Capítulo 42

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Rocío, desde la barra, observaba cómo Nicolás estaba con otra y notaba cómo empezaban a brotar los celos. Agarró de la mano a Lautaro y lo llevó rápido hacia la mesa donde estaban Celes, Bauti, Santi y Pache. Mientras caminaba, pensaba en lo tonta que era sintiéndose mal por estar con Lauti en frente de Nicolás, aún sabiendo que a este último no le afectaba ni un poco estar con Vera o con cualquier otra en frente suyo.

Definitivamente, luego de ver esto, Rocío no quería saber nada con Nicolás. Había decidido dejarlo fuera de su vida por completo y esta vez no se iba a arrepentir, ya que también pensaba en Vera que, por más de que no le caía del todo bien, la joven lo quería en serio a Nicolás y no se merecía sufrir.

Haber vuelto con Lautaro la había hecho ver las cosas de otro punto de vista y cambiar lo que pensaba sobre Vera. Al estar tan bien con Lauti, quería que Nicolás fuera feliz con alguien que lo quiera, más allá de todo lo que había pasado con Vera.

Nico había querido impedir ese beso, pero fue todo muy rápido. La chica que lo besó era una ex novia de él que había desaparecido de la nada y por la que Nicolas sufrió mucho. Después de que lo besó, la sacó, pero ya era tarde, ya que vio venir a Vera llorando desconsoladamente.

Vera salió del baño con Maca y se paralizó totalmente. Sentía que su corazón se le iba a salir. No podía creer lo que estaba viendo...¡Nicolás estaba con otra! En ese momento, se largó a llorar con bronca e impotencia y lo encaró de todas formas, importándole poco si parecía muy débil..

- ¿Qué hacés, enfermo? Siempre es lo mismo con vos, si no es una es otra.- le gritó Vera llorando.

- ¡Pará, Vera, dejame que te explique!.-le rogaba Nicolás.

- No, pibe. Lamentablemente soy una boluda que te puso todas las fichas a vos y así me terminás pagando.- le decía Vera totalmente dolida.

- No, por favor, Vera, ¡¡te juro que no es así!!.

Maca, al ver la escena, la abrazó a su amiga, y también se acercaron Celes y Bauti a preguntar qué había pasado. Maca intentó explicarles, pero Vera lloraba tanto que todos estaban pendiente de ella.

La noche terminó siendo un caos total, donde los chicos pasaron de estar divirtiéndose como locos a estar casi todos preocupados por la situación incómoda que se había generado.

Bauti y Celeste dejaron de lado los problemas amorosos que había con Vera, y se propusieron, junto con Maca y Pache, a consolarla mientras salía del Álamo totalmente temblorosa y aún llorando.

- No lo puedo creer, chicos...- decía Vera entre sollozos.- Confié en él, le entregué todo de mí, dejé mis miedos de lados, y...Y me paga así.- abrazó fuerte a Bautista mientras lloraba aún más. A Celeste ya comenzaban a brotarle los celos, pero por otro lado comprendía que no era momento de discusiones con su novio, y mucho menos interponerse ante la necesidad de Vera de sentirse apoyada y acompañada por gente que la entendía totalmente.

Maca estaba sacada de sus cabales, ¡no podía creer la actitud de Nicolás! En medio de un impulso poco sano y cuerdo, volvió a entrar al Álamo interceptando a los patovicas para que la dejen pasar. Una vez que lo logró, después de darles cien pesos y dejando a Pache afuera ya que a él no lo dejaron pasar, subió donde estaba Nicolás, que se encontraba peleando con Malena y el gordo Ale.

- ¡Sos un pelotudo, nene! ¡Siempre igual! ¿Otra vez con esa mina? ¿No te cansás de hacerle a todas lo mismo?.- le gritaba Male.

- Posta, sos alto gil.- agregó Alejandro.- Vera te quiere un montón, ni en pedo se merecía que le hagas eso.

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