Dante
Estoy nervioso por la batalla de Anna con Alberto, no porque exista la posibilidad de que pierda, sino porque no quiero ver a mi querida mate herida, me situó lo más cerca que puedo por si existiese la posibilidad de que su vida esté en peligro no dudaré en intervenir, es el acuerdo que le recuerdo a mi lobo en el instante en que vemos a Anna ser azotada contra el piso. Observo como toma la pistola que le preparé y apunta exitosamente hacia Alberto, suspiro aliviado, al parecer la batalla ha terminado, sin embargo contra todo pronostico soy testigo de como Alberto arremete contra mi mate, aprieto fuertemente mis puños y emito un leve gruñido que asusta a las personas que están a mi alrededor, me obligo a tranquilizarme y me repito como si fuera una especie de mantra solo tardará tres minutos, aguanta. Pero, mi resolución se disuelve cuando soy testigo de como la lanzan por lo aires, inútilmente grito su nombre, siento que mi corazón se detiene, rápidamente salgo de mi estupor y me dirijo hacia la arena para finalizar con aquella masacre, temo que me odie si intervengo, aunque aquello palidece en comparación con la pequeña posibilidad de que terminen por matarla antes surta efecto la droga. Afortunadamente antes de tocar el piso del coliseo Alberto se derrumba y suelto un suspiro aliviado.
Cuando estoy a punto de correr al encuentro de Anna escucho la voz indignada de Jacob—. ¿Ramón, esos dardos estaban en sus pertenencias?
—Sí, fueron autorizados por la consejera Luisa y el consejero Marcos —contesta Ramón.
Observo como Luisa se posa al frente y señala—. Lo autorice porque de lo contrario no hubiese sido una batalla justa.
—Esta prueba no tenía el objetivo de ser una batalla justa —replica amargado.
Noto como Jacob aprieta los dientes e inevitablemente me regocijo por aquello, probablemente estaba pensando en rechazar la victoria de mi mate, pero me alegro que no haya resultado según sus expectativas y al mismo tiempo me conmueve el hecho de que el consejo no esté tan podrido como pensaba. Les lanzo una última y corro en dirección a mi mate, observo como se tambalea, el olor a sangre inunda mis sentidos, debo controlar a mi lobo para evitar que se lance contra Alberto y reclame venganza. A medida que me acerco noto que sus pupilas se encuentran completamente dilatadas, cuando pregunta si ganó, le contesto afirmativamente, pero al parecer no logra oírme, le hago señas a Juliette para que se acerqué, creo que nota mi mirada de pánico porque la observo tomar una camilla y correr en mi dirección. En el momento en que estaba punto de tomar a mi mate en brazos, Jacob se me adelanta y tomando violentamente la mano de mi mate la levanta anuncia finalmente su victoria, al parecer Anna comprende que ha ganado porque observo una tímida sonrisa surcar su rostro, intento devolverle el gesto, pero en el instante que se voltea a mí, contemplo como su cuerpo colapsa y rápidamente la tomo entre mis brazos.
En eso arriba Juliette quien la toma delicadamente y la posa en la camilla, quiero ir con ella, sin embargo soy detenido por las siguientes palabras—. Yo cuidaré de Anna, tu lugar está en otro sitio —menciona mientras apunta hacia el consejo y recuerdo que debo preguntarles por la tercera prueba, asiento y permito que la alejen de mi.
Emprendo el rumbo hacía Jacob, pero antes que pueda hablar, este me interrumpe diciendo—. Mañana tú y tu mate, deberán reunirse en el gimnasio de la manada es una prueba de ingenio que durará tres minutos, es lo único que puedo decirles.
—¿Mañana?, Anna se encuentra gravemente herida no podrá presentarse— refuto indignado.
—Tiene un punto Dante —comenta Luisa y los otros miembros del consejo parecen estar de acuerdo con ella.
—Está bien—replica ofuscado al parecer aún continua molesto por lo sucedido con la pistola anestésica—, le daremos tres días para que se recuperé, ¿están todos de acuerdo? —pregunta a los otros miembros, quienes aceptan la sugerencia a regañadientes.
ESTÁS LEYENDO
Redención
WerewolfAnna es adoptada y fue criada en el pueblo de Lucine, una localidad de hombres lobos, y teme por el día en que encuentre a su mate, porque tiene la certeza de que será rechazada. Dante es el futuro alfa de la manada de Lucine, y sueña con el día en...