NARNIA. La Última Reina De Antaño (TERMINADA)

Capítulo 34: Campamento

Al entrar al castillo, decidí ir a empacar algunas cosas para la visita a Calormen, pues se estimaba que estaríamos un total de 6 días allá. Y el príncipe nos había ofrecido hospedaje durante esos días.
Tomé una bolsa parecida a un morral de terciopelo y empecé a meter algunos vestidos, mis libros de historia y el de Encantamientos y uno que otro artículo personal cuando alguien tocó mi puerta.

-¿Puedo entrar?- preguntó Peter.

-Adelante-respondí.

Peter notó que ya había comenzado a empacar y me dijo:

-Vaya que estás más adelantada...-se acercó hasta mí y me extendió un sobre- es para ti, la manda Caspian.-

La abrí rápido y leí. Solté una pequeña risa cuando terminé de leer. Para luego mirar a Peter.

-Él dice: "Asegúrate de que las Reinas estén bien. Confío en ti"- dije citando parte de la despedida que había escrito Caspian.

-Típico de Caspian-dijo Peter rodando sus ojos.

-Y también dice que estará al pendiente de nuestras señales. Que cuidará de Susan y Lucy.-añadí formalmente.

-Eso me alegra y me tranquiliza como sé que lo hace contigo.-comentó.

-Sí- respondí- estarán bien...-

-¿Lo ves? No hay de qué preocuparse. Tú misma lo dijiste, mis hermanas son fuertes y valientes al igual que tú. Pronto nos veremos de nuevo- dijo abrazándome por los hombros.

-Gracias por esto. Lo necesitaba- dije.- ¿Ya has empacado?- pregunté cambiando de tema.

-No, aún no.- respondió- Por cierto, será mejor que lleves algunos "trucos bajo la manga" por si acaso.-

-Ya pensé en eso- respondí.

-Esa es mi chica- comentó dándome un beso en la mejilla.-Te veo luego, ¿Sí? Aún tengo que dejar listas algunas cosas antes de mañana.- comenzó a alejarse hacia la puerta.-adiós.-

-No olvides empacar- dije antes de que saliera.

-No lo olvidaré- comentó para luego salir de mi habitación.

La noche llegó rápido y con ella, la hora de descansar. Terminé de ordenar mis cosas algo tarde y decidí acostarme temprano para dormir mis horas necesarias.
Me levanté más temprano de lo normal, aún estaba obscuro. Salí a dar un paseo a el bosque, tomé mi arco y flechas y me puse mi capa. Tomé además un pequeño costal.
*Será rápido*- pensé.
Salí del castillo sin hacer ruido y me adentré al bosque, decidí no llevar caballo, pues no iría demasiado lejos.
Pasaron unos cuantos minutos y llegué hasta mi destino: un precioso árbol de manzanas rojas.
Tomé el saco y lo abrí para ponerlo en el suelo justo debajo de un ejemplar de esta fruta. Preparé mi arco para después disparar justo en el tallo. La manzana cayó justo en el costal. Repetí está acción hasta que recolecté un total de 12 manzanas.

-Con esto basta- me dije para mí misma.

De pronto, escuché unos pasos detrás de mí.
Tensé otra flecha y giré rápidamente.

-¿Arely?- preguntó una voz varonil- ¿Qué haces aquí?-

-¿Ed?- pregunté bajando el arma.

Edmund salió de las sombras y me abrazó.

-¿Qué haces aquí a estás horas?- volvió a preguntar.

-Yo vine por unas manzanas para Lucy y para nosotros.- respondí- ¿Y tú?- pregunté

Ví cómo por un segundo se tensó pero luego esquivó el tema hábilmente.

-No deberíamos estar aquí. Vamos al castillo y te explico allá, ¿Sí?- me tomó de la mano y ayudó a cargar el costal con las manzanas.