Ella siempre estaba en silencio, en un mundo donde los gruñidos son la banda sonora, hasta que él la hizo gritar.
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—LOS MUROS—
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CARL.
LLEGAMOS A LA armería, estaba vacía. Se oía el caos y los gritos por todas partes. Esos hombres estaban acabando con nosotros.
Logan era el único que llevaba arma y por los pelos pudimos llegar a la armería.
—Vamos.—susurro Logan vigilando la puerta.
Ronin y yo entramos y nos armamos todo lo que pudimos.
—¿Estaís bien?—dijo Logan. Y ambos asentimos.—Bien, tenemos que encontrar a tu hermana.—un escalofrío recorrió mi cuerpo al escuchar esas palabras.
Judith, me aterrorizaba la idea de estar alejado de mi hermana ante esta situación.
—Estaba con Carol.—dije con la voz helada.—Vamos.—dije tratando de ocultar el miedo en mi voz.
Los tres preparamos las armas y comenzamos a salir.
Estabamos llegando a la casa, Logan nos protegía con gran maestría, sabia poco de su anterior vida pero si no había sido militar era algo parecido.
Estabamos apunto de llegar a casa cuando Ronin se separó de nuestro lado, Logan y yo nos giramos sobresaltados.
Pero no nos dio tiempo a reaccionar cuando Ronin volvió agarrando fuerte a Enid quien trataba de forcejear con ella.
—Sueltame, Ronin.—se quejaba ella con cara de pocos amigos.
Enid llegaba una mochila.
—¿Ibas a escapar?—dije sorprendido.
—¿Y a vosotros que?—dijo ella mirando a otro lado.
—De eso nada.—dijo Logan.—Te quedas con nosotros.—y sin esperar más comenzó a andar hasta llegar a la casa.
***
Entramos por la puerta de atrás.
—Carol.—dije yo nada más entrar.
Y al levantar la vista ya estaba Carol con su arma apuntandonoos.
—He estado apunto de disparar.—dijo aliviada bajando el arma.
—¿Donde esta Judith?—dije con agonía.
—Ahí.—señaló detrás de la pared.
Corrí hasta mi pequeña hermana y la cargué en mis brazos besando su pequeña frente.
—No te volveré a dejar.—dije abrazandola.
—Vamos a asegurar las puertas.—dijo Logan.
—Yo voy a acabar con ellos.—dijo Carol sería sin oportunidad a duda, Logan la miro con preocupación.—Estare bien, tu cuida de ellos.—cogió sus cosas y salió por la puerta.
