愛 「18」

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━━━ ཹ։ Hay más peces en el mar

— ¡Hey! ¡Go Hye Rim! ¿Te apetece venir conmigo, mona? — Le preguntaron y la chica se señaló con confusión. Al parecer si que le estaban llamando a ella, bueno, no había muchas Go Hye Rim en Sinseong, es más, ni siquiera sabía si había otra.

— Kyun Seol Jin...  ¿Cómo has...? — Tanteó el lugar, comprobando de donde había salido.Estaba con su novio en la calle comercial de la ciudad, paseando a Kou, su perro. Minsoo observó a las dos chicas sin comprender nada. — Estoy en una ci-...— Se interrumpió a si misma mientras miraba a su novio. Después observó el anillo y negó con la cabeza. 

— ¿Vas a ir con ella? — Preguntó con un voz amable mientras llevaba su una de sus manos a su cuello. Hye Rim asintió y Seol Jin observó al chico de arriba a abajo con asco. Fingió una arcada y Minsoo lo notó. — Hey ¿No te parece que eso es una falta de respeto?

— ¿No te parece a ti una falta de respeto haber dejado a tu novia plantada en un día tan especial para ella? Los chicos como tú me dan ascos. — Escupió al suelo y después apretó los dientes mientras miraba a Minsoo sin ningún escrúpulo. 

— Pero estamos bien, ya pedí disculpas y ella las ha aceptado... — Se defendió extendiendo sus manos. Seol Jin miró el perro y luego al dueño con la misma mirada petulante.

— Ya bueno, si mato a alguien y pido perdón, no creo que cambie nada...

— ¿Qué clase de ejemplo es ese? — Cuestionó Minsoo, el todopoderoso as de los debates.

— Mi ejemplo. 

El chico rodó los ojos y Hyer Rim divago entre los dos con la mirada. — No tiene ni pies ni cabezas, ese ejemplo no es valido.

— A ver, dime porque no es valido. He seguido el turno de palabra, has comprendido la metáfora, la gramática está bien empleada y además concuerda con el mensaje que quiero dejar. — Aclaró la voz e hizo un arco en el aire con sus manos. — "No todo se arregla pidiendo perdón" — Dijo con el tono más feliz del mundo, si fuera posible, Hye Rim hubiera podido apreciar destellos y arcoiris salir de Seol al escucharla decir aquello. 

Hye Rim le contó a Seol Jin lo que pasó después de ir a ver a la adivina. Las dos acabaron por separarse de los chicos para ir a tomar algo juntas y en el banco de una calle poco concurrida le contó a su compañera de aquella noche lo que le pasó buscando consejo femenino. 

— ¿Me estás retando? — Preguntó Minsoo alarmado ante aquella mirada desafiante de la chica.

— Sí es a puños, sí. Te estoy retando, niño bonito. 

— Bien, basta... De todas formas, tú dijiste que tenías cosas que hacer, no íbamos a estar mucho más tiempo juntos, así que esto te viene hasta bien... Tan solo toma a Kou y llévalo a casa para que hagas lo que tengas que hacer.— El chico asintió lentamente y se despidió de ella dejando un beso en su mejilla. 

Seol Jin fingió bufar como un gato al ver como el chico tomaba con firmeza la correa de su gran perro y se alejaban de ellas. — ¿Qué le has visto? Apesta a niño perfecto con complejo de superioridad moral e intelectual, puag... — Pasó un dedo por su nariz y se colocó al lado de la chica. 

— Fue amor a primera vista, me salvó de su perro y fuimos a tomar algo, ahí descubrí que estábamos enamorados... Fue mágico...

— Fue repugnante, como él... Ya lo sospechaba cuando me hablaste de él, pero parece aún más cretino en persona, me entran ganas de pegarle en la cara. — Seol Jin comenzó a andar malhumorada. Hye Rim se quedó quieta, extrañada, pues no sabía a donde se dirigía la otra chica. — ¿Te vas a quedar ahí o vienes conmigo? — Se giró para preguntar aquello, el collar con forma de tigre se asomó por su cuello, haciendo que ella corriera tras Seol inmediatamente. 

𝐓𝐡𝐞 𝐋𝐨𝐯𝐞𝐥𝐲 𝐠𝐨𝐝𝐝𝐞𝐬𝐬 𝐨𝐟 𝐋𝐨𝐯𝐞〡 Yang JeonginDonde viven las historias. Descúbrelo ahora