[jueves 14:35 GMT]

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jueves / 14:35 / Inglaterra / Ciudad capital. Centro comercial "Paraguas"

Oliver se sentía algo mal por haber preocupado a su hermana, no es que estuviese haciendo algo malo, simplemente había olvidado reportarse sano y salvo después de volver de su ejercicio matutino de aquel día; mentir, sin embargo, era lo que más le dolía en ese momento, ya que se suponía que debida estar en su trabajo, al menos poniéndose al día en las cosas en las cuales se retrasó.

Sentado en una pequeña sala de espera rodeado por lienzos en los cuales las imágenes iban desde bellas y detalladas flores hasta cráneos ardientes, Oliver no se decidía por cual tatuaje debía elegir, los esqueletos con animales o fuego no encajaban con el y preocuparían a su hermana mucho más de lo que ya estaba, flores no eran muy atrayentes y tampoco quería frases pues tendrían que ser grandes para ser notadas.

- "¿Me arrepentiré de esto?" -Se preguntaba Oliver, mirando sin mucha atención los diseños del catálogo que tenía en mano- "Lo mejor es que sea algo discreto, no quiero llamar mucho la atención"

Cansado y rendido por no encontrar lo que buscaba, Oliver cerró el catálogo y con un gesto le dio a entender a la persona que seguía que tomara su lugar, al salir del puesto de tatuajes se acercó al borde de la pasarela, el lugar se encontraba en la segunda planta del centro comercial y desde donde estaba Oliver se podía visualizar la parte más concurrida del lugar. Tantas personas concentradas en sus mundos. El modo de ver las cosas había cambiado con solo decirle el futuro que le esperaba a Oliver.

- "Al final... todos sabemos que vamos a morir" -Pensaba Oliver, tomando con fuerza la baranda, sintiendo una vez más ese impulso por inclinarse y dejarse caer- "Tal vez alguno de ellos muera o quede lisiado antes que yo en un accidente, si es así, entonces ¿Por qué no puedo simplemente dejar este tema de lado e intentar disfrutar del tiempo que me queda?"

Oliver de nuevo se sumió en tristeza, pero no con intensidad como antes, si no que ahora se sentía más familiarizado con ello y lo reconocía como algo que va a pasar, agotado de ser atacado por esas ideas todo el tiempo, Oliver decidió dejar de mirar a las personas y concentrarse en otras cosas... desgraciadamente en un centro comercial lo segundo más abundante después de las personas son los productos.

- "Creo que me parezco más a uno de esos objetos que a una persona" -Se burló de si mismo, Oliver, analizando lo que veía- "Ya tengo fecha de vencimiento al fin y al cabo"

Y así fue como la idea llegó a la cabeza de Oliver como una cachetada, "soy como un perecible... y ¿Que tienen todos los productos que pueda tatuarme?; respuesta: Código de barras"

Contento por la idea y habiendo olvidado temporalmente las ideas depresivas, Oliver dio la vuelta decidido a entrar al salón de tatuajes... cuando algo más atrajo su atención, al lado había una barbería.

- "Bueno, si me arrepiento del símbolo podría cambiarlo si es solo un corte de cabello" -Reflexionó Oliver, sonriendo cambió su dirección hacia la barbería.

PRELUDIO - PóstumoWhere stories live. Discover now