Capítulo 1 (El Regalo De Papá)

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María era una muchacha encantadora, hermosa y con un carácter fuerte; que soñaba con lo que todas las jóvenes sueñan: terminar sus estudios, divertirse y encontrar al amor de su vida.
La vida de María era muy cómoda ya que sus padres eran personas adineradas que querían tanto a su hija que procuraron siempre hacerle la vida lo más cómoda posible.
Ella había estudiado empresariales ya que algún día junto con su hermano deberían hacerse cargo de las minas de plata y de las joyerías que su padre tenía repartidas por todo México.
Después de cinco años de carrera, por fin había llegado el día de su graduación y ella y su gran amiga Erica, verían cumplidos sus sueños.

La dos amigas en el aula de la universidad preparándose para la graduación.
M: ¡hay, Erica! ¡estoy muy nerviosa!
Er: y, ¿cómo crees que me siento yo?
M: ya no aguanto más la espera, tengo que salir de aquí o me volveré loca.
Er: espera que voy a mirar por la ventana para ver si nuestras familias ya llegaron.
M: ¿qué? ¿Están ahí?
Er: ¡guauuu! ¡Están todos!. Tus padres, los míos, tu hermano y mis hermanas. ¡Todos!
De repente se escucha la voz de uno de sus profesores que desde el fondo del pasillo les gritaba.
P: ¡vamos, Chicos! Es vuestro turno. Aligerad que ya os toca.
María y Erica recibieron de manos del director de la facultad sus respectivas licenciaturas y tras el correspondiente lanzamiento de sus bonetes, cada una se acercó a sus respectivas familias para recibir de ellos sus felicitaciones.
Carlos hermano de María: (abraza a María y la levanta en vuelo dándole vueltas en el aire) Hermanita por fin terminaste y con el número 2 de la clase ( la llenaba de besos).
Carlos Jesús y Ana padres de María
CJ: ¡Hay! Mi pequeña que ya es toda una mujercita (la abraza).
An: Mi niña, mi consentida que ya es toda una empresaria (la abraza también).
M: Gracias a todos, no saben lo feliz que me hacen sus comentarios y su cariño.
CJ: Bueno mi muñequita, pues ahora si que te vas a poner más feliz aún. ¿Recuerdas las ganas que tenías de irte de crucero con tu querida amiga Erica por las islas griegas? Pues tu sueño se va a hacer realidad. Toma estos son

vuestros billetes de avión para Europa y estos los del crucero que sale desde Barcelona a las islas griegas.
M: (abraza a su padre con lágrimas en los ojos). Gracias papá. No sabes la ilusión que me hacía ese viaje.
María salió corriendo en busca de su amiga Erica para contarle lo del viaje.
M: ¡Erica, Erica! Mira lo que nos regaló mi papá. Es el viaje con el que tantas veces habíamos soñado.
Er: ¿Qué dices? ¿Estás segura de eso?
M: Si mira amiga son los billetes para el avión a Europa y para el crucero. ¡Mira, mira! Uno para ti, otro para mí y ¿este?
María y Erica van corriendo donde la familia de María.
M: papá aquí hay tres billetes. ¿Para quién es el tercero?
CJ: para tu hermano Carlos. ¿O es que pensabas que te dejaría ir sola? Tengo una hija demasiado hermosa como para dejarla ir sola con su preciosa amiga a un viaje tan largo.
M: Así que tú nos acompañarás ¿eh? (mira a su hermanito con recelo).
C: sí, hermanita, si las acompaño, por que era eso o te quedabas si el viaje.
Er: con cara de felicidad (por que siempre había estado enamorada de Carlos) ¿De verdad que nos acompañarás?
M: (que sabía de los sentimientos de su amiga por su hermano). Cambia de cara amiga, que se te ve el plumero.
Er: bueno y ¿se puede saber cuando nos vamos?
M: perdón pero con la emoción ni miré la fecha de los billetes. (María abre los sobres y mira la fecha).
Er:¿Y?
M: Mañana, mañana nos vamos en el primer vuelo.

