volao culiao

d i e c i s i e t e

D a m i á n

Sacar el tema de la Ingrid me levantó los pies de la tierra. Darme cuenta que easy peacy le expliqué el problema a la Vale y no a mi "andante" fue algo muy raro. Quizás, como la Vale no está en el mismo liceo que yo, supe que podía confiar en ella ya que no se metería en cahuines; a diferencia de la Ingrid, que comparte el mismo ambiente que conmigo y eso puede jugarle en contra.

—¡Stop! —grita la Vale.

—Sh, habla más bajo —le pido por millonésima vez—. Has ganado en todo el bachillerato.

—Es que vo erís súper lento pa escribir —Me webea y se acerca a mí como cabra chica—. Mira, te voy a enseñar un truco pa ganar siempre.

—Nunca juego bachillerato. —Le aclaro.

—Ya pero igual es bueno saber —Agarra su cuaderno y lo compara con el mío. Su letra parecía jeroglífico mientras que la mía es redonda y de mano imprenta—. Pa ganar rápido tenís que escribir como las weas, puras líneas pa arriba y pa abajo pero tienes que saber qué estás escribiendo. Así cuando compares respuestas, hayas aprendido la palabra de memoria y no necesariamente escribirla.

—Pero eso es trampa po. —La webeo y ella blanquea los ojos.

—No es trampa si no entienden lo que escribes —aclara y yo prefiero quedarme callao—. Mira, ¿No ves? —Ella escribe en una esquina de la hoja su nombre Valentina con un punto al final y un dibujito de una flor margarita—. Esta es mi letra real.

Su letra es media cursiva, escribe con mano imprenta y manuscrita al mismo tiempo, y es raramente difícil distinguir entre la ele, la e, la ene, la te y la i, pero se entiende igual.

—Está pulenta. —Me abstengo de elogiar—. Gracias por el tip.

—Pa eso tamo —Me guiña el ojo.

La Vale tenía una actitud media rara; aunque yo soy pesao con ella porque apenas nos conocimos hace una ó dos semanas, ella mantiene su actitud wena onda y es repiola la cabra. Me recordó a una prima chica: es igual de buena pa batir la lengua, y siempre se esfuerza pa conseguir que el ambiente esté en más confianza. Como que a la Undurraga no le importa tratar a un desconocido como trata a sus amigos... Igual pana.

—Oye y, ¿Te hiciste muchos clientes vendiendo la weá? —pregunto con una voz muy bajita.

—Mm —Se tambalea de un lado a otro pensando la respuesta—. Sí, yo cacho.

—Ah —Suspiro—. ¿Y podríai hacerme la paletiá de vender más?

Ella me mira neutra, analizando mis facciones. No se ve ofendida por lo que le pedí, pero tampoco sé porque me está mirando tanto. Me siento muuuy observado.

Sé que es muy patuo' pedirle, pero no me quedaba de otra. Nadie nos conectaría; de hecho, nadie sabe que la Vale y yo hablamos, así que difícilmente la podría meter en problemas. Aparte no puedo vender en mi liceo porque no sé cómo chucha va la investigación del microtráfico y toda la weá del Joaco, así que igual la Valentina sería mi salvación si es que acepta.

—¿Acaso tenís cultivo de plantas de marimota o alguna weá por el estilo?

Su pregunta me relaja un poco. Al menos con eso sé que sólo le interesa saber de dónde saco tanta mercancía más que por qué estoy tan urgido por vender.