— ¿Y, como estuvo? — pregunta Cindy con curiosidad, al ver mi rostro confundido blanquea los ojos y me lo aclara — La cita, tu cita con Zedd.
¿Cómo estuvo?
— Estuvo bien — murmuro.
— Eso suena a que más que bien... me alegro por ti cielo.
— No se como tomarme eso — tomo otro sorbo de mi jugo antes de responder — Fue solo una salida.
— Sabemos que fue algo más que una salida, y que le gustas a Zedd. — dice Cindy — Casi todos lo saben — continúa mirando a su alrededor y no me había percatado de las miradas dirigidas hacia mi.
— ¿Por qué están mirándome?
— Creo que es obvio — ríe Nicol — Quizás algunas quieran matarte, otras solo están celosas y las últimas....
— ¿Las últimas?
— Siguen sorprendidas.
— Solo fue una salida — me excuso — El y yo.
— Eso de nuevo — me dice Cindy con alegría.
Enarco una ceja
— Que menciones a ti y a Zedd en una oración — hace una mueca.
— Es un avance.
— Solo dije el y yo.
— Exacto — exclama Nicol — El y tu.
Cindy y Nicol siguen insistiendo que les cuente detalles de la cita con Zedd y de la cual me niego a describirla.
Cuando terminamos nos levantamos de la mesa, pero al instante mi cuerpo choca con alguien, reconozco ese agudo grito pero no entiendo porque lo hace cuando soy yo quien se ha embarrado con su perfecta crema de patatas, ella nisiquiera come eso y estoy segura de que lo a echo intencional.
La risa de Allison no tarda en nublar mis oídos.
— Lo siento, no era mi intención.
— ¿Estás bien, Cath? — me pregunta Nicol e intenta limpiar el desastre en mi blusa con papales.
— ¿Se puede saber que te sucede? — la encaro molesta.
— ¡Eres una estúpida! — Cindy le grita. Tan común en ella — Lo has echo apropósito.
— Tranquila cariño, ya me disculpé.
— Será mejor que te vayas si no quieres que te arranque las extensiones de tu pelo teñido. — señala acercándose a ella, Nicol la detiene.
Allison ahoga una risa — ¿Te sientes mejor porqué Zedd sale contigo? — dice alzando las cejas.
— No me siento mejor que nadie Allison, no me confundas contigo.
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Tu mi "y" Wattys2019
Novela JuvenilNormalicemos ser el número uno. Ser egoísta es normal, ser arrogante y selectivo es normal. Él era el número uno, creía ser, de hecho estaba seguro. ¿Que podía faltarle? absolutamente nada. Así fue hasta una peculiar noche. Encontró a alguien que...