Vendida a mi ex

Capítulo 2

Tenia genuinamente planeado subir este capítulo hasta el domingo, pero es la semana de estreno así que quiero decirles feliz mitad de semana, disfruten el capítulo y ahora si esperen el siguiente el domingo :)

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Déjame ir

La gente seguía aplaudiendo y por más que todas esas personas estuvieran a algunos metros de mí, el sonido de sus aplausos se escuchaba tan lejanos, como si en vez de metros fueran kilómetros los que nos separaban.

Mis ojos grises seguían clavados en esos ojos azules que no se separaban de mi cara, ¿Que hacía el aquí? Era la pregunta que más resonaba en mi cabeza. Tenía demasiado tiempo sin verlo, unos 3 años aproximadamente, él se fue sin siquiera despedirse. Recuerdo como estuve ese mes, completamente destrozada.

Nunca fue un secreto para mí que su familia poseía mucho dinero, pero jamás creí que tanto como para pagar 50 millones solo por una chica en una subasta clandestina.

Un hombre comenzó a empujar mi caja sacándome con sutileza del escenario, esto hizo que volviera a la realidad. El hombre era bastante grande en comparación conmigo, aparte de que tenía demasiados músculos, ¿Consumió esteroides o algo? definitivamente era del tipo de hombres con los que no querías tener problemas.

-Aquí está el dinero del señor Miller- otro hombre llegó con 3 maletines negros, en los que supongo que estaban los 50 millones. El segundo hombre era igual de alto y musculoso que el hombre que tenía al lado.

-Toda suya- dijo el primero sacándome de la caja para después darme un pequeño empujón hacía el segundo hombre. Una vez que se retiró de nuestra vista, el segundo hombre cambio su mueca fría e intimidante por una más relajada y me dedico una pequeña sonrisa de boca cerrada.

-Señorita Leblanc, necesito que me acompañe por favor- yo asentí sin abrir mi boca y camine a un lado de él hacía una puerta que creía que era la salida, sinceramente quería ver a Adrien y pedirle explicaciones, aunque también estaba bastante agradecida de haber sido vendida a él y no a alguien más.

Una vez que salimos del lugar un lujoso auto naranja se estaciono enfrente de nosotros, el hombre rápidamente me abrió la puerta de atrás y yo me limite a entrar al auto, una vez dentro me di cuenta de que no estaba sola en la parte trasera, ahí estaba él, Adrien.

Mi respiración se volvió a cortar y los latidos de mi corazón se aceleraron, odiaba que él tuviera este efecto en mí porque creí ya haber superado ese capítulo de mi vida, aunque pensándolo bien quizá mi corazón se acelera no por tener sentimientos por él, si no por miedo.

Y creo que es una reacción natural, si pongo todo en perspectiva, fui vendida a este sujeto por una cantidad exorbitante de dinero. Si yo no hubiera estado aquí probablemente él hubiera comprado a otra chica. Esta mal la persona que vende a las mujeres, pero están igual de mal las que las compran como si fueran objetos y eso fue exactamente lo que él hizo conmigo.

-Zoe...- comenzó a decir, pero tuve que interrumpirlo porque después de meditar todo, él también me producía asco, igual que Paulina y Nick y que todos los que estaban metidos en este negocio de alguna forma.

-Cállate Miller- fue lo que salió de mi boca con bastante veneno impregnado en ella. Él me miró un poco confundido, pero después asintió y tomó una pequeña botella de agua que tenía a un lado y me la extendió. Yo dude en tomarla así que comenzó a hablar.

-Se que tendremos que hablar Zoe... pero ten esto, estoy seguro de que tu garganta debe de estar seca, en ese lugar no suelen tratar muy bien a las chicas que van a vender- me quedé observando sus ojos unos segundos, él tenía razón sentía mi garganta completamente seca, así que tomé la botella de agua y comencé a tomar sorbos de ella.