𝑰𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂 𝑩𝑻𝑺

~Reacción~

Go go go!

Jin:

No estabas conforme con tu cuerpo. Aunque Jin decía que te amaba, tu solo pensabas que él te tenía pena y no era honesto.

—¿Vamos quién iba a quererme?, —dijiste mirándote al espejo antes de salir a la escuela.

Cuando llegaste, escuchaste los murmullos clásicos de todos los días. Los ignoraste y fuiste a tu locker. Al abrirlo, una nota cayó al suelo y la tomaste.

Muérete de una maldita vez T/n

Tus ojos se aguaron rápidamente. Aunque trataste de ocultarlo, una lágrima resbaló por tu mejilla derecha.

—No eres nadie aquí T/n —Mina estaba al lado tuyo con una sonrisa. Cerró abruptamente la puerta de tu locker y te dió un empujón —¿Por qué no te mueres ya? No espera —dió una pequeña carcajada y se tomó un mechón de cabello —¿Piensas que eres bonita?

Miraste hacia el suelo. Todos los insultos que te decía ella te hacían daño pero en ese momento solo podías escuchar tu respiración y como soplabas la nariz. Lo último que sentiste fué como te empujaron contra los casilleros y tú cabeza chocó con uno de ellos.

Estabas asqueada de tu vida, ya no querías seguir viviendo ese ciclo día tras día. Divisaste las escaleras que daban a la azotea y fuistes hacia allá.

“¿Vale la pena hacer esto?” pensabas. Escalón tras escalón eran segundos que pasabas para arrepentirte pero no vacilabas.

El aire repentino de la mañana golpeó tu rostro, secando algunas lágrimas viejas y haciendo que tu cabello se enredara un poco.

Llegaste hacia el borde del techo. Tus pies estaban en el límite de él, un paso más y no habría vuelta atrás. Cerraste los puños y respiraste varias veces.

—Tienes que hacerlo, no encajas aquí T/n.

Tu pie fué puesto en el aire pero antes de que fueras a dar otro paso sentiste un tirón en tu brazo que te llevó a aterrizar en los brazos de alguien.

—¡Estás loca!¿Que ibas a hacer, ah? —Jin te gritaba mientras te tenía en sus brazos. Su pecho vibraba con cada grito pero su cálido cuerpo te hizo sentir a salvo.

—¿Que haces aquí? —dijiste sollozando. Trataste de separarte pero solo recibiste más fuerza en el abrazo.

—Iba a decirte que se te había quedado tu teléfono en mi casa ayer pero me encontré con esto. ¿Por qué lo haces?

—No soy suficiente para tí, no soy bonita —te separaste de Jin y lo miraste. Sus ojos estaban como platos y su respiración agitada,—¡Por qué me escogiste, ah! ¿Te estás burlando de mí, no?

—¡Eres jodidamente preciosa T/n! —su cara se torno roja y se acercó hacia tí. Puso sus manos en tus mejillas,—Eres hermosa para mí con tus estrías, barros o por no cumplir un estándar estúpido de la sociedad. ¡Yo te amo T/n y eso importa! ¿Que carajos te tiene que importar lo que digan los demás si yo te amo por como eres y por qué para mis ojos eres lo mejor que me ha pasado en la estúpida vida?