Theo
La chica misteriosa cada vez me sorprende más.
Está claro que tiene una historia aquí, y por el dolor en su mirada sé que cada una de sus palabras es sincera.
Durante los días que he podido verla me he dado cuenta de varias cosas; ama a la chica fantasma, no le teme a nada (aunque a veces parezca que sí) su pasado la atormenta, extraña a alguien, esto último lo sé con seguridad, como si lo tuviera escrito en la frente, a veces la veo caminando por los pasillos en la madrugada, con la mirada perdida, como si buscara recuerdos en los rincones para hallar la fuerza que necesita para seguir luchando.
Ahora mismo puedo sentir su rabia, se ha levantado del sillón de un tirón y todo ese ambiente de familiaridad y compañerismo ha sido sustituido por la incomodidad y la tensión.
Un chico de ojos verdes y cabello rubio amarillento está junto a Petrov, viste un traje que seguro ni ahorrando el sueldo de todo un año podría pagar, y hablo de mi sueldo como agente de la MI6, el dinero que Petrov me paga se sigue acumulando en mi cuenta bancaria, nunca lo he tocado, prometí que no lo haría, y trato de cumplir, por más que sé que mi familia lo necesita, ese dinero está manchado con la sangre de muchos inocentes.
−Antes de que quieras insultarme te aviso que estoy aquí por negocios−se apresura el chico a hablar, debe tener mi edad, pero se ve calculador y frío, no hay vida en sus ojos. Se parece mucho a Liah, aunque ella deja ver lo rota que está. No intenta esconderlo, más bien es como si fuera la leña que aviva el fuego en su interior.
−Entonces no entiendo qué haces aquí−la morena parece tensa. Está alerta, lo cual hace yo tome la misma postura, poniendo más atención a lo que me rodea−Para hacer negocios se supone que está la oficina de Petrov, no tenías que venir−está muy molesta.
−Admito que quería verte−suelta una breve carcajada que hace a la chica estremecer.
Kena muerde su labio inferior mientras los observa, está más pálida que de costumbre.
Sin duda alguna estos dos tienen historia.
−¿Sabes? Sigues siendo el mismo hijo de p...
−Liah, cierra la boca−la corta Petrov antes de que pueda insultar al chico a su lado, creo que lo he visto en algún lugar, pero no lo puedo recordar−Ryan es mi socio, haremos negocios juntos desde ahora, por lo que te prohíbo volver a hablarle irrespetuosamente−la severidad en su voz siembra duda en ella, pero puedo ver que no logra amedrentarla.
−Le hablo como se me dé la gana a este maldito.
−Podríamos dejar el pasado atrás...−su voz es calmada. El cinismo brilla en sus ojos y esa sonrisa ladeada.
−Lo que tú hiciste no se olvida−Liah está decidida a no perder esta batalla.
Me siento extraño aquí plantado, mirándola como si estuviera hipnotizado, verla duele, y al mismo tiempo me envuelve una hermosa nostalgia suave y abrumadora.
Dios, ¿cuánto dolor ha soportado esta mujer? ¿Cuánto ha tenido que sufrir para odiar tanto y estar tan destrozada al mismo tiempo? ¿Podré realmente enseñarle tu amor?
Persevera
Respiro profundo. Su respuesta me deja un sinsabor, pero sé que es lo que tengo que hacer, nunca fui bueno para insistir, pero si esto que siento cada vez que la miro es real, entonces cada esfuerzo valdrá la pena.
−Señor, pueden tomar asiento si gustan−ofrezco intentando liberar la tensión que se ha creado−Kena puede traer algo de tomar...−la chica capta la indirecta y se va inmediatamente sin siquiera preguntar lo que quieren.
Pero supongo que ya lo sabe, por la forma en que ambas chicas miraron al ojiverde puedo deducir que las dos lo conocen bastante bien. Y siento algo pesado en mi pecho de solo pensar en la oscuridad que rodea la relación de ellas y el chico.
−Vaya, están todos muy bien entrenados...−elogia irónicamente el tal Ryan.
−Todos menos una...−agrega Petrov refiriéndose a Liah.
Ese nombre, no parece correcto para ella, como si no le perteneciera.
−Si no fuera por Bastian ya te habría cortado la lengua−dice ella con inocencia fingida.
Aquella declaración me produce escalofríos, algo me dice que no bromea, que ni siquiera habla por hablar, lo dice muy enserio.
−Te preguntaría con quién quieres pasar la noche, pero está claro que Liah me haría quedar muy mal, así que Val podrá hacerse cargo de ti esta noche, después tendré una charla con nuestra muñequita−toma a Liah de la mano y la obliga a sentarse a su lado.
Ella cae junto a él con un golpe seco y la dignidad intacta. Admirable, e inquietante.
−¿A qué has venido?−pregunta ella de la nada.
−Sólo negocios−contesta tranquilamente mientras toma a mi hermana de la cintura. Aprieto la mandíbula, quiero hacer cosas nada agradables para que deje a mi hermana, pero eso sólo traería más dolor para ella−Verte de nuevo es un magnífico regalo−su fingido entusiasmo es inquietante.
−Y yo que pensaba que la noche no podía ir peor... hasta que apareciste−habla ella imitando el tono de voz de Ryan.
Kena llega con la bandeja de bebidas, champagne rosa y vodka.
Los sirve en silencio y pone ambas botellas sobre la mesa alejándose con la bandeja debajo de su brazo para luego pararse a mi lado.
−Sé que tienes una relación con la pequeña rubia, pero por tu bien y el suyo disimula−habla la chica fantasma entre dientes.
Me sorprende que ella haya notado que hay algo entre Val y yo, por más que ese algo sea nuestra relación de hermanos.
−Theo, Kena... pueden retirarse unos minutos. Hay algo que debo hablar con mi amigo−hace un ademán con su mano.
Automáticamente Val y Liah se levantan, pero ambos hombres toman sus muñecas y las obligan a volver al sillón.
...
Uhhhh
Yo no sé ustedes, pero este cap me dejó como ahdufkfosnsbabdnfnfk
¿Qué piensan de Ryan?
¿Alguna teoría sobre lo que hizo para que la nena Liah lo odie tanto?
Los amito mucho
No olviden lavarse las manitas 💛
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Jardín de mariposas (Golden Souls #1)
Spiritual¿Cuál es el precio de la libertad? ¿Qué tanto estás dispuesto a sacrificar por las personas que amas? Liah es la antigua cantante de un burdel en Londres que es la base de los negocios de la mafia Rusa dirigido por Bastian Petrov. Hace dos años que...