Frisk está harta de lo mismo una y otra vez, por lo que decide hacer lo correcto para salvar a todos. No contaba con la nueva ruta que surgiría ante su decisión.
*Ganadora del segundo lugar en AwardsTale2020, en la categoría Undertale*
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Wingdings odiaba el frío. ¿Qué se suponía que debía estar haciendo afuera?
Una vez que se había recargado en el árbol más cercano, el fuerte viento moviendo las hojas del libro que sostenía interrumpió su lectura matutina en el exterior sin siquiera haber empezado. Y eso fue más que suficiente para que el día iniciara de mala manera para Wingdings. Última vez que hacía caso a la petición de sus amigos de que tomara "aire fresco", tras semanas repletas de estudios que necesitaba presentar. Lo que menos querría tras eso sería salir al exterior, pero era claro que ellos jamás entenderían su concepto de relajación.
Aunque quisiera llevarles la contraria con argumentos que hasta un temmie podría comprender, no era suficiente para sus dos mejores amigos cuya fuerza bruta terminaba siendo su prisión al grado de ser arrastrado con ello. Y ahora estaba ahí, recargado en un árbol y cerrando su libro antes de que se maltratara aún más con el viento. Al menos contaba con su bufanda tubular rodeándole el cuello que formaba parte de su uniforme, de lo contrario estaría temblando de frío al igual que el terco de Gerson, cuyas escamas descubiertas no estaban hechas para la temperatura que se avecinaba. Si tan sólo se dignara en ponerse una prenda superior no estaría sufriendo tanto, pero siempre que le mencionaba el tema ponía como excusa su caparazón y lo incómodo que era para él luchar con algo puesto en su torso.
-Aww... ¡Me muero de frío! –Exclamó Gerson entre bostezos y tras varios minutos abrazándose, como si con ello pudiera obtener calor que claramente él no podía tener. –Tal vez esto no fue tan buena idea después de todo.
-Se los dije. –Se limitó a contestarles mientras les observaba acercarse. –Pero ustedes querían estar en el jardín.
-No entiendo por qué se quejan tanto. –Comentó Asgore con una tenue sonrisa que claramente se notaba el cansancio que tenía consigo. No podía culparlo, se estaba esforzando demasiado en dominar técnicas con las que no había nacido para tener la facilidad de hacerlo. Era hasta cierto punto admirable que se esmerara en poder sonreírles pese a lo que realmente le estaba atormentando internamente. –El clima está bastante agradable ahora.
-Es trampa si estás cubierto de pelo, Gorey. –Reclamó Gerson conteniendo más bostezos. El frío le arrullaba más de la cuenta y era bastante terco para aceptarlo. –Además eres un elemental de fuego.
-Podrías ponerte una túnica para no sufrir tanto.
-Son muy incómodas, no sé cómo es que ustedes las usan.
-Porque no somos exhibicionistas como tú. –Contestó el esqueleto.
-¡Hey! Yo requiero la mayor movilidad posible.
La ligera discusión sobre qué tan conveniente o no era llevar mucha ropa, la llevaron a cabo mientras caminaban regreso al castillo. Wingdings no prestaba mucha atención a los argumentos que daban sus amigos, tan sólo se limitaba en pasar el tiempo con ellos aunque fuera poco, agradeciendo de que volvieran bajo un techo sin necesidad de atrapar un resfriado por mera terquedad. Era cierto que estaba requiriendo demasiado entre ellos en lograr la petición de Asgore de dominar sus respectivas especialidades y sin lograrlo todavía, pero no creía en que debían tomarse a la ligera ese asunto.
