Let's be Unpredictable

Mark

(Narra Sam)

Me encantaba ver a Ashton celoso, pero no tenía de qué preocuparme, Mark solo era un amigo y compañero. Habíamos acabado las funciones y como él era el nuevo tenía que enseñarle las coreografías para que lo hiciera perfecto cuando volviéramos de vacaciones. Paul, Robert y Tom habían ido a pasar las fiestas con su familia y yo me había quedado en Londres. Hacía años que  no veía a mi familia, solo quedábamos mi padre, mi hermano y yo. Las cosas no habían acabado muy bien tras la muerte de mi madre hacía 5 años por estas fechas así que decidí que era la hora de irme de casa y me mudé con Paul y su familia. Paul había insistido en que fuera con él a pasar las navidades a su casa pero no tenía ganas. Las navidades eran algo malo para mí. Pasaba los días ensayando con Mark y después componiendo cosas nuevas en casa. Mark me había dicho si podía enseñarme un nuevo paso que se le había ocurrido. No me opuse, esa tarde no tenía nada que hacer. La verdad es que el chico era muy bueno, además de guapo. Ashton estaba celoso de que pasara tiempo con Mark pero no sé por qué se preocupaba tanto, no lo veía como un interés amoroso, solo como un amigo. Mark estaba siendo un gran amigo desde que lo había conocido. Era muy majo y simpático y siempre se preocupaba por mí. Estaba atento conmigo en los ensayos y sabía cuándo estaba mal. Los últimos días habíamos hablado mucho fuera del lugar de ensayo, por lo que lo consideraba un gran amigo. Estos días que no estaban ni Ashton ni los chicos necesitaba alguien con quien divertirme un rato.

Entonces, ¿qué te parece el nuevo paso? – me preguntó Mark tras enseñármelo.

Es perfecto. ¿Individual o en pareja? – era un paso realmente complicado y pensaba que era mejor si lo compaginaba con otra persona.

Pareja – me tendió la mano y la cogí, me levantó del suelo y practicamos el paso.

Llegó un momento que resbalé y él me cogió de la cintura atrayéndome hacia él. Nos quedamos muy juntos y ninguno supo que hacer, parecía que estaba a punto de besarme. Entonces el teléfono sonó.

Perdona, tengo que contestar – me aparté de él un poco confusa por lo que había estado a punto de pasar.

Miré el móvil y vi que era Ashton llamándome. Le hice una señal a Mark y salí de la habitación para poder hablar tranquilamente con él.

Hola – contesté brevemente.

¿Hola? ¿Así es como saludas a tu novio? – sonó su voz.

Emmm – no sabía que decirle, no era muy experta en tema de novios.

¿Qué haces? – me preguntó.

Ensayo un baile nuevo.

Con Mark, ¿verdad? – pude notar como su voz cambiaba y se ponía seria.

Sí, pero... – no me dejó acabar la frase,

No pasa nada, está bien, confío en ti – esa respuesta no me la esperaba. Confiaba en mí y yo había estado a punto de besar a Mark.

Te noto rara, ¿estás bien? – siguió hablando.

Solo que no me gustan estas fiestas, ya lo sabes – intenté disimular.

No digas eso, ojalá estuviera ahí para darte un abrazo – Me dijo con tristeza, ¿por qué era tan mono este chico?

Tengo ganas de verte.

Y yo Sam. Tengo que dejarte, tengo que llevar a mi hermano al dentista. Vengo a Australia para ser e taxista de mi familia, ¡qué bien! – dijo irónicamente.

Yo también te quiero como chófer – le solté.

Deseo concedido, mi tarifa es cara, ¿podrás permitírtelo? – empezó a reir.

Adiós Ashton

Adiós Sam, hasta pronto.

Colgué y volví a entrar en la sala de baile. Mark estaba sentado en el suelo calentando.

¿Todo bien Sam? – preguntó girando la cabeza hacia mí.

Sí, solo era mi novio – le aclaré, así sabía que no podía repetirse lo mismo que hacía un rato.

Ashton se llamaba ¿no?

Correcto.

Es un chico con suerte – agachó la cabeza y me dejó sorprendida.

Me tengo que ir Mark, acabo de acordarme que tengo que hacer unas cosas en casa, ya hablamos luego. – cogí mi bolsa y salí casi corriendo de allí.

 ¿Acaso estaba intentando ligar conmigo Mark? Esa idea no dejó de rondarme por la cabeza toda la tarde. ¿Por qué había estado a punto de besarlo?, seguramente había sido por culpa de la música y del baile que era muy lento o tal vez fuera porque echaba de menos a Ashton y Mark me recordaba a él. Lo que tenía claro era una cosa, quería estar con Ashton, por encima de todo y Mark era mi amigo. Cogí el móvil y empecé a mandarme mensajes tontos con Ashton. Eso me relajaba. Solo pensaba cuando sería el momento en el que Ashton volvería a Londres. Lo necesitaba.

"Para navidad quiero un canguro" (Sam)

"Creo que si te traigo uno sería contrabando" (Ashton)

"Joo :( " (Sam)

"Puedo arriesgarme, vendrías a verme a la cárcel?" (Ashton)

"Por supuesto. Sería la novia de un cantante preso. ¿Qué quieres para navidad?" (Sam)

" A tí, y tú? (Ashton)

"un canguro" (Sam)

" y a tí también idiota" (Sam)

"Vale, me había asustado. Voy a buscarte el canguro, se buena." (Ashton)