Capítulo 35.

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~ Aún no y para siempre sí..


Cuando el destino dice que todavía.. es todavía, pero no es por maldad, es para que terminen de escribir una etapa gris la cuál van a superarlo muy pronto.. que la fuerza y la esperanza nunca se pierdan para que así le den una emotiva bienvenida a las nuevas, coloridas y eternas etapas.

Como la familia Kim y la familia Jeon.

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Dos días antes del grito desgarrador de Kim HangByul..

La habitación amanecía aún con esos dos exquisitos aromas mezclados emanando un cálido ambiente, los primeros rayos del sol traspasaban las lunas de la gran ventana directo hacia un lado perfecto..

Hacia la cama.

Esas luces naturales como el sol y el cielo azul ayudaban al brillo especial de esas pieles, esos dos preciosos cuerpos desnudos que serían una gran majestuosidad si los pintaran.

Toda una obra de arte.

Dos almas descansando después de haber consumado su amor..

Un peliplateado abrazando de cucharita a un pelinegro..

Sumamente dormidos y agotados debido a unas tres rondas..

El héroe no dejó de hundirse en su ángel por casi toda la madrugada..

Acaba de descubrir que nunca le bastará, nunca va saciarse, siempre querrá de su pequeño, no desea a nadie más, sólo a él, lo que ambos han sentido es inigualable.

NamJoon va seguir disfrutando de su magnífico SeokJin en su lecho duela a quién le duela y nadie se lo impedirá.

El poder del sentimiento..

Es el señor poder.

~♡~

Unos brillosos y cansados ojos de miel se abrían lentamente, como si alguien lo hubiera despertado y las alarmas eran lo de menos en estos momentos, comenzó a mover un poco su cuerpo o intentarlo porque sentía unas manos grandes que le sujetaban su fina cintura.. de una manera para que nunca escapara, también sentía un estremecedor aliento en su nuca.

Abrió por completo sus preciosos ojos y entonces recordó..

Su corazón se detuvo al mirar esa habitación nueva para él, su rostro se puso pálido y los ojos en blanco.

Entonces no fue un sueño..

Es una maravillosa y dolorosa realidad.

El pánico se apoderaba de su interior y giró la cabeza hacia el hombre que lo tenía preso en esas algodonadas sábanas, su cuerpo caliente con el otro tan apretaditos que su rubor regresaban a las mejillas.

Ahora sus ojos derramaban las primeras lagrimas del día..

--M-Me e-entregué a N-NamJoon..

¿Labios Compartidos?                           ~Nj~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora