𝐓𝐡𝐞 𝐋𝐨𝐯𝐞𝐥𝐲 𝐠𝐨𝐝𝐝𝐞𝐬𝐬 𝐨𝐟 𝐋𝐨𝐯𝐞〡 Yang Jeongin

𝐄 𝐱 𝐭 𝐫 𝐚

━━━ ཹ։ Los viejos tiempos
　

Especial aniversario!
Parte  1

　　

　

Muy obvio decir que si no te has terminado de leer TLGL, esto tiene pequeños spoilers, así que atente con las consecuencias

　

El silencio en el palacio del dios de la creación casi que era una tortura. Dasan no podía soportarlo. Había ido a pasar un buen rato y a beber el té con él, ya que el mismísimo Changjo había solicitado su presencia aquel día en la corte.

Pero por alguna razón él era el único que hablaba en aquella pequeña reunión entre los dos. Changjo solo comía en profundo silencio, con la mirada puesta encima de la mesita del té que había creado minutos antes con una de las semillas de su saco.

Dasan bajó su taza de té y lo observó algo preocupado, puesto que tampoco llevaba colgada de su rostro esa sonrisa taimada y apacible que solía mostrar en todo momento.

—¿Ha pasado algo? —Le cuestionó el menor de las dos deidades, incapaz de continuar en una atmósfera así. —Me has llamado porque querías verme, pero llevas callado todo este tiempo. —Proyectó su voz en tono de berrinche.

—No es suficiente, Yongbok. —Fue lo primero que dijo desde que llegó a aquella sala. El dios de la familia reaccionó preocupado.

—¿Qué no es suficiente? —Le volvió a preguntar.

—Tu influencia sobre los mortales. —Empezó a decir, llevando otra galleta de arroz a su boca, comiendo prácticamente por gula, puesto que su cuerpo no necesitaba mantenimiento y menos comer.

—¿Eh? —Dasan reaccionó algo ofendido por lo que acababa de escuchar, era de cierta forma un insulto a su trabajo, que tan duro era para él y toda la corte de la familia.

—La sociedad humana se mueve entorno a alcanzar una vida plena ahora que son mortales, buscan logros y poder, para sentir que sus vidas tienen sentido, y se reproducen y forman núcleos familiares por pura supervivencia. ¿Dónde está el amor? ¿Dónde está el amor que recuerdo ver en la era previa a la traición de aquel mortal? —Hablaba triste, pensando que quizás, en en momento en el que los castigó, la mortalidad les hizo perder la felicidad y la pasión por la vida. —Veo hijos nacer sin cariño alguno, como Hyunjin, quien fue abandonado por esos reyes de Sinseong nada más comprobar que había nacido enfermo. Nadie lo dio una oportunidad... Y como era el hijo menor, aún menos les importó. En las familias de mi creación falta el amor. —Siguió comiendo entre sus quejas melancólicas.

—Uhm... —Dasan frunció el ceño, pensando en aquello de forma detenida, sin juzgar lo que decía su creador por el comentario respecto a su influencia. —Después de todo, nunca me diste la tarea de evocar sentimientos. Yo me dedico a oficiar los matrimonios, registrarlos y bendecir estas uniones con la fertilidad. O también me encargo del tema de la reencarnación, pero nunca me dijiste que debían existir sentimientos.

—Ese es tu defecto, subestimas mucho los sentimientos humanos, solo te fijas en la compatibilidad y en al genética. —Changjo se corrigió. —Bueno, más bien, ese fue mi error, no haber pensado en ello antes. Mira cuantas muertes hay, como los esposos se matan entre ellos, como los hijos se odian entre ellos. Hay tanta competitividad en el mundo por culpa de Seungmin y Hyunjin... Mi creación se ha vuelto frívola y sin corazón... —Al decir aquello último abrió los ojos y dio un golpe con su mano. —¡Corazón! Solo tengo que darles un nuevo corazón, el corazón de esta nueva era, que haga latir el de mis humanos.