarse, pero también la hizo despertarse tener a Jiraiya de nuevo a su lado, que vuelva pronto de su misión, porque ella solo ama a ese hombre, su vida está dividida en dos, su esposo y su hija, y por eso cada día será mejor, no cometerá un error tan horrible de nuevo.

Tsunade tapa a su hija con las cobijas de su cama y sale del cuarto, va a la cocina y sirve agua en un vaso de vidrio, tiene mucha sed, su mano se siente mejor, pero una fractura de fisura se recupera dependiendo de la aplicación del ninjutsu médico, en el caso de Shizune, hizo un buen trabajo con la mano de Tsunade, pero esta aún le duele, aunque si puede mover los dedos, Tsunade se sienta en una de las sillas de la sala y piensa en Jiraiya, sin duda es un gran hombre, ella lo ama, y quiere verlo de nuevo, se muere por él, espera que la misión salga bien.

Tsunade deja el vaso en la cocina y sube a su cuarto, su hija está recostada hacia la ventana dándole la espalda a la puerta, Tsunade se mete entre las cobijas y abraza a un niña muy fuerte, es su tesoro, se la dio el mejor hombre del mundo, el hombre que ella ama, y por eso nunca volverá a lastimarla como lo hizo hace meses, una niña tan buena que se parece a Jiraiya, que es parte de él y de Tsunade, es su mayor prioridad junto con su esposo.

.-Te amo mi bebé, eres lo mejor de mí, te pareces mucho a tu padre, estoy orgullosa de ti, eres lo mejor que he hecho en mi vida, dice Tsunade estando recostada atrás de su hija y abrazándola fuerte, la pequeña escucha a su madre y esboza una sonrisa de alegría, su mamá está cambiando, y eso le da mucha felicidad, se ha arrepentido de lo mal que hizo, eso le da mucha fortaleza.

Ambas quedan dormidas de nuevo, esperando al amanecer que dará un nuevo día lleno de cosas por hacer, de esperar a que el peliblanco que tanto quieren llegue a la aldea.

Mientras tanto, Jiraiya y Shikamaru, avanzan a paso medio en su viaje a llevar al señor feudal al país del viento 

Un corazón sin heridas del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora