GOOD BOY JINTAE

Capítulo 73

Jin se había quedado dormido con Seokmin en brazos, quien también dormía dulcemente. Tae acababa de lavar la loza luego de que Jin había preparado una exquisita cena para los dos. Aunque Jin se resistió al principio, Tae fue muy insistente ya que consideraba que era lo menos que podía hacer después de haber visto a su mayor dedicar buen parte de la tarde en sorprenderlo con una variedad de platillos suculentos. Lo que no esperaba cuando terminara era encontrarlo dormido por lo que recostado en el marco de la puerta del dormitorio lo observaba haciendo un puchero, pues él quería ser castigado por Daddy como lo había prometido en la mañana.

Resignado se acerca para tomar al pequeño Seokmin y llevarlo a su cunita. Una vez lo acomoda se despide de él con un besito en su naricita.

–duerme bien mi hermoso bebé.

Cuando llego a su cuarto trato de hacer el menos ruido posible. Toma un rápido baño, cepilla sus dientes y se pone su pijama. Busca una manta para cobijar a Jin y cuando le da un beso de buenas noches en los labios, siente el aliento y susurro de la voz de Jin golpear su rostro.

–te estabas demorando mucho bebé. ¿Acaso estabas evitando ser castigado?

Los ojos de Tae se iluminaron y su corazón se agitó rápidamente. De inmediato lo levanto poniéndolo de rodillas. El pulso de Tae se aceleró de anticipación a lo que iba a ser sometido, sus piernas temblaban un poco.

–te has portado muy mal con Daddy. Lo has dejado solo y deseoso de ti.

Esas palabras golpeaban fuerte en su interior así como en su pene.

–sí, Daddy. Castígame, he sido un niño malo.

–sí, muy malo. No sabes las ganas que tengo de azotarte y follarte duro hasta hacerte llorar de placer bebé.

–ooooh siiiiii...yo también lo quiero Daddy.

De inmediato Jin se posiciona detrás de Tae y baja su pantalón de pijama junto a su bóxer dejando su culo expuesto. Lleva su mano a la espalda de Tae para hundir la parte superior en la cama.

–estira tu lindo culo para mí.

–sí, Daddy.

Tae jadeaba anhelante por lo que fuera que le hiciera Jin.

Jin tomó su cadera con una de sus manos y con la otra azotó una de sus nalgas haciendo eco en la habitación.

–no sabes cómo extrañe tu hermoso culo.

Otra sonora palmada se estrelló contra su glúteo.

–no sabes cuánto soñé follarte duro imaginándote así con tu culo tan dispuesto, expuesto y abierto para mí.

–oooh Daddy...

– niño malo, no sabes cuantas veces me puse duro en lugares inadecuados de solo acordarme de cómo te follaba y te dejabas follar.

Otra sonora palmada resonaba en la delicada y ya enrojecida piel.

–ummmmm Daddy...castígame, destrózame con tu enorme polla.

–¿estás tan ansioso de que entre en ti bebé?

–siiiiiiiiiii, por favor Daddy. Te necesito tanto Jinnie. Entra en mí de una vez.

–mierda bebé verte tan deseoso me encanta.

Jin comienza a prepararlo con sus dedos, pero Tae está muy ansioso por sentir a Jin dentro de él totalmente y se remueve desesperado.

–Jinnnieee, no necesitas prepararme ya estoy listo para ti. Por favorrr....te necesito amor.

Tae ve dudas en Jin, porque este teme lastimarlo.

–follame, follame mi amor como solo tú lo sabes hacer.

La lujuria se apodera de Jin al escucharlo expresarse tan descaradamente y alinea su pene en la entrada. Comienza a entrar lentamente pero Tae mueve su culo hacia atrás para enterrarse de una vez.

–mierdaaaa...ummmmmmmmmph...ssssssssssss....estas tan deliciosamente apretado bebé.

–aaaaaaaaaaah Jinnie es tan grande, dura y deliciosa como la recuerdo. Por favor muévete y follame duro.

–tan impaciente....me encantas bebé.

Jin comienza a mover rápidamente sus caderas y con cada gemido, jadeo, palabra sucia y maldición que emitía Tae subía el ritmo de sus estocadas. Desde su posición podía ver el hermoso culo de su novio y como se enterraba y salía de él una y otra vez. Lo que lo hacía gemir y gruñir de placer. Ágilmente Jin lo gira dejándolo de lado, quedando una pierna de Tae apoyada en su torso y la otra apoyada en su cama. Continua dándole fuertes estocadas mientras contempla su rostro lleno de placer y su cabello vuelto un desastre por el fuerte vaivén. Después de un tiempo cambia posición nuevamente, poniendo a Tae totalmente sobre la cama boca arriba levantando sus piernas sobre sus hombros.

–voy a follarte tan duro y toda la noche que olvidaras tu nombre bebé.

–creo que ya lo olvide. Solo puedo pensar en tu dura polla rompiéndome y solo anhelo que me siga destrozando toda la noche.

Jin sonríe satisfecho y se hunde con fuerza entrando y saliendo rítmicamente, haciendo que sus fuertes arremetidas resuenen por el fuerte choque de sus pieles. Ese sonido es como leña que hace arder sus cuerpos con más deseo. Sus cuerpos arden de deseo y están totalmente sudorosos, Tae está a punto de venirse pero Jin se lo impide.

–aún no bebé.

–aaaaah Jin, no se cuanto pueda resistir.

–resiste, no querrás que Daddy te castigue.

–aaaaaamppph...me estas volviendo loco Daddy.

Jin baja sus piernas y se mete entre ellas y busca la boca de Tae para saborear su cavidad mientras se empotra una y otra vez en su interior.

–eres tan mío mi amor. Ya nada podrá detenerme de querer joderte todas las noches o cuando se me antoje.

–oooooh si Jinnie, yo también quiero que lo hagas. Tú sabes que siempre he sido tuyo.

Y así mientras se besaban con devoción y hambre, ambos explotan de placerahogando sus gemidos en la boca del contrario. Saciándose el uno del otro perosabiendo que la noche aún era joven y tal vez no alcanzaba para calmar elhambre que tenían el uno del otro.