37

6K 301 112
                                    

—¿Qué vamos a hacer hoy?— Inquiere mi amigo Alex con entusiasmo, hoy ha sido de esos viernes interminables y todos tenemos esa cara de alivio de que ya se ha acabado la jornada.

—Desde que me despidieron de la galería de arte deberíamos celebrarlo— dos meses duró Paula, no pudo soportarlo y terminó armando un escándalo con uno de los visitantes que para ser sinceros no la trato nada bien—. Hay un burguer-bar nuevo cerca, me han dicho que está bueno el ambiente en la noche.

—Hamburguesas suena como lo que necesito, yo digo que sí— Alex accede rápidamente colocándose el casco de la moto en su cabeza.

—Cualquiera distracción después del profesor pesado de comercio y mercadeo es siempre buena— Kate golpea en el brazo a su novio quien dice que sí con la cabeza. Es gracioso desde cierto punto, ella parece ser "la jefa" en su relación—. Nosotros vamos.

—Tu Mila, ¿Por qué tan callada? Que ya sabemos que te gustan las mujeres, ya sería demasiado si también nos dijeras que eres vegana— miro a Paula con la cara fruncida, nunca renunciaría a ese tipo de placeres en la vida.

—No es eso, es que Lauren tiene fiesta de insti, no me ha dicho que vaya con ella pero probablemente lo haga aunque tampoco es que me entre una emoción así— me agarró el pecho—, no lo sé.

—Pues no vayas, que Lauren tiene sus amigas y seguro ellas van a estar ¿No? Está bien hacer cosas distintas— no sé si tomarle la palabra a José desde que él y Kate hacen todo prácticamente juntos—. Venga, igual vamos a ir nosotros, por el grupo Paula pasa la dirección y desde que estás viviendo más cerca si te animas vas con nosotros, que de todas formas si la fiesta de Lauren es aburrida se nos puede unir también.

Eso me agradaba de ellos, no había presión alguna y siempre decían cosas que realmente ayudaban, son buenos chicos. Es una gran diferencia de mentalidad entre las personas que aún van al high school a las universitarias; claro que queda uno que otro caso de gente un poco desubicada dentro de la universidad. Me despido de ellos, Alex se va con Paula en su moto, la verdad ellos se han vuelto muy cercanos, y José se va con Kate. Yo me quedo esperando a Lauren, ella se ha quedado con el auto hoy desde que no me apetecía manejar, recibí un mensaje de ella que venía por mi hace unos minutos.

La verdad no me animan las fiestas de high school, digo, fueron divertidas en su momento, las que realmente puedo acordarme, pero la mayoría siempre terminaba en una mala noche de esas que quisieras borrar pero sabes que es imposible. Yo soy diferente ya, después de casi tres años alejada de lo que fueron mis años de escuela no extraño ni un poco ese ambiente, y si soy sincera, espero que Lauren no me pregunte si quiero ir con ella porque no quiero estar en ese tipo de lugar, así las personas, las casas, la música sean diferentes, los malos recuerdos de mi yo adolescente no se van a quedar quietos y no quiero revivir esas cosas en mi mente que me afectan.

Además de que es algo bueno que Lauren tenga su libertad, si no me pide que la acompañe no lo veo nada mal, va con sus amigas a explorar algo nuevo de lo que yo no debería ser un impedimento para que ella disfrute ni un motivo para que ella critique antes de conocer. Ella tiene derecho a hacer cosas sin mí desde que yo no soy su dueña ni ella la mía; aunque en contexto de pertenecernos toma un significado diferente cuando nos referimos de forma sexual. Es bastante sano hacer cosas separadas desde mi punto de vista, tenemos la confianza suficiente para hacerlo de esa manera.

Veo el auto y ella suena el claxon, viene con música un poco alta y saca su cabeza por la ventana. Viene tan contenta y tan bonita. Sale del auto y recorre hasta la puerta del copiloto, dónde me espera con el brazo apoyado encima del techo del auto, el cabello se le despeina con el viento y con una sonrisa bella me espera.

Mi Chica de Cuidad | CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora