II

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Tras el éxito obtenido con su pequeño experimento, regresaron a casa de Rose.

Era hora de poner a prueba el nuevo hechizo de Syous, esta vez con un elemento de su mundo siendo parte del mismo.

Ambos se encontraban en el patio trasero, lugar que para ese momento se había convertido en un campo de pruebas.

El hechicero realizó su conjuro, ahora en presencia de Rose. Un circulo luminoso con patrones geométricos apareció, todo se encontraban girando lentamente, unos en dirección a las agujas del reloj y otras en contra.

– ¿Qué es todo esto? – Preguntó ella.

– Es en esencia, un mapa de tu mundo... está en movimiento porque es su flujo natural, si mi idea funciona, este se interrumpirá... O al menos veremos una marca que nos indique que algo no está bien.

– Es increíble, ¿Cómo lograste hacer eso? El otro día ni siquiera pudiste terminar de escribir.

– Bueno, el poder de la reliquia lo hizo más sencillo, pensé en el portal y lo que vi dentro. Copié algunos detalles y, supongo que las ideas fluyeron por si solas – rio.

Momentos después, Syous envolvió la rama rota en una especie de esfera para colocarla en el centro y se apartó.

Al dejarla, ésta comenzó a flotar y giró sobre su propio eje, rayos brotaron de ella y chocaron con la luz.

Sus sospechas resultaron ser ciertas. Colocar un elemento de su mundo provocó una reacción.

El mapa se tornó azul y siguió moviéndose, pero dentro de los patrones interiores, uno cerca del centro y otro un poco más alejado, pequeñas figuras adoptaron un color rojo de tonalidad clara.

– ¿Qué significa eso? – Preguntó confundida.

– Funcionó – respondió con satisfacción –. Esas marcas son los lugares que visitamos ¿Vez esa cerca del centro? – Señaló.

– Ajá.

– Nuestra posición actual está en medio, esta representa el bosque... la otra es donde apareció la salamandra.

– Ya veo, entonces ¿Si una marca roja aparece significa que otra parte de tu mundo se manifestó aquí?

– Así es. Tendremos que revisar esto con frecuencia. Desearía haber creado algo que nos ayudara a prevenirlo, pero fue lo mejor que pude hacer – dijo con cierto tono de culpa.

– No te preocupes, es sorprendente que hicieras algo así en tan solo un día – intentó hacerlo sentir mejor.

– Gracias – esbozó una leve sonrisa

Una vez establecido eso, ambos decidieron esperar sentados charlando tranquilos junto al mapa para ver si algo sucedía.

– Por cierto, puedo preguntar ¿Qué hiciste mientras estabas dentro del portal? Mencionaste que te hubiera servido mi ayuda – dijo apenada.

– Fue toda una locura, caminaba por ahí estudiando los puntos en los que nuestros mundos se conectan y de pronto aparecía en otro lugar.

– ¿A qué te refieres?

– Un momento estaba en el pasillo y de pronto aparecí de cabeza moviéndome por el techo, después por una pared.

– Sé que debes pasar por cosas peores, pero eso suena muy extraño – rio.

– Lo fue – rio también –, supuse que sucedía algo extraño relacionado con el espacio, por eso asumí que ese objeto era la reliquia.

– ¿Y en que podría haber ayudado de estar ahí?

Magical Chronicle : The Relics of CreationDonde viven las historias. Descúbrelo ahora