Ella siempre estaba en silencio, en un mundo donde los gruñidos son la banda sonora, hasta que él la hizo gritar.
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—CHICAS RARAS—
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CARL.
LA COMUNIDAD DE Alejandría se asentaba, los nuevos se acoplaban bien a las reglas y a nuestra forma de vida.
Todo estaba bien, demasiado bien pero algo dentro de mi me hacia sentir que era la calma que precedía a la tormenta.
Al levantarme esa mañana el cielo estaba nublado y había un ambiente espeso o eso era lo que yo percibía.
—Carl, hijo, tengo que salir con Morgan. Carol se ha ido.—anuncio mi padre nada más verme bajar las escaleras.
—¿Qué?—pregunté alterado por la noticia tan repentina que me había soltado.
—No te preocupes, la encontraremos.—dijo tratando de restarle importancia.—Pero tienes que cuidar a Judith.—
—¿Y Michonne?—dije con las cejas fruncidas.
—Ha salido con Glenn.—no dijo nada más.
Bueno puede que en algo hubiera mentido, las cosas estaban un poco peor de lo que había pintado antes. Dennis, la novia de Tara no el chico nuevo, había sido asesinada. Tara no lo sabia porque sufrió un accidente y seguía dormida, mientras que Daryl salió para matar al asesino de Dennis.
—Me encargaré de Judith.—dije serio. Mi padre se colocó su arma, beso a la pequeña que jugaba en el salón y se fue.
Miré a Judith a la vez que me colocaba el pelo revuelto y acomodaba el sombrero sobre este. Hoy parecía que iba a ser otro día rutinario en el que saldría, intentaría acercarme a Ronin y o ella saldría corriendo por la vergüenza o yo me echaría atrás por no saber como actuar delante de ella después de su historia, lo ultimo que quería era meter la pata y provocar algún daño en ella y eso nos estaba distanciando.
Después de dar de comer a Judith salimos al porche a disfrutar del día, aunque a mi me gustaba salir porque así podía ver si se respiraba tranquilidad en Alejandría, nada tenia que ver que desde mi casa se viera la de la chica silenciosa.
Mi hermana jugaba con sus escasos juguetes en el suelo mientras yo me senté en la mecedora a mirar a las personas que pasaban y me saludaban por el camino. Me reí de mi mismo, ¿Cuándo me había convertido en un abuelo?
En un momento dado de mi emocionante tarea de "vigilar" la puerta de la casa de Ronin se abrió y de ella salieron los dos únicos habitantes que estaban en Alejandría ahora mismo, Logan y Ronin, parecía que el mayor le estaba dando indicaciones o explicaciones, seguramente contándole donde iba a estar para que la chica no se alterase. Ella, como la mayoría del tiempo, estaba seria con los brazos cruzados sin demostrar ninguna expresión, supuse entonces que fuera lo que fuese lo que Logan la decía no era muy alarmante. A los pocos minutos de charla aparecieron Maggie y Enid, esta ultima no se separaba mucho de la mayor últimamente, y para mi sorpresa resulto que Enid entró en la casa con Ronin y Maggie y Logan se fueron por otro lado juntos.
