愛 「19」

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━━━ ཹ։ Volveré a encontrarte, amor

Los siete dioses estaban reunidos alrededor de Jeongin. Mirándole con detenimiento. Aquel era el último día de las vacaciones, y como prometió, aquel día iba a finalizar el templo de la diosa del amor para así poder restaurar el vínculo con el pueblo y, en general, el resto de mortales. 

— Vale, Jeongin... Solo tienes que clavar el último clavo del aplique para colgar el telar de Aisoon y habrás acabado con estás tediosas obras. — Changjo comentó desde de atrás del chico junto a las demás deidades. Yuna, Beomgyu y Kai también estaban ahí, mirando con ilusión al chico.

Renjun limpió el sudor de su rostro con ayuda de un pañuelo que le ofreció Jeno. El dokkaebi le sonrió a su compañero y se posicionó junto a Jeongin para dar el golpe de gracia. 

El chico alzó su martillo para clavar el clavo que marcaría el final de su labor. Jeongin estuvo a punto de dar el toque, pero se puso nervioso y se giró, notando como le temblaba todo el cuerpo. — Estoy abrumado... Si me miráis todos así, me hacéis sentir nervioso. — Confesó haciendo que JaeSan suspirara. Yesul le dio un golpe con el codo y el señor de las monedas se contuvo en el sitio.

— Vamos, Jeongin... Tú puedes, solo es el último clavo... Terminarás de leer el resto del papiro y podrás acabar tu tarea conmigo. — Contestó la mujer mientras juntaba las manos. Se veía feliz e ilusionada. Jeongin no pudo evitar mirar a Dasan, quien le sonreía como si el día anterior no se hubiera comportado de aquella manera tan extraña al decirle que no le tomara cariño a aquella deidad. 

— ¿Debería ayudarlo gran Yang Jeongin? — Se ofreció Renjun desde abajo mientras subía de un salto a su hombro. 

—No, no... Estoy bien... Ya lo hago. — Maum abrazó a JaeSan desde su posición, apresionándolo entre sus brazos y las largas mangas rojas de su Uilyu. El se quedó quieto dejándose abrazar por su compañera. 

—Contrólate, por favor... No seas niña... — Pidió mientras cruzaba sus brazos por encima de los de la mujer. Chenle negó desde el suelo mientras llevaba una mano a su frente y Yuna se agregó al abrazo, rodeando a su deidad Maum por la cintura. 

Jeongin rio por lo bajo y retomó el movimiento de codo para así dar el certero golpe y dejar perfectamente clavado el aplique que sujetaba el telar a la pared. Todos se alejaron para ver aquella pieza de tela en la que estaba bordada la figura de la diosa del amor y todos exclamaron a modo de celebración.

— Menos mal que lo has clavado, pensé que iba a tener que esperar todo el día para ver esto. — Se quejó el dios de la muerte con molestia mientras posaba sus ojos sobre Jeongin. 

— Yo me he ahorrado todo sus nervios y he saltado en el tiempo con el bastón. — Confesó Milae con una sonrisa orgullosa en su rostro. Dasan dio un pisotón en el suelo debido a la irreverencia del dios del tiempo.

— ¡Eso es trampa!

— Yo ya lo sabía. — Comentó Yesul mientras avanzaba hasta su hermana para ofrecerle su mano en señal de felicitación. — Me alegro de que finalmente puedas volver a cumplir con tus responsabilidades después del último paso. 

— Cierto... — JaeSan se deshizo de los brazos de la deidad del amor y colocó sus manos en su cintura, adquiriendo una pose de impaciencia. — ¿Cuál es el último paso? — Preguntó y todos miraron a Jeongin.

— He traído el pergamino en mi maleta. — Renjun salió corriendo para traerle su mochila y Jeongin tomó el royo en el que estaba escrita la respuesta. Beomgyu, Yuna y Kai no podían dejar de pasearse por la sala del altar, estaban maravillados con lo impecable que había quedado.

𝐓𝐡𝐞 𝐋𝐨𝐯𝐞𝐥𝐲 𝐠𝐨𝐝𝐝𝐞𝐬𝐬 𝐨𝐟 𝐋𝐨𝐯𝐞〡 Yang JeonginDonde viven las historias. Descúbrelo ahora