XXXII

1.7K 136 28
                                    



Llevo un día entero encerrada en la misma habitación dónde una vez dormí en los brazos de Thomas. Inspiro profundamente y me quiero dar de golpes contra la pared . Llaman a la puerta, no me doy la vuelta solo sigo sentada en la cama mirando la oscura pared.

-No has comido nada...- dice Thomas dejando otra bandeja de comida. Resopla y se aparta el pelo deteniéndose enfrente de mi. - Joder Freya...- levanto la mirada hacia su cara.

-¿Que estoy haciendo aquí?-le pregunto cansada- ¿Cuándo van a venir a buscarme?

- De aquí unas horas...-bajo la mirada para que no note las lagrimas que se van asomando.- pero mañana por la noche ya estarás de vuelta, tenemos un plan...-no dejo que termine.

- Mátame.-no dice nada, solo me sigue mirando.- Me quieren a mi pero no te han dicho como, asi que por favor, matame... -le suplico mirándole los ojos.

-No sabes lo que estas diciendo...

-Si, si que lo se. Por favor Thomas no puedo aguantar mas... no quiero volver a pasar por eso.

-No te pasara nada...-dice intentando quitarle importancia.

-¡Jodere!-grito levantándome- Eres un hijo de puta, no te das cuenta que tus putos planes siempre salen bien para ti, pero no para mi. Recuperaras a tu hijo y a mi me violaran, pegaran y mataran. Solo te pido que me ahorres ese sufrimiento...

- No te pasara nada... Freya te lo juro.-sin pensarlo dos veces, lo empujo y le quito el revolver que tiene en el pantalón y me lo llevo a la cabeza.- ¡Freya por favor...!- grita levantando las manos.

- Se os da tan bien hacer promesas vacías... No pienso pasar otra vez por eso... no... no puedo...- le murmuro llorando .

- Freya...-susurra acercándose.

- Recuperaras a tu hijo y yo por fin descansare... me arrepiento de haber aguantado tanto...

-¡Joder Freya deja el puto revolver!- inspiro y sin pensarlo dos veces ansiosa por la oscuridad aprieto el gatillo. Mi corazón se detiene junto a todo lo de mi alrededor y la expresión de Thomas empalidece y al darme cuenta es demasiado tarde, Thomas me empuja contra la cama y tira el revolver.

-No...-susurro entre lagrimas dándome cuenta de que no ha funcionado. El cargador estaba vacío- ¡No...!- sollozo entre lágrimas debajo del cuerpo de Thomas. - Eres un mal nacido! ¡No puedes hacerme esto! ¡Thomas por favor no me vuelvas a hacer estos! ¡Por favor!- le grito golpeándole el pecho. Pero al ver k no lo logro mover me detengo. Llego a la misma conclusión de siempre, no tengo el control de nada. Bajo los brazos hasta notar el colchón, me sorbo la nariz y me rindo. El tarda unos segundos en reconocer mi mirada.

- Freya... que mierdas has intentado...

- He intento tomar las riendas de mi destino... pero como siempre no tengo control sobre mi vida...

- Eso cambiará...

- Claro... Cuando tu recuperes a tu hijo y ya no quieras nada con los Rusos, y cuando Charlie consiga parar en Europa sin darte nada a cambio... hasta entonces mi vida está a vuestra merced.- dejo escapar la última lágrima antes de escuchar como llaman a la puerta.

- Thom...-Liezze se detiene observando la escena- Thomas ya han llegado.- mi corazón se rompe un poco más-

- Ahora vamos.- dice apartándose. - Vamos...- me coje de la mano y me tira hacia el. Yo sin controlar mucho las lágrimas, con los ojos llorosos lo intento de nuevo.

- Por favor Thomy...- le suplico en un susurro. Su mirad da un peueño brinco al notar el apodo.- No te imaginas de lo que son capaces...- le digo con la voz rota sujetándole la camisa- Prefiero morir antes que volver a pasar por eso, no... no puedes hacerme esto... Porfavor...- mi voz se rompe y el dolor del cuello me impide seguir hablando.

Fallen - Peaky Blinder-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora