SUNDAY

1K 108 49
                                    

JiMin se levantó con los ánimos por el cielo, luego de su cita con YoonGi su confianza hacia el amor había crecido de una manera increíble. Sentir nunca fue tan fácil para el castaño hasta que llegó YoonGi a provocar un montón de sensaciones confusas en su pecho, que aunque al principio comenzó siendo una simple ilusión, ahora el menor estaba seguro que realmente le interesaba al pálido.

Sonrió mirándose en el espejo mientras se colocaba sus zapatillas deportivas, había dicho que no pensaría otra vez en YoonGi, pero en medio de cada cosa que hacía, aunque sonase estúpido, terminaba volviendo el mayor a su mente. JiMin comenzaba a sospechar que en serio se estaba enamorando.

—Iré a dejarte. —dijo su amigo entrando a la habitación. No habían hablado mucho cuando JiMin volvió de su cita, pero por lo menos se dejó de sentir ese ambiente incómodo entre ellos.

—No hace falta TaeHyung, puedo ir solo—. JiMin debía cumplir con su promesa de ayudar en el evento de primaria, si en verdad quería mejorar su calificación debía hacerlo, y no le halló problema al hecho de ir solo.

—No me importa sí puedes ir solo, que iré a dejarte dije, así que apresúrate... —JiMin abrió los ojos sorprendido. No esperaba esa respuesta, y estuvo a punto de renegar, pero el rizado salió de la habitación dejándolo con las palabras en la boca.

El menor no quiso discutir, así que tomó sus cosas y se fueron al parque donde se llevaría a cabo el festival. TaeHyung le arrebató el bolso para llevarlo él, dejando a JiMin más extrañado que enojado. El menor ladeó su cabeza, bufó y respiró profundo convenciendose así mismo, que era mejor callarse a perder el estado de ánimo con el que había empezado el día.

Luego de un viaje corto en autobús llegaron a su destino. Un parque amplio, decorado y lleno de niños correteando. —¡Es enorme! —pronunció el castaño.

TaeHyung hizo una mueca, consideró el quedarse a esperar a JiMin, pero definitivamente mejor se iría y regresaría luego por el menor. No estaba preparado mentalmente para quedarse sentado entre tantos niños y escuchar sus escandalosos gritos. —Bueno creo que es hora de irme.

—Esta bien, gracias por acompañarme TaeHyung. —El rizado sintió amargo ser llamado así, su amigo sólo lo hacía cuando estaba resentido con él, y era más que obvio que el bajito seguía molesto.

—Vendré por ti más tarde, ¿sabes a qué hora terminará esto?

—No, pero no te preocupes, no hace falta que vengas —sonrió. —Deberías descansar Tae, YoonGi se irá conmigo.

—¿Qué?...

—Sí. —rió avergonzado. —Ayer me prometió que vendría, dijo que entre los dos podríamos terminar antes y así me tocaría menos pesado. Le dije que no era necesario, pero es bastante terco.

El rizado rodó lo ojos. No soportó más el estar fingiendo felicidad cada vez que su amigo mencionaba al pálido. —¡JiMin, ¿Qué es lo que te pasa con ese imbécil?!

—¿De qué hablas?... —preguntó molesto. TaeHyung prácticamente había escupido esas palabras.

—¡No seas tonto JiMin, date cuenta de una vez que ese imbécil trama algo!

—¡TaeHyung estás hablando sin sentido! —soltó enojado. —¡YoonGi no está haciendo nada malo! ¡¿Cuál es tu problema?!... ¡Desde que se convirtió en mi amigo estás actuando raro, y siempre lo quieres poner en mal cuando lo único que ha hecho es ser lindo conmigo!

—¡Él no es una buena persona!, ¡Sé que no lo es!.

—¿¡Ah no?! ¿Y con qué pruebas puedes afirmar eso?... —el castaño frunció el ceño. Su amigo al oír aquello guardó silencio sin saber que decir, porque aunque doliera, la verdad era que no tenía ni una prueba. Lo único que podía afirmar era que estaba celoso, y no tenía el valor para confesarle al menor esa verdad.

GAME OVER_[YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora