MADDISON ©

SINOPSIS

Siento que alguien me persigue, me falta el aire y mi campo de visión comienza a nublarse. Escucho pasos tras de mi, mientras corriendo trato de abrirme paso entre la arboleda.

Mis piernas agotadas comienzan a arderme por la acelerada marcha. Paulatinamente me voy deteniendo, mis pulmones me lo exigen aunque mi mente en desacuerdo me pide lo contrario. De un momento a otro dejo de escuchar el crujir del suelo boscoso provocado por los pasos. Sólo escucho mi acelerada e inestable respiración. Además de eso no hay más que un intenso silencio que abruptamente es irrumpido por el escalofriante sonido de un reloj.

Tik.

Tok.

Tik.

Tok.

Sigo adelante apoyándome en cada árbol cercano ya que el cansancio era en ese momento mi mayor enemigo.
Volteo hacia todas las direcciones entrecerrando los ojos tratando de divisar a mi perseguidor pero no logro ver nada.

Tik.

Tok.

Tik.

Tok.

Sigue sonando el reloj, verdugo de mi cordura.

Luego de varios minutos caminando los pasos vuelven adornando el ya tétrico momento. Tengo la frente empapada de sudor y procedo a limpiarme con las manos para luego divisar a lo lejos una figura completamente negra avanzado hacia mi.

A medida que se acerca observo el sutil destello de un cuchillo ensangrentado al ser iluminado por un pequeño rayo de luz lunar que se cuela entre el frondoso follaje de las copas de los árboles y de inmediato palidezco.

Comienzo a retroceder para luego comenzar a correr.

Tik.

Tok.

Tik.

Tok.

«¿Qué está pasando?, ¿De dónde viene ese sonido?, ¿Quién es esa figura?» me cuestiono entrando en pánico.

Alguien susurra:

—No tengas miedo Maddison, ¿Por qué deberías temer? Si tú misma te metiste en este juego.....

No logro reconocer la voz y no se si es por el miedo o la fatiga, pero siento que voy a colapsar en cualquier momento.

—Maddison.....

Una voz distinta a la anterior pero igual de irreconocible susurra mi nombre.

«¿Qué está pasándome?»

El grito de una mujer hace que me sobresalte y que los pájaros que yacían dormidos en las copas de los árboles comiencen a volar.

«¡Mierda!» pienso.

Sigo corriendo y de un momento a otro caigo de bruces al suelo. Siento un líquido caliente y mi olfato detecta el olor metálico de la Sangre.

Mis manos están manchadas de sangre. Ahogo un grito y alzo la vista para encontrarme con el cuerpo inerte de una mujer que yace el piso sobre un charco carmesí.

Se me corta el paso del aire y en ese momento vuelvo a escuchar el sonido que produce el reloj.

Tik.

Tok.

Tik.

Tok.

El corazón me comienza a martillar el pecho, no logro respirar con normalidad, pero me levanto rápidamente dispuesta a retomar mi huida.

—¡¡Maddison!! —escucho como alguien grita mi nombre.

Pasos rápidos de alguien corriendo retumban en la silente noche.

Un golpe en la parte trasera de mi cabeza hace que caiga aturdida al suelo. Pocos segundos después solo veo oscuridad.

Homicidios. Suicidios y supuestos accidentes. Todas muertes distintas pero con una Marca Distintiva. Es lo que en este libro encontrarás....