Capítulo 62

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–¿tú crees que haya alguna forma de comunicarme con él sin que mi padre los rastree?

–tal vez, pero es muy riesgoso para tu pareja. Es mejor que esperes que las cosas se enfríen.

–sí, creo que es lo mejor. Pero me gustaría hacerle saber que estoy bien y que por el momento no puedo comunicarme con él.

–¿tienes algún email al que lo puedas contactar?

–ummm, no lo conozco. Pero se me el de mi amigo Jimin que puede darle la información.

–bien, dámela y yo le haré saber. Pero solo lo hare por esta vez Tae. Es peligroso y no me imagino lo que nos puede hacer tu padre si se entera.

–entiendo tío, gracias.

–bueno, espero tengas todo listo para mañana.

–sí, tus notas e indicaciones han sido muy útiles para ponerme al día.

–tienes suerte que tu primo Minjae inicie el semestre junto a ti.

Al otro día Tae ya estaba listo para ir a la universidad junto con Minjae. Las clases le habían parecido fáciles y no había sido tan terrible como creía. Aprovecho para buscar un curso extracurricular sobre fotografía y quedó satisfecho al encontrarlo y poder agregarlo a sus créditos.

Aunque para Tae había sido un día normal de universidad no se había dado cuenta que para muchas personas su presencia había sido cautivante, en especial para alguien que empezaba a obsesionarse con conocerlo.

Por otro lado en Seúl, Jimin al ingresar a su correo pudo notar en su bandeja de entrada un mensaje poco usual. Cuando lo abrió y empezó a leerlo su corazón se disparó de emoción al tener noticias de Tae. Supo que no era el quien lo enviaba por su forma de escribir y porque se refería a él en tercera persona. El mensaje era corto y conciso donde le informaban que Tae estaba bien pero que por el momento no podía comunicarse.

El mensaje lo dejaba algo tranquilo pero con muchas preguntas. Llamó a Jin de inmediato para compartir la información y este no conforme con lo que le decía quería ver el correo. Al recibirlo, le parecía tan ajeno por la brevedad del mismo, pero por lo menos le tranquilizaba el saber que estaba bien su pequeño. Por lo menos sabía que estaba bien y no tenía que contratar ningún investigador por el momento. Pero de inmediato sintió mucha nostalgia al no tenerlo junto a él, de nuevo su sonrisa, sus gestos de bebé y sus actitudes espontáneas vinieron a su mente arrancándole lágrimas que bajaban lentamente por su rostro. De inmediato, fue a su galería de fotos para deleitarse y refugiarse en los recuerdos. No podía apartar su mirada de sus gestos, sonrisa mágica y mirada dulce. Impotente sin poder acariciar su rostro acarició con la yema de sus dedos la pantalla que reflejaba su hermosa imagen.

Pasaron seis meses y Dahyung ya estaba comprometido para casarse tan solo para guardar su posición social. Ante los demás trataba cordial a su prometida pero a solas la trataba con frialdad dejándole claro que solo era por conveniencia. La pobre mujer, al contrario de su pareja, tenía sentimientos hacia Dahyung y nunca sería correspondida y tendría una vida junto a él llena de dolor y desprecios.

Seokjin aún no había vuelto a recibir ninguna información de Tae y eso lo tenía triste y preocupado. Recordaba con nostalgia la sonrisa cuadrada del menor y los momentos vividos junto a él. Algo que ya le parecía que había sucedido hace años.

Jimin miraba como su amigo estaba abstraído y tenía un semblante triste.

–Hyung. Estoy seguro que él está bien. Tal vez no se ha podido comunicar. Sabes que con ese ogro de padre debe ser difícil.

–solo me queda 1 año y medio para graduarme. Espero poder obtener un buen empleo y estoy decidido a buscarlo Jiminie.

–Hyung, puede ser peligroso.

–no me interesa.

–cuando lo vayas a hacer tienes que avisarme para ir contigo.

–está bien, si vas conmigo será mejor.

Tae también extrañaba horrores a Seokjin y le tenía exasperado la intensidad de Jenny pidiéndole en repetidas ocasiones una oportunidad entre ellos. Le había dicho de mil formas que no estaba interesado pero esta no desistía sino que se encaprichaba cada vez más. Cada vez le parecía más fastidiosa la cercanía y la actitud de la joven, a la que al ver de lejos procuraba ocultarse.

Se había enterado del compromiso de su hermano y se lamentaba por la pareja porque se imaginaba lo mucho que podría sufrir a su lado.

Añoraba los momentos que había pasado con Seokjin y aunque había continuado con su vida cotidiana sentía que vivía a medias sin la presencia del mayor. No tenía una foto de él pero su rostro y su sonrisa dulce no se apartaba de su pensamiento. A pesar de estar en un lugar abierto cerró sus ojos para tratar de hacer más viva su imagen, más palpable. Se esforzó en hacerlo y su pecho palpitaba de emoción porque aún sus rasgos, gestos y sonrisas dedicadas a él estaban frescos y vivos en su memoria, logrando recrearlo como si fuera una visión real de la persona que amaba. Sus lágrimas amenazaban con salir, su corazón apretaba y dolía deseando que su visión fuera real. Él sabía muy bien que siempre sería Seokjin, solo él sería la persona que ocupara su corazón. Y sin poderse contenerse más enterró su rostro en sus piernas y llevó sus brazos a formar un cuadro alrededor de su cabeza apoyadas en sus rodillas para llorar en silencio.

GOOD BOY JINTAEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora