ligando al capitán › jookyun

06

Luego de caminar por al menos quince minutos, una torrencial lluvia se desprendió abarcando toda la ciudad y obligando a ChangKyun a buscar un lugar para refugiarse lo más rápido posible, eso o lo pasaría más que mal, y ya no quería tener más cosas por las cuales lamentarse ese día. Un gigante árbol se deja ver ante sus ojos como si fuera un regalo de el santísimo cielo.

¿Aunque es buena idea refugiarse en un árbol mientras llueve? Bueno, él lo hizo y poco le importaba.

Rapidamente corrió para refugiarse bajo el gigante tronco con verdosas y mojadas hojas. La lluvia caía de estas sin parar, yéndose en diferentes direcciones apesar de que eran pequeñas; aunque las hacía ver hermosas a decir verdad. Su cuerpo se deslizó en la rasposa madera, dejándose caer al suelo con sus cosas al lado, mientras lloraba desconsoladamente. Flexionó sus rodillas pegándolas a su pecho, mientras hundía su blanca y mojada cara en el hueco que ellos habían hecho. El nivel de frustración no podía ser más grande. No era suficiente con todo lo que había sucedido en su casa, sino que tenía que estar lloviendo para hacer las cosas más difíciles y tristes. Era un simple alma lamentable sin reparación. 

Recordó en cuestión de segundos su celular y rápidamente lo sacó del bolsillo, pero el dispositivo ya estaba completamente mojado. Maldijo en voz baja, pero mentalmente estaba rezando porque funcionara. Lo peor, es que su celular ya estaba hecho mierda desde antes, probablemente ahora su había muerto. 

—Oh, joder no... prende por favor —entre súplicas presionó con desesperación el botón de encendido que se encuentra al lado derecho, por encima del botón de volumen.

Sus ojos brillaron cuando la pantalla se prendió mostrando el logo de la marca, pero se volvieron nuevamente opacos cuando la pantalla se apagó inmediatamente. 

—¡Mierda! ¡Mil y un millón de mierda! —tiró el celular lejos, igualmente ya no servía de nada. Había perdido el video de HoSeok y HyungWon, así que su plan también se había ido a la mierda como su vida entera. 

Ya no sabía que hacer, estaba mojado y con un frío infernal torturándolo. La lluvia más que cesar, aumentaba considerablemente; su celular había muerto al igual que el video había desaparecido por completo; no tenía ropa para cambiarse y ya no soportaba la suya; y lo peor, no tenía dónde ir. Su única opción —y no sabía que tanto resultaría— era MinHyuk. Rezaba a Cristo que ya no estaba enfado y le diera un lugar para pasar la noche. Se levantó de su lugar emprendiendo camino a casa de MinHyuk, sin importarle lo más mínimo la lluvia o lo que le pasará en el camino. Si moría, pues nada, mejor para él.

Mientras caminaba entre maldiciones y quejidos, logró divisar una silueta conocida vagar por la lluvia, mientras corría hacia su dirección ¿Ese era JooHeon? se detuvo de golpe en medio de la lluvia para ver mejor, quizás y estaba alucinando. La silueta pronto fue disminuyendo la velocidad de sus pasos, hasta detenerse por completo. 

—¿ChanKyun? 

—ChangKyun, c-h-a-n-g-k-y-u-n —deletreó para que el estúpido rubio se grabara su nombre de una vez por todas. Estaba hasta la puta madre que nadie pudiera recordarlo cuando era no sólo fácil, sino hermoso. 

¿Qué tan difícil le resultaba eso? No es como si su nombre era lo más complicado del mundo. Solo el sexy capitán era demasiado idiota. Aunque bueno, había olvidado el pequeño detalle que ese simio solo tenía media neurona, y andaba todo el día desconectada, por lo que de mucho no servía. 

—¿Qué demonios haces a estas horas y en esta tormenta? ¿Eres estúpido, niño? 

—Bueno, ¿Qué haces tú también entonces. —JooHeon  observó un pequeño árbol en la lejanía, caminando hasta este para utilizarlo como refugio. Apenas lo tapaba de la lluvia, pero era suficiente para que no se mojará tanto, y para atraer un rayo también. 

ChangKyun también decidió seguirlo, quería saber el motivo del por qué ese idiota vagaba por ahí. 

—Vengo de ver a mis abuelos, la lluvia me sorprendió a medio camino y aquí me tienes. 

—¿Sabías que te ves demasiado caliente mojado, JooHeon? —lanzó una mirada coqueta, el rubio respondió con una mueca evidente de asco. 

—Que asco, deja de halagarme. Si al menos me va a acosar un chico, quiero que no seas tú —frunció su nariz estornudando. 

—Por imbécil y mal educado te morirás de gripe. 

—En un rato también estarás muriendo de gripe, no te preocupes —sonrió sin gracia—.  No me dijiste qué haces a estas horas por aquí. Te vi caminar tranquilo como si no te importara una mierda la vida.

—No me importa una mierda la vida. Y son problemas personales. —JooHeon notó como ChangKyun miraba incómodo hacia otro lugar, evitando en demasía cualquier contacto visual.

—Ya veo... ¿Pero adónde ibas? 

—Estás demasiado curioso hoy, me largo —rodó los ojos con cansancio. Ya demasiadas cosas le han pasado para agregar la curiosidad del mayor a la lista. Acomodó su mochila emprendiendo camino hacia la casa de su mejor amigo, pero un firme agarré en su brazo lo detuvo al instante. 

—Ten cuidado. 

ChangKyun miró incrédulo al mayor, frunciendo posteriormente el entrecejo mientras deshacía el agarre. ¿Era broma? 

—Como si te importara que muera o no —chasqueó la lengua, nuevamente desviando la mirada. 

JooHeon miró con molestia al castañito, desaprobando sus palabras. Lo tachaba como un desalmado —cosa que no era—, por el simple hecho de no caer ante sus lamentables intentos de conquista. Que maravilla. Que no le gustaran los chicos o lo tacharan como "un matón" —que no era...a veces—, no quería decir que fuera mala gente, solo no era demasiado expresivo. 

—Im —llamó volviendo su mirada más oscura de lo normal—, que no me gustes tú o cualquier otro chico no quiere decir que no tenga un poco de empatía por las personas. Deja de etiquetarme como si fuera el peor ser viviente que existe. 

—Y por qué no te vas a buscar una persona para ser amable y me dejas ir? Nos vemos —despidió amargamente, continuando su camino. Poco le importaba su opinión, solo quería dormir. 

No se imaginaba un encuentro a solas con JooHeon de esa forma, se suponía que debía de cambiar de opinión y besarlo bajo la lluvia como cualquier película o historia romántica, cliché y con final feliz. Una historia donde ambos se amarían sin importar que. Donde no habría dolor y solo habría felicidad. 

¿O no funciona así cuando la historia se trata sobre chicos?