GOOD BOY JINTAE

Capitulo 8

Jin avanza hacia los dos hombres sin titubear y antes de que puedan reaccionar acierta un puño en la quijada de uno e inmediatamente un codazo en la nariz del otro. Ambos hombres caen al suelo, Tae esta perplejo y Jin lo toma, lo levanta y lo sube sobre sus hombros. Nam inmediatamente tras ver a su novio en acción se encargó con Hobi del tercer hombre y toman a Jimin.

–Bajame! Bájame!

–debemos salir de aquí lo más pronto, lleven a Jimin entre los dos yo me encargo de bambi.

– ¿quee? ¿Cómo que bambi? Bájame de una puta vez que puedo caminar.

Se oyen sirenas a lo lejos y los hombres que estaban dispuestos a seguirlos retroceden y huyen del lugar.

Jin abre el auto con Tae vociferando a cuestas, lo deposita en el y cierra la puerta. Al mismo tiempo, su novio junto con Hobi ingresan a Jimin junto a Tae. Finalmente, Hobi va con ellos atrás, Namjoon va manejando y Jin va de copiloto.

–eso fue muy tonto Jin, te pudo pasar algo.

–pero no paso, era eso o que a bambi se lo cenaran.

–¿podrías parar de decirme así? Por si te diste cuenta no actuó como bambi.

–pero si luces como uno.

–imbécil.

–hey, hey. El que llamas imbécil es mi novio y te salvo el culo. Así que por lo menos agradece.

–si Tae, no me imagino que hubiera pasado si ellos no llegan. Yo estaba aterrado.

–necesitan curarse, ambos están golpeados. Deberíamos ir a mi bar. Se algo de primeros auxilios.

–no, no, prefiero ir al apartamento de Jiminie, él tiene lo necesario si de curarnos se trata.

–que odioso eres Tae, el solo quiere ayudar.

–puede hacerlo allá ¿Cuál es el problema?

Llegan al apartamento de Jimin que queda en el octavo piso, por lo que deciden acompañarlos. Para colmo de males, el ascensor está dañado y deben subir a pie las escaleras. Jin recuerda que debe madrugar y se llena de impaciencia porque en el estado de los dos chicos tomara mucho tiempo. Así que sin pensarlo toma a Tae de nuevo que esta vez se zafa de su agarre adivinando sus intenciones.

–de ninguna manera yo puedo solo.

–a tu ritmo nos demoraremos más. Nam carga tu a Jimin yo me la arreglo con bambi.

Namjoon rueda sus ojos pero accede y está de acuerdo con su novio y lleva a Jimin en su espalda. Tae se irrita ante la mención del apelativo por tercera vez. Jin forcejea de nuevo con él y como no tiene tiempo que perder lo carga en forma nupcial. Tae se siente avergonzado por la posición y comienza a ponerse rojo. Jin lo mira y se ríe.

–¿de qué mierda te ríes?

–ahora si te pareces más a bambi.

–si no estuviera tan adolorido, no te dejaría salir con la tuya.

–eso lo dudo, bambi querido.

Tae recuerda el momento en que Jin derribo sin problemas a esos dos hombres y lo mira realmente impresionado, observa por primera vez con detenimiento sus hombros anchos y siente sus fuertes brazos, puede darse cuenta que es alguien bastante fuerte y muy masculino. Se pregunta cómo un hombre así puede ser homosexual. Siente por primera vez su olor, por debajo de su perfume y le resulta exquisito y llamativo, una fragancia limpia y fresca.

Cuando ingresan al apartamento Jimin le indica a Hobi donde está el kit de primeros auxilios. Una vez con el comienza con Tae, quien se queja a no más poder. Jin se exaspera de nuevo y le dice a Hobi que continúe con Jimin que él se encargara de Tae.

–déjame yo atiendo a bambi, encárgate de Jimin.

Tae le lanza una mirada asesina. Jin toma un algodón, lo humedece con alcohol y en lugar de ser cuidadoso como Hobi, es algo tosco.

–oye! Eso duele.

–pensé que eras un chico rudo. Pero veo que como pensé eres todo un bambi.

Tae aprieta sus mandíbulas y decide no rechistar. Jin toma su mandíbula con una mano y se acerca para limpiar sus heridas. Mientras lo hace, ya con la claridad de la luz artificial de las lámparas del apartamento, Tae puede ver el hermoso rostro del hombre que hace poco conoce y le cae mal. Sin darse cuenta observa con detenimiento cada uno de sus rasgos y reconoce que es realmente hermoso. Sus ojos se quedan fijos en sus labios pero Jin no se da cuenta sino su novio, quien aparta a Jin y le dice que es suficiente.

–espera amor, aún le falta aquí.

Nam se impacienta y Tae lo nota.

–Está bien. Déjalo. Puedo hacerlo. Muchas gracias por todo.

Al final los tres se marchan y el dúo de amigos les agradecen por haberles traído sanos y salvos a casa y haberles curado sus heridas.