My Utopia - Taekook/Vkook Omegaverse

❄ Capítulo 3 ❄

Narra Kim Taehyung

La alarma suena llenando mi habitación del ritmo lento y armonioso del cantar de Vincent Blue en su canción Stupid.

Son las 6 a. m. y me duele todo el cuerpo. Apago la alarma recordando la razón de mi dolor corporal. La noche pasada estuve trabajando incesantemente para salvar la vida de un pequeño animal que había encontrado mi padre. El pobre lobo parecía haberse rendido por completo y de no ser por la insistencia de mi padre de hacer absolutamente todo por volverlo a la vida, habría muerto.

Luego de que su pulso finalmente se estabilizara y todas las heridas fueran limpiadas y vendadas nos fuimos ir a tomar nuestro merecido descanso, pero no podíamos dejar al cachorro solo en mi laboratorio sobre la fría mesa de metal y ya era muy tarde para que mi padre se lo llevara, así que llegamos a la conclusión de que tendría que dormir conmigo. De ese modo nos aseguramos de que estuviera calentito y si algo pasara yo estaría cerca para cuidarlo.

Aún con los ojos cerrados, me doy la vuelta sobre la cama buscando con la mano al cachorro a mi lado. Un ligero olor a fresas y lima dulce me inspiran a abrir los ojos. Con la vista en el techo tanteo entre las sábanas buscando el pelaje del pequeño lobo, sin embargo, en su lugar solo hay suave y tersa piel bajo mis manos.

Me volteo lentamente con el ceño fruncido y confundido a la vez que me siento en mi lugar.

Y allí estaba, no un lobo castaño rojizo de estatura pequeña, sino un chico de tez blanca, cabello color canela, y labios rojos ligeramente separados durmiendo plácidamente sobre mi cama sin ninguna prenda que cubriera su esbelto cuerpo.

*-*-* ❄ *-*-*

Mi respiración se agita conforme me voy levantando despacio. ¿Qué demonios hace este tipo en mi cama?

Recuerdo que anoche dormí con el cachorro a mi lado pero ahora no hay rastro de él y en su lugar está este... chico.

Observo cuidadosamente su rostro, el color de su cabello es canela, muy similar al color del pelaje del cachorro de anoc-

- Oh... - espeté bajito ante mi ligera sospecha de lo que podría estar pasando.

Tomé las sabanas que tenía a la altura de su cintura y con delicadeza la subí hasta su cuello tratando de ocultar su desnudes.

Busqué una mudada de ropa en mi closet y lo situé a un lado de la cama.

Estoy seguro que cuando despierte lo necesitará.

Eché un vistazo antes de salir de la habitación, duerme tan pacíficamente como si estuviera en su propia cama que me resulta hasta un poco cómico.

¿Cómo puede conciliar el sueño de esa forma en una cama que no es la suya?

Yo siempre he tenido que batallar para dormir en un lugar que no es mi cama removiéndome por horas.

Aun así, ahí estaba ese muchacho. Durmiendo como si del mejor sueño se tratara. Su boca entrecerrada y sus largas pestañas dándole a su rostro demacrado un toque tierno.

Me dirijo a la sala en donde mi padre duerme sobre el sofá.

- Pa... - digo bajito moviendo su brazo con intención de despertarlo – levántate, ya es de día.

- No...cinco minutos más.

- Despierta, necesito que veas algo.

- ...

- Es sobre el cachorro de anoche.

- ... ¿Mm?

- Ya no está...

- ¡¿Qué?!

Reí ante su reacción mientras que daba un paso atrás viéndolo levantarse con torpeza.

- El lobito ya no está – expliqué - pero en su lugar hay un joven tendido en mi cama.

- Pero, ¿com-

- Tengo la ligera sospecha de saber que sucede – le interrumpí – aunque todavía sigue durmiendo así que esperaremos a que despierte.

Mi padre asintió sin más que decir y se dispuso a preparar el desayuno.

- ¿Vas a contarme cuales son tus sospechas o quieres matarme de la curiosidad? – preguntó mi con una ceja alzada antes de darle un sorbo a su chocolate caliente.

- Creo que se trata de un cambia formas – sonreí para mis adentros, nunca había estado frente a uno y era consciente de que ya casi no los habían por lo que tener uno tan cerca resultaba muy interesante – noté que el color del pelaje del lobo de anoche es del mismo color del cabello del muchacho. Además, no hay manera de que haya esquivado a los guardias y se hubiera infiltrado en mi habitación atravesando todo el alto nivel de seguridad que tiene este edificio – dije tranquilamente llevándome una tostada con mermelada de frutilla, mis favoritas.

Mi padre tenía una mirada que indicaba que estaba teniendo una lucha en su interior, pensando cuidadosamente en lo que diría.

- Lo encontré tirado en un callejón, Tae... estaba tan herido que por un momento pensé que ya no respiraba – una profunda tristeza se reflejaba en sus ojos - ¿quién podría haberle hecho eso?

Parpadeé ante su pregunta al darme cuenta que tenía razón, había un cambia formas en mi hogar pero la forma en que había llegado no fue tan agradable. La noche pasada al curar cada una de sus heridas noté que la mayoría habían sido causadas por golpes fuertes contra el abdomen del mismo. Era como si más de una sola persona le hubiera dado una horrorosa paliza.

Suspiré dejando ir la tensión que se había generado en mis hombros al recordar que antes de dejar la habitación había podido ver los enormes moretones oscuros en todo el cuerpo del chico.

- Creo que será mejor que él nos cuente que sucedió – dije finalmente – si podemos ayudar en algo, lo haremos ¿está bien?

- Está bien – respondió mi padre ya más tranquilo.

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Así es como luce la habitación de Tae ⬆⬆⬆

Y así es como luce la sala/cocina/comedor ⬆⬆⬆

Espero que estas imágenes sirvan para que puedan exactamente como se ven las cosas ♥

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Debido a que el anterior capítulo me pareció algo corto decidí publicar uno más además de este. Así que mañana habrá nuevo capítulo como disculpa.

¡Nos vemos!