Redención

Capítulo 10

Anna

A la distancia escuchó una dulce voz que pronuncia mi nombre, sé que la he escuchado antes, pero ¿dónde?,  aunque sin saber por qué anhelo consolarlo. Poco a poco los sonidos me invaden, un fuerte dolor que recorre todo mi cuerpo, lentamente abro los ojos, y soy recibida por un mundo compuesto por luces y sombras. Luego, noto un delicioso olor a vainilla, intento preguntar ¿qué hace aquí?, pero no alcanzo, porque sale rápidamente de la habitación. A continuación, soy abordada por un desfile de médicos, quienes me realizan una serie de exámenes e infinidades de preguntas. Luego, de un par de horas no puedo evitar sentirme un poco desesperada, pero cuando siento que voy explotar, soy devuelta a mi habitación, la cual ya puedo ver con claridad, y junto a la cama se encuentra Dante, el cual parece ¿nervioso? ..eso no es posible, quizás quiere pedirme que lo rechace, simplemente se siente culpable por lo que pasó. 

Finalmente nos quedamos solos con el sonido del electrocardiograma de fondo, lentamente se acerca a la camilla, y no puedo evitar que mi corazón se aceleré. Quiero decir algo, cualquier cosa, simplemente para romper con este incómodo silencio, pero nada parece lo suficientemente inteligente. 

—¿Quieres agua?—pregunta.

Yo simplemente asiento, aunque realmente no tengo sed, pero noto que él se siente igual de incómodo que yo, y no puedo evitar preguntarme ¿por qué sigue acá?, ¿habrá perdido alguna apuesta o está siendo obligado por el alfa?. Estoy tan inmersa en mis pensamientos, que ya es demasiado tarde cuando noto que toman mi mano, y un leve quejido sale de mis labios.

—Tranquilo— interrumpo, cuando Dante intenta ¿disculparse?, espera Dante  jamás se disculparía, creo que en estar en coma me daño el cerebro, observo que me mira fijamente,  y nuevamente me perdí en mis reflexiones—. Juliette me explicó que como estuve en coma, es normal que me duela los músculos, pero nada que un par de sesiones de terapia no puedan arreglar —terminó sonriendo con el único objetivo de evitar que se preocupe.

—Lo sé...quiero decir, leí un par de artículos sobre lo que le sucedió otras personas que estuvieron en coma—noto como un leve sonrojo se extiende por sus mejillas—. Además tú eres muy fuerte, confío en que te recuperarás pronto, no tienes por qué inquietarte. Si eso le sumas que conmigo a tu lado el éxito está garantizado. —me guiña el ojo derecho.

Y quedo muda con sus palabras mientras mi corazón late desenfrenadamente, ¿cómo puede decir tan fácilmente que estará conmigo?. Y recuerdos de esas palabras dichas en otro tiempo, en otro lugar vienen a mi mente, junto con un sentimiento de desazón que envuelve mi cuerpo mientras bebo agua.

—No tienes que sentirte responsable, lo que pasó en el prado fue sólo un accidente...no necesitas retribuirme nada, si fue idea del alfa que estes acá, no es necesario que te preocupes yo hablaré con él. Así que...comprendo lo insignificante que soy como para realizarte está petición, pero ¿puedes dejar de mentirme?

Aunque sé que no debería, fijo mi vista en esos tristes ojos cafés, que lentamente se tornan azules, indicando que su lobo quiere tomar el control. Desearía poder guardar silencio, pero creo que está será la última vez que lo vea, en el momento en que me den de alta me marcharé, tal como lo tenía planeado.

—Yo Anna te rechazo a ti —una mano se posa en mis labios, impidiéndome hablar, chocó con una mirada que está furiosa, y no puedo evitar encogerme del miedo. Paulatinamente esos amenazadores ojos ser tornan cafés.

—Por favor Anna, no cometas el mismo error, no hay día que no me arrepienta —suplica—. Soy consiciente de todas las veces que te he defraudado, y me encantaría prometerte que nunca más lo haré, en cambio te juro que intentaré ser digno de ti, sólo espero que no sea demasiado tarde para pedirte una segunda oportunidad, ¿Anna, quieres ser mi amiga?

Quiero responderle, pero su mano sigue sobre mis labios, y no puedo evitar ese sentimiento de pérdida cuando la retira, me quedo en silencio, estoy confundida, la persona que tengo al frente no es el Dante de las últimas semanas, se asemeja más al Dante que conocí en mi niñez, pero no puedo evitar desconfiar, ¿por qué después de rechazarme tan cruelmente, desea otra oportunidad?, lo tiene todo, por qué tomarse tantas molestias por una simple omega que pronto abandonará la manada, todo se debe a la conexión de mate que lo tiene confundido, quizás si razono con él me permita rechazarlo. Pero ninguna de esas reflexiones las logró concretar porque Juliette anuncia que el horario de visita ha terminado e increíblemente Dante no utiliza su autoridad como futuro alfa para contradecirla simplemente se marcha, no sin antes darme un beso en la frente, no sé por qué tengo la sensación que no es primera vez que lo hace.

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Después de varias semanas he actualizado, espero no hayan abandonado está loca historia, nuevamente gracias por todos los votos, comentarios, y lecturas :).