Fallen - Peaky Blinder-

XXIX

El ruido del teléfono me despierta agitada, me apoyo a la cama para levantarme mas rapido pero suelto un grito por el dolor que siento en el hombro.

-Joder¡- camino tropezándome con todo y un dolor corporal insoportable.-¿Si?-pregunto cerrando los ojos y tomando asiento en la butaca de al lado.

-Señorita Charlotte,- su voz... dios lo que daría por estar a su lado- ¿Cómo se encuentra? Hoy no ha ido a las clases.- me gustaría decirle lo mucho que lo quiero y lo mucho que necesito estar a su lado.

-He tenido un pequeño percance. Me caí y me he echo daño en el hombro pero mañana mismo volveré.- odio tener que hablar en clave.

- Me alegro que no sea nada grave, no te quito mas tiempo.

-Te echo de menos- digo con un nudo en la garganta- mucho...

- Yo también..., cuídate eres mas fuerte de lo que crees.-el peso de la realidad me hace dudar y sin querer terminar esa llamada, cuelgo.

Miro el reloj, marca las seis de la tarde, aun estoy a tiempo de ir a esa cena. Me rasco los ojos y me levanto a buscar que ponerme. Me maquilo, peino y llamo para pedir un taxi.

-Okey...se que me arrepentiré pero... necesitas despejarte.- me digo a mi misma, cojo el bolso y bajo.

...

El ruido y las luces me reciben, camino hacia la entrada y me detengo al cruzar nuestras miradas. Su expresión es de sorpresa y miedo.

-Buenas noches Arthur.

-Buenas noches.. Fre..

-Charlotte, por favor.- me acerco a el y veo como el da media pasa hacia atrás.

-No esperaba verte...

-Yo tampoco, pero era de lo mas obvio, no pensé en ello...-realmente no lo había echo y la sorpresa es lo poco que me afecta su presencia, no como años atrás...

-Disfruta la noche.

- Ya hablaremos.-le digo fríamente antes de entrar. Observo el gran salón lleno de gente y más de un hombre me llama la atención y activan mis reflejos.

Me ofrecen una copa y le tomo llevándomela a la boca y justo alguien me llama por detrás.

-¿Polly?-pregunto sorprendida.

- Dios como has crecido.-dice acariciando mi pelo- ¿Cómo estas?

- Bien, mucho mejor... nunca olvidare todo...

- Shhhh¡ No fue nada.-me corta en una grande sonrisa y yo le cojo de la mano con toda sinceridad.

- Gracias-le susurro en una triste sonrisa.

-Charlotte! Has podido venir¡! -nos interrumpe Lieze sujetada a los brazos de su marido.

-Si...-le digo mientras suelto la mano de Polli.

-¿He interrumpido algo?

-No pasa nada...-bebo de mi copa.

- Vosotras dos...¿os conocéis?-la miro antes de fijar mis ojos en Thomas por primera vez despues de hoy... mierda no había pensado en eso.

- Si, de hace unos cuentos años.-dice Polly acariciando mi espalda sonriendo.

-Pregunte por ti Charlotte.-dirijo mi vista hacia ella con preocupación.- Y muchos me dijeron...

-¿Muchos?-le pregunto ya mas seria, noto como Thomas escucha a su mujer sorprendido.

- Si, para salir de dudas y me dijeron que recuerdan a una tal... Freya, una prostituta.- la furia y el miedo se apodera de mi.