Nos acomodamos en la mesa, todos cargaban y jugaban con la bebé, la mamá de Jack se puso a servir la mesa, mientras el platicaba con su padre quien estaba sentado a su lado.
—si este idiota te trata mal avisame— me dijo Taylor quien estaba a mi lado.
—¿Jack es un idiota?— reí.
—como no tienes una idea, pero es buena bestia.
—lo se, aunque a veces se comporta como un gran tonto, está obsesionado con los videojuegos.
—eso no es nada, se pone como niño chiquito cuando alguien le llega a ganar en algún juego— me susurro al oído —Iker una vez le ganó en Call of Duty y Jack no le hablo en una semana.
—¿En serio?
—¡Hey! ¿Ustedes que tanto se secretean?— nos dijo Jack sonriendo.
—nada, le platicaba a Lena como Iker te pateo el trasero en Call of Duty— la voz de Taylor era burlona.
—eso fue suerte— Jack parecía algo indignado —nadie puede ganarme.
Cassy se había quedado dormida así que la mamá de Jack la recostó en una de las recámaras de la planta baja, ya habíamos terminado de comer, pero seguíamos platicando. La familia de Jack era muy amable, sus hermanos eran muy simpáticos, me sentia muy agusto con ellos pero ya casi era hora de irme. Iker y Taylor se fueron a traer unas bebidas, mientras sus papás limpiaban la mesa.
—creo que tengo que irme— le dije a Jack al oído —ya casi dan las ocho, llegare tarde al casino y todavía tengo que ir a dejar a Cassy.
—no te preocupes, yo la llevo— se quedó pensando un momento —es más, déjala aquí, ella está dormida, si quieres voy y te dejo y cuando vuelva, si ya despertó se la llevo a tu mamá.
—Jack, que pena, no quiero causar molestia.
—para nada— volteo a ver a su madre —mamá ¿me puedes cuidar a la bebé mientras dejo a Lena en su trabajo?.
—claro, me encantan los bebes, yo la cuido mientras vuelves
—lo ves, no hay problema.
—esta bien, vamos…
Jack y yo salimos de su casa rumbo al casino, su familia me cayó muy bien, sus papas son muy dulces y sus hermanos muy divertidos. Se ve que son una familia muy unida, aunque él me había dicho que tenía más hermanos pero no estaban ahí.
—Jack ¿Por que tus otros hermanos no estaban en la comida?
—mis cuñadas y mis hermanas llevaron a los niños a un paseo, Taylor e Iker no pudieron ir por el trabajo— volteó a verme —pero no te preocupes, pronto los conocerás a todos.
Después de algunos minutos llegamos al casino, baje del auto y Jack hizo lo mismo, caminamos hacía la puerta y Andrew estaba parado en la entrada, como ya pasaban de las 8 creo que me estaba esperando.
—tengo que irme— empecé a caminar pero Jack me tomo de la mano y me lo impidió.
—tienes que darme un beso— sonrió.
—eres un tonto.
Me acerque a él y lo bese, después empecé a caminar y voltee hacía Jack para despedirme con la mano, mi chico se subió a su coche y se fue, Andrew al verme se acercó a mí.
—veo que volviste con el.
—si… lo siento por llegar tarde.
—no te preocupes— me tomó del brazo —vamos adentro— parecía nervioso.
—¿Que pasa?— lo mire confundida —¿Esta todo bien?
—no, Wesh está adentro, quiero que te metas a tu oficina y no salgas de ahí.
—¿Por qué?— empezaba a ponerme nerviosa.
—no quiero que te vea, mira Lena, me importas mucho y si te topas con el se que te ofenderá, no quiero armar un escándalo.
—Andrew, no puedes esconderme cada que el venga, además se cuidarme sola.
Entramos al casino y caminamos a toda prisa a mí oficina, cuando entramos Andrew se relajo un poco.
—tu solo quédate aquí por favor… — me tomó del rostro con ambas manos —aunque no lo creas, aun te amo— me dio un pequeño beso en los labios —siento la necesidad de protegerte.
—Andrew…
—por favor, te prometo que solo será unos minutos— otro beso —por favor— en su mirada reflejaba una súplica interna, suspire un poco y asistí con la cabeza.
Andrew me solto y salio de la oficina, me senté en el escritorio y empecé a revisar los papeles que tenía sobre él, era todas facturas así que me puse a archivarlas. No podía negar que Andrew estaba volviendo a ser el hombre que conocí, pero ni aun así se borraba el recuerdo del bebé que perdí por su culpa y su ambición. Se que todos cometemos errores y tenemos derecho a una segunda oportunidad, pero quien le dará una segunda oportunidad a mí bebé. Por otro lado, no quiero vivir del pasado, ahora tengo a Cassy y mí vida se debe enfocar en ella, creo que es tiempo de perdonar para poder vivir en paz.
Ya había pasado dos horas y yo seguía encerrada en el despacho, empezaba a desesperarme. Para seguir haciendo tiempo encendí la computadora y me puse a checar los archivos capturados, de pronto un ruido llamó mi atención, era como si alguien estuviera caminado muy cerca, no le di importancia y seguí con lo mío, de pronto mi puerta se abrió y lo vi frente a mí. El Lic Wesh me miraba fijamente, me levanté de la silla y me quedé inmóvil, no sabía qué hacer.
—asi que aqui estas— Wesh era un hombre mayor pero atractivo, tenía algunas canas en su pelo, su cuerpo no le envidiaba nada al de Andrew al igual que su altura, se podría decir que era un hombre mayor muy bien conservado.
—¿Qué haces aquí?— estaba entre sorprendida y temerosa, no sabía qué esperar de este hombre.
—nada— se encogió de hombros —estás más guapa que cuando trabajas en el ayuntamiento— su mirada me escaneo de arriba a bajo.
—vete…
—¿ahora me tuteas?— parecía sorprendido.
—no eres mi jefe y no tengo porque respetarte.
—ya veo— dio unos pasos hacía mí —sabes, Andrew me dijo que eras muy buena amante ¿Que le diste a ese hombre para tenerlo arrastrando a tus pies?
—eso no es algo que te importe— mi cuerpo comenzó a temblar.
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.Claudia TayRe ❤️
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Aprendiendo a confiar
RomanceLena es una chica que atraviesa por una situación demasiado deprimente y esto la hace pensar que jamas volvera a confiar en los hombres, hasta que conoce a Jackson Holmes, el dueño de una tienda de videojuegos. Pero Lena no facilmente volvería a con...