S t i l l ♡ l o v i n g ♡ m e ♡ p l e a s e 《 Lee Taeyong 》

𝒄 𝒊 𝒆 𝒏 𝒕 𝒐 𝒕 𝒓 𝒆 𝒊 𝒏 𝒕 𝒂

Despierto en mi cama con una cobija encima, me siento limpia y cómoda, miro la habitación y está limpia, las cortinas corridas dejando entrar la luz.

Me destapo y miro que traigo mi pijama puesta, me siento en la orilla de la cama y miro el reloj, son las 7 de la tarde, ¿a qué hora vinieron ayer? Me pongo mis pantuflas para después salir de la habitación en busca de Hyunjin, sé que no va a estar pero solo quiero tener esa esperanza de verlo otra vez.

Bajo al primer piso y escucho ruidos en la cocina, mientras camino hacia allá miro como está todo limpio y en orden, como si Taeyong hubiera limpiado. Llego a la cocina y veo a mis amigos riendo juntos, ellos me miran preocupados.

- ¿Cómo te sientes? - pregunta Noah, alzo mis hombros restándole importancia y me siento en un taburete.

- Te hicimos cita con el psicólogo. - dice Wonho, asiento con la cabeza y me recuesto en la barra de la cocina. - Es mañana, nos quedaremos aquí contigo.

Después de esa pequeña platica me sirven algo ligero de cenar mientras sacan otros temas de conversación tratando de hacerme sentir mejor.

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Acabo de salir de mi cita con el psicólogo, miro a mi amigos en la sala de espera, dejan las revistas en sus lugares y vienen hacia mi, Wonho entra con el psicólogo mientras yo me quedo a fuera con Noah, ella me abraza mientras Wonho habla con el psicólogo. Le ha de estar diciendo que no soy capaz de cuidar a mis hijos, que no estoy emocionalmente estable y que necesito observación todo el tiempo.

Wonho sale totalmente desanimado y regresamos a mi casa, me obligan a comer y tratan de distraerme pero ahora mismo quiero ver a mis hijos y así lo hacemos, vamos a casa de mi suegra y ellos me reciben totalmente alegres como si jamás hubieran perdido a su padre. Les abrazo, vamos al patio trasero mientras Wonho y Noah se quedan platicando con la mamá de Taeyong. Nos sentamos juntos en el césped, Ryujin se queda sentada frente a mi junto con Cherry su hurón mientras que Jun se encuentra a mi lado más pegado mi, les explico que no podré cuidarlos y que se quedarán con su abuela, no se quejan pero me preguntan si me verán y les respondo que si. Convivimos hasta que se hace de noche y es hora de que me vaya.

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Después de un mes he regresado a la tumba de Taeyong para dejar flores nuevas pero hay un ramo de flores blancas ahí recién puesto, se ven tan vivas las flores y dan color al lugar, acomodo el ramo de flores que traje a lado del otro ramo, me quedo un rato sentada mirando la tumba haciéndome a la idea de que no volverá y tengo que aceptar y aprender a vivir con esto.

Me despido de él y vuelvo a casa y veo a mis amigos ahí cocinando y ordenando de nuevo, han dejado su vida por venir a ayudarme y eso me hace sentir mal, les aviso que he llegado y que estoy bien, asienten y me dejan ir a mi habitación.

He comprado una agenda, mi psicólogo me ha dicho que esto me puede ayudar, anoto los días que tengo cita y le llamo a mi jefe para decirle que voy a volver a trabajar, este me avisa que me mandaran el horario por correo y que inicio la siguiente semana, estamos a martes, tengo media semana libre todavía. Miro por la ventana hasta que vibra mi celular, lo tomo y es el correo de la empresa, anoto en mi agenda los días que tengo de clase y los días que iré a ver a mis hijos. Después de una hora el cielo ya está totalmente oscuro y Noah entra para darme algo de cenar junto con los antidepresivos que me recetaron, Wonho avisa que se tiene que ir y así lo hace, Noah y yo nos quedamos en mi cama viendo la televisión mientras devoro lo que me han preparado, de forma milagrosa he recuperado el apetito.

25 de noviembre