Capítulo 62

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   POV CHRISTIAN

Ha pasado una semana desde que mi padre sufrió el accidente, desde entonces creo que todo fue regresando a su perspectiva.

He tenido una larga conversación con mi padre, no entenderé lo que hizo, pero no lo juzgo. Si mi madre lo perdonó, yo también debo hacerlo. La vida nos ha regalado una segunda oportunidad, y debemos aprovecharlo al máximo, nunca se sabe el día en que ya no estará en éste mundo, así que sólo nos queda disfrutar, aprender y no cometer los mismos errores que han cometido nuestros padres.

Le envío un mensaje a Ana, haciéndole recordar que hoy tenemos una cena en casa de mi padre. Hace mucho tiempo que no nos reunimos todos, y hoy por fin después de todo lo que ha pasado nos reuniremos.

Ana, me responde al instante que no lo ha olvidado. Sigue molesta, hoy en la mañana se molestó conmigo porque un vestido no le entró y me echó la culpa a mi. Tal vez soy responsable por haberla embarazado, pero el bebé lo hicimos los dos, al menos eso le di a entender y ella se enfureció aún más. Sus hormonas la tienen irritable, ayer se molestó y ya ni recuerdo el motivo de su enojo, pero al mediodía llamó llorando para disculparse y me dijo que debía ir urgente a la editorial, la urgencia era que estaba cachonda y tuve que darle alivio. Obviamente me encantó, ya estoy deseando que llame por una nueva urgencia.

— ¿Todo bien?— Me pregunta Ross, al ver que estoy revisando mi móvil.

Ana no ha llamado aún pidiendo que vaya a la editorial.

— Si.

— Patrick me comentó que el ex editor de SIP está pidiéndote una suma descabellada de dinero para no llevarte a jucio.

— Ese idiota no quiere ir a juicio por qué sabe que perderá—

Él bastardo de Hyde, pide 10 millones de dólares a cambio que no me lleve a juicio por el daño que le he causado.

— Entonces estás decidido ir a la corte.

— Si, yo sólo defendí a mi esposa del ataque de ese malnacido.

— Christian, lo dejaste sin herederos— me recuerda.

— ¿Y que sugieres?—

— Yo sé cómo son estás sanguijuelas, yo te aconsejo que le ofrezcas una cierta cantidad de dinero... Ir a juicio te provocará estrés y expondrás a tu esposa. Supongo que no quieres eso ¿Verdad?— Buen punto Ross.

— No te preocupes por eso, Luke y Jason se hicieron responsable del daño... Además yo sólo le rompí dos costillas, quienes dejaron sin herederos al bastardo fueron Luke y Jason.

— Christian, él te está acusando a ti de todo. Además no creo que un juez le dé más de un año en prisión.

— ¡Joder Ross, esa rata le apuntó con una arma a mi esposa y tú quieres que yo llegue a un acuerdo con él ¿Estás loca?!— No jodas Ross. No le daré ni un centavo al imbécil.

— Yo sólo te quiero facilitar las cosas, pero si quieres ir a jucio hazlo... Sólo quería evitarte un mal rato— ¡Gracias Ross por tu consejo de querer que yo le regale mi dinero a ese malnacido!

— Agradezco tu consejo, además no creo que le den sólo un año por intento de homicidio.

Mi móvil anuncia un mensaje entrante.

Lo miro.

¿Puedes venir a la editorial?.

Es justo lo que necesito en éste momento.

— Ok— dice Ross, dándose por vencida.

— No te preocupes por el juicio, todo estará bien. Ahora debo irme—

— ¿Tienes alguna reunión?— Me pregunta curiosa.

Si supieras Ross, que no es precisamente por una reunión que saldré de mi oficina.

— Iré a ver cómo está funcionando Grey Publishing.

— ¿Estás hablando enserio?— Me dice sorprendida — ¿No será que te entraron las ganas de follar y vas a molestar a tú esposa embarazada?— Añade con tono burlón.

Odio cuando le das al clavo, aunque no soy yo el que va a buscar alivio, es a mi quien mandan a llamar para dar alivio, y yo como buen esposo obediente accedo.

— No te incumbe... Vete a trabajar.

— ¡Ajá! ¿No te puedes aguantar hasta terminar tu jornada laboral?¿Cómo lo harás con la cuarenta?— ¡No me lo recuerdes!

— Le diré a Gwen que has estado mirando demasiado algunas de mis empleadas.—

— Eres un hijo de puta Grey ¿Lo sabías?— Me riñe.

— Vete a trabajar.

    ***

Minutos después estoy en Grey Publishing.

— Señor Grey— me dice Hannah

— Que tal Hannah— respondo sin detenerme y voy hasta la oficina de Ana.

Abro la puerta, mi esposa enojona está viendo el ordenador mientras mueve un lápiz con la mano.

— Buenas tardes señora Grey — ella levanta la mirada

¿Pensaste que no vendría nena?

— Te tardaste mucho... Cierra la puerta— está muy apurada.

Su castigo por enojarse por nada conmigo será que lo haré esperar.

— ¿Tiene mucha prisa señora Grey?— Le pregunto

Debe estar muy cachonda.

— Cierra la puerta por favor... Realmente te necesito— se pone de pie y camina hacia mí. Pero yo tengo otros planes. Quiero calentar un poco más el ambiente

— ¿Y ahora qué?— Susurro con voz ronca cuando que a sólo centímetros de mi.

Mi traviesa esposa me toma por la solapa y pega sus labios contra los míos, besándome con violencia.

Ella está anhelando que le alivio.

— Te necesito — susurra y se aparta un poco de mí.

Sus hábiles dedos aflojan mi corbata.

Un golpecito en la puerta nos interrumpe.

— Qué— gruñe Anastasia molesta

La puerta se abre y aparece Hannah.

— Disculpen, pero tengo a Ruth Carrussi en la línea dos.

— Dile, que más tarde lo llamo.

— Está bien— responde Hannah dudosa

— No quiero que nadie me interrumpa, tendré una conversación privada con mi esposo — añade mi esposa con tono duro.

— Si, señora.

Hannah cierra la puerta y Ana enseguida se acerca a ponerle seguro.

— ¿De qué hablaremos?— Le digo para molestarla

— No juegues conmigo Grey—

Está ansiosa y excitada.

Sé acerca a mi, pero está vez soy yo quien toma él control.

La desvisto y la subo encima del escritorio.

Ella está húmeda. Muy húmeda.

    ***

Después de mi grato y excitante encuentro con mi esposa en su despacho me regreso a mi oficina. Ana, mencionó que iría a tomar un café con Kate.

Está noche después de mucho los Grey nos reuniremos. Tal vez ante no me hubiera importado mucho, pero hoy me hace feliz tener a toda la familia reunida.


Por Una VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora