Impensable (Konohamaru x Naruto)

24 horas

-Naruto, ¿podría hacerte una pregunta? -La voz de Shikamaru sonaba cansada hasta cuando estaban en situaciones complicadas. Naruto asintió con la cabeza-. ¿Por qué estás tan preocupado por lo de Konohamaru? A ver: Es un shinobi fuerte y sería muy raro que le hubiera ocurrido algo. Además, tú dijiste que, como shinobi, una de las cosas que podían ocurrir era morir en misión. Todos nos preparamos para ello y, aunque duele, es algo "natural".

-Lo que dije en ese momento, se queda en ese instante. Los tiempos deben cambiar y nosotros con ellos; no podemos anclarnos en el pasado. Debemos proteger a todos los shinobis para que regresen vivos. Conocemos a Konohamaru desde siempre. Si le ocurre algo, sería una desgracia. -La voz de Naruto se escuchaba como un lamento.

-Tienes razón, pero si has llegado a esta conclusión, ¿por qué permitiste que se fuera solo y no con un escuadrón preparado para la misión? -Naruto odiaba la inteligencia de Shikamaru... O que él pecaba de imbécil.

-Pues... no sé. Estaba tan liado con todo el trabajo que tengo, que le di la misión sin evaluarla lo suficiente. -Mentira.

-Hombre, Naruto, para algo estoy yo aquí: Para asesorarte. Si no te ves con todas las facultades para mandar una misión, haberlo delegado en mí. Estamos hablando de la vida de un hombre. Es Konohamaru. Has sido muy irresponsable; sabes perfectamente que no puedes hacer lo que has hecho. Si no te ves capacitado de hacer algo, déjalo, pero no juegues con las vidas de las personas. -Efectivamente: El Nara estaba echándole una buena reprimenda.

-¿Estás insinuando que debería dejar el cargo de Hokage? ¿Dónde estás tú cuando te necesito? -Naruto estaba enfadándose.

-Yo estoy esperando a que me llames para ayudarte; si no me llamas, pienso que lo tienes todo controlado. Estar por estar, es absurdo. Aparte, también tengo más funciones. No estoy solamente para intentar solucionar tus errores. Y no: No insinúo nada. Simplemente, te digo que debes ser responsable, que ya no somos un críos para andar con estas cosas. Naruto, no estás solo. Estás rodeado de gente que te queremos y que estaremos siempre dispuestos a ayudarte. Deja aconsejarte. No quieras hacerlo tú todo solo porque, al final, termina sucediendo cosas como ésta. ¿Por qué eres incapaz de confiar en los demás? -Nuevamente, Naruto volvía  a odiar al Nara.

-Claro que confío en ti y en todo mi entorno. Es sólo que debo intentar hacer las cosas por mí mismo. Nada más. -Tampoco era capaz de inventarse cualquier otra cosa.

-Es evidente que te comportas como un niño pequeño. Allá tú con tus consecuencias. Cuando tu mandato concluya, dentro de mucho, se hará un balance de lo que hiciste. Y sí: Podrás haber salvado al mundo, pero no creo que sea agradable que te recuerden por haber matado a gente inocente porque no miraste bien las cosas. "El Hokage imprudente", dirán. ¿Acaso es eso lo que quieres? -Shikamaru no paraba.

-No. Sabes que no. Lo que quiero no es eso. Por favor, para ya de monsergas. Sólo necesito un poco de paz. -Estaba harto.

-Entonces, ¿qué es lo que quieres? -Volvió a preguntar Shikamaru.

-Que vuelva Konohamaru de una vez. Eso es lo que quiero. Que acabe este infierno. En cuanto regrese, me tomaré unas vacaciones. Un par de semanas; tú estarás al mando. Así sabrás lo que es ser Hokage. Espero que no te dé pereza. -Naruto volvió a recobrar el sentido; la sinceridad le sienta bien.

Por arte de birlibirloque, entró un ANBU. Anunció que habían encontrado a Konohamaru tirado en un bosque. Estaba en estado crítico y se hallaba en el hospital. Naruto y Shikamaru fueron para allá de inmediato.