Jasper pasó a las dos en punto tal como había prometido. Louisa se había vestido con unos sencillos pantalones negros y un suéter beige, además de una enorme chamarra negra para cubrirse del frío, ese día era especialmente helado.
El rubio la recibió con una sonrisa, ayudándola a subir al jeep. Louisa ni siquiera recordaba lo alto que era, ni tampoco lo lujoso.
—¿No pondremos música? —preguntó al cabo de un rato en silencio.
La incomodidad era palpable, casi podía cortarse con un cuchillo.
—¿Qué quieres escuchar?
—¿Algo para cantar?
Jasper frunció el ceño, como si Louisa estuviera hablando de algo irreal.
Acabó por poner la radio, la estación que había elegido era tremendamente aburrida, como si no supieran lo que es música. La chica se tomó la libertad de buscar alguna canción que pudiera cantar, quizá bailar. Terminó escogiendo una canción pop, sí, demasiado cliché, pero al menos podía bailar.
Le incomodaba que Jasper se mantuviera quieto, parecía una estatua, incluso se le veía tenso.
—Vamos, Jasper, baila.
—No escucho esa clase de música, Louisa.
La chica acabó por rendirse, mirando a la ventana con un suspiro.
Odiaba compararlos pero cómo no iba a hacerlo, Jasper era refinado hasta lo insoportable; Louisa no podía imaginarlo en algún lugar cantando a todo pulmón, como si la gente no existiera. Claro, tenía sus cosas buenas, por ejemplo sus perfectos modales o lo culto que era.
El restaurante era increíble, seguramente el mantel valía más que todo lo que traía puesto.
—Jasper, debiste decirme lo elegante que era esto —se quejó la chica al ver a todas las mujeres con vestidos y abrigos carísimos.
El rubio sonrió.
—Era una sorpresa.
Se sentaron en una mesa al centro del salón, no tardó en fijarse en el hombre que tocaba el piano, cada nota era tocada con delicadeza, sintiendo cada sonido.
Louisa cerró los ojos un momento, era maravilloso.
—¿Te gusta? —preguntó el rubio.
—¿Bromeas? Es increíble, la emoción con la que toca...
El rubio sonrió de oreja a oreja.
—Sabía que te gustaría.
La chica acabó por pedir un filete, intentando no fijarse en el precio, le parecía demasiado excesivo para apenas doscientos gramos de carne.
Comieron en silencio, disfrutando de la música, a Louisa incluso le parecía un insulto hablar, la melodía bastaba para poder disfrutar de la deliciosa comida. No sería difícil acostumbrarse a eso.
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brown eyes || jasper h. & paul l.
Fiksi Penggemar❝Son como un rompecabezas... sólo funcionan cuando están juntos❞ Portada hecha por marveltwd. Los personajes pertenecen a Stephenie Mayer, salvo por Louisa y su familia. Todos los derechos reservados. Fanfic Jasper Hale y Paul Lahote.