Ciudad de México Empresas San Román.
SE: señor San Román, el señor Rubén Romero le llama por teléfono.
E: ok Cleo, pasa la llamada a mi oficina.
Esteban San Román era un joven alto, moreno, guapo y con unos ojos verdes que de seguro harían perder la cabeza a más de una mujer. Era un hombre serio y responsable para le edad q tenía, por que a penas unos meses atrás, había muerto su padre y en ese momento él tuvo que hacerse cargo de todos los negocios de la familia y además de sus tías Alba y Carmela.
E: ¿bueno? ¡bueno!
RR: ¡Hola, futuro yerno! Se que teníamos una cita para mañana, pero como ya te comenté, en unos días será mi 25 aniversario y como sabes le prometí a mi mujer llevarla de crucero por las islas griegas ya que queremos renovar nuestros votos matrimoniales durante ese crucero y no voy a poder cumplir con mi compromiso contigo.
E: Pero Rubén sólo queda firmar el contrato y ya acabamos con las negociaciones con el señor Sánchez ¿No puedes secar un rato para pasar por aquí y firmar esos papeles? Yo ya los he firmado.

RR: Imposible, por que te llamo desde Barcelona, ayer llegamos para coger el crucero pasado mañana.
E: ok, Entonces será cuando vuelvas. tú me avisas de tu regreso ¿ok?
RR: bueno, y ¿por qué no te vienes de crucero como invitado a nuestra boda? Esta es la tercera vez que te lo pido y siempre me has puesto como pretexto este negocio que teníamos entre manos, pero ya que ese asunto va a tener que esperar, no puedes negarte de nuevo a mi petición. Además mi hija no me va a perdonar si no consigo que vengas. Puedes coger el primer vuelo de mañana y así estarás aquí pasado mañana para tomar el crucero.
E: Es que no se si podré.
RR: ahora ya no tienes excusa. O vienes o no vuelvo a hablarte en la vida.
E: ok, ok, allí nos vemos pasado mañana. Adiós y gracias por la invitación.
RR: no, gracias a ti por aceptar. Me acabas de salvar el pellejo con mi hija. Jajaja.
Esteban se quedó pensando que después de seis meses viviendo sólo para su trabajo y sus tías ya iba siendo hora de relajarse un poco y tomar unas vacaciones.

En otra parte de México.
M: (haciendo las maletas y hablando a la vez con Erica por el móvil). ¿No estás eufórica, Erica?, por que yo creo que esta noche no voy a poder pegar ojo por la emoción.
Er: ¿Y Carlos? ¿Ha hecho ya sus maletas?
M: no te preocupes (ella sabía que su hermano también estaba interesado por su amiga), que no le vamos a dejar en tierra. El viene con nosotras. El pobre ya no tiene escapatoria. Va a ser tuyo por 20 días. Así que aprovecha el momento y no lo dejes escapar. Jajajaja
Er: Bueno te dejo que mañana tenemos un día agotador y tenemos q descansar.
M: si amiga mía mañana será un gran día para las dos. Hasta mañana entonces.
María consigue dormir, pensando en lo que le deparará ese viaje.

Mientras en la mansión San Román.
Llega Esteban de las oficinas para cenar y durante la cena les cuenta a sus tías Alba y Carmela, sobre el viaje que va a emprender al día siguiente.
E: si tías, mañana a las 7,30h salgo para el aeropuerto y pasado mañana tomo el crucero en Barcelona.
A: pero, ¿es necesario que te vallas?
C: si papito, es q te vamos a extrañas mucho las dos.
A: no se que voy a hacer sin ti.(Alba ya estaba enamorada de Esteban)
E: vamos tías que no me voy para siempre. Sólo son 20 días.
A: ¿20 días? Es mucho tiempo.
E: ya, ya, no se preocupen tanto, que en un salto estoy de vuelta.
A: (a la sirvienta). Rebeca prepara las maletas del señor.
R: Si señora en seguida.
A: supongo que Fabiola irá a ese viaje. (se moría de celos sólo de pensarlo).
E: pues claro que lo hará. ¿Cómo crees? Son las bodas de plata de sus padres, no puede faltar.
A: perdón, pero es con la noticia de tu partida ya no se ni lo que digo.
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