JungKook se sintió mal por haber huido de esa manera, quizás no había tenido la mejor reacción al irse de la cafetería, pero no pudo evitar sentirse molesto. Le tenía un enorme cariño a su primo, pero eso no significaba que apoyaría cada una de sus calumnias. No tenía sentido para él apoyar una teoría infantil.
El de piel clara pateó con fuerza una lata en medio del camino, estaba frustrado y ni siquiera sabía a dónde dirigirse. No conocía a nadie y mucho menos el lugar. Frunció el ceño cuando dos siluetas al fondo del pasillo llamaron su atención.
—No quiero hablar de eso...
JungKook reconoció la voz, era YoonGi, rápidamente se escondió detrás del muro para poder escuchar sin ser visto. Tal vez estaba siendo imprudente al quedarse ahí, pero YoonGi se miraba ansioso y eso lo llenó de curiosidad.
—No estoy pidiendo que lo hagas, sólo escúchame...— JiMin se escuchaba afligido. YoonGi apartó su mirada de él, pero asintió dispuesto a escuchar las palabras de su novio.
—Sea lo que sea que haya dicho SeokJin no me importa hyung... pero mírame —pidió con voz suave logrando que el pálido obedeciera. —Estoy confundido no voy a mentirte, siempre que él está cerca de nosotros dice cosas que no logro entender... pero si hablar de ellas te hace sentir mal, entonces simplemente vamos a ignorarlas...
—No quiero que pienses mal...
—No lo hago —negó ofendido. —Confío en ti y en nosotros... te lo he dicho antes —respondió con seguridad. YoonGi sonrió levemente, JiMin estaba siendo comprensivo con él a pesar de la situación.
—Hice cosas desagradables y SeokJin sabe de ellas... —confesó. YoonGi no supo de dónde sacó valor para decir esas palabras.
—¿Aún las haces?—. YoonGi tragó duro. En realidad el pálido había dejado de hacerlas desde que inició a salir con JiMin, nada de mujeres, nada de conquistas dobles y nada de sexo. No había tenido nada de eso desde que inició el año, pues su objetivo desde el primer día había sido el castaño, sin embargo, su plan inicial con el menor no había sido precisamente algo bueno.
Jugar con los sentimientos de alguien quizá era lo peor que se había atrevido a hacer dentro de la academia. Aceptó sin pensarlo, inclusive él dio iniciado el juego y estuvo dispuesto a concentrarse en él, pero todo, absolutamente todo resultó ser diferente.
YoonGi se atrevió a negar. —No, ya no las hago... —mintió, pero en el fondo no se sintió como una mentira.
La sonrisa de JiMin fue tan amplia que sus ojos se volvieron dos líneas. La respuesta de YoonGi lo reconfortó y se sintió feliz de ver que el mal humor de su novio se había disipado a lo largo de su plática. Ese había sido su objetivo y se sintió satisfecho de haberlo conseguido.
—Ahí está —rió el castaño. —Eso quería escuchar.
YoonGi no entendía como JiMin podía ser así de bueno, era evidente que su novio estaba tratando de comprenderlo en lugar de presionarlo por una explicación. —Eres muy raro... —sonrió el pálido. JiMin no era extraño, él sólo deseaba tranquilizar a su novio porque sabía sobre su ansiedad. —No sabía que las personas raras podían ser bonitas.
—De acuerdo, voy a ignorar el que me hayas llamado raro —rió JiMin.
—Eres increíble —dijo el pálido mirándole a los ojos. Su intensa mirada causó escalofríos en JiMin, pero el castaño no se dejó llevar por eso, pues aún tenía algo que decirle.
—No quiero que te mortifiques por el pasado, todos hemos hecho algo malo... yo por ejemplo hice que Tae perdiera en una competencia de dibujo, sólo porque estaba celoso de él—. YoonGi rió levantando sus hombros. —¡No estoy bromeando YoonGi incluso peleamos!, y él no se escapa de esto... le dijo a mis padres que golpeé a un niño en secundaria... ¡y yo no lo hice Yoon!

ESTÁS LEYENDO
GAME OVER_[YoonMin]
FanfictionA petición de NamJoon, YoonGi deberá involucrarse sentimentalmente con JiMin, un chico castaño de nuevo ingreso. La misión es sencilla, debe de enamorar al niño y hacerle creer que él también lo esta. YoonGi es una persona bastante fría y sin preocu...