Capítulo 40

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- No quiero – seguía con su mirada burlona.

- Eres muy molesto ¿Lo sabias?

- ¿Por qué no te gusta que este contigo?

- Porque no – me estaba irritando.

- ¿Acaso te pongo nerviosa?

- ¿Tú? – solté una risa – Ya quisieras.

- ¿No? – se acercó más.

- Lárgate.

Las puertas del Gran Comedor se abrieron, era Harry y no venía solo, traía su Saeta de Fuego, recién devuelta.

Todos se volvieron a mirar la Saeta de Fuego, murmurando emocionados, los del equipo de Slytherin estaban atónitos.

- ¿Se la regalaste?

- No, no fui yo ¿Quieres seguir con la apuesta? – lo miré burlona.

Harry me miraba serio, y confundido por estar con Malfoy.

- Por supuesto que si – y se levantó de la mesa.

Crabbe y Goyle comenzaron a seguirlo, al igual que yo, ya que se dirigía a Harry.

- ¿Estás seguro de que puedes manejarla, Potter? - dijo con voz fría y arrastrada.

- Sí, creo que sí - contestó Harry, me puse a un lado de él.

- Muchas características especiales ¿verdad? - dijo Malfoy, con un brillo de malicia en los ojos - Es una pena que no incluya paracaídas, por si aparece algún Dementor - Crabbe y Goyle se rieron.

- Y es una pena que no tengas tres brazos - le contestó Harry - De esa forma podrías tomar la Snitch.

El equipo de Gryffindor se rio con ganas, Malfoy entornó sus ojos claros me dio una mirada fugaz y se marchó ofendido.

Se reunió con los demás jugadores de Slytherin, que juntaron las cabezas, seguramente para preguntarle a Malfoy si la escoba de Harry era de verdad una Saeta de Fuego.

- Bien echo Harry.

- ¿Qué hacías con él? – me miro serio.

- Nada, solo me molestaba.

- Malfoy se comporta raro – se me acerco – pero solo contigo.

- Yo lo veo igual de raro que siempre – trate de evadirlo.

- Ron opina lo mismo.

- Y según ustedes ¿Qué tiene de raro Malfoy? – actué como si no me importara.

- No sabemos todavía muy bien porque actúa así, pero solo es contigo.

- No le des tanta importancia a eso, mejor alístate para el partido – le sonreí – Tienes que ganar Potter, hazlo lo mejor posible ¿sí? – le giñe el ojo.

- Esta… bien – se sonrojo muy rápido y escondió su cabeza.

A las once menos cuarto fui con Ron a las gradas para apoyar a Gryffindor, el tiempo no podía ser más distinto del que había imperado en el partido contra Hufflepuff, hacía un día fresco y despejado, con una brisa muy ligera.

Salieron al campo y fueron recibidos con un aplauso tumultuoso, el equipo de Ravenclaw, de color azul, aguardaba ya en el campo.

- Wood, Davies, dense la mano - ordenó la señora Hooch.

Y Wood le estrechó la mano al capitán de Ravenclaw.

- Suban a sus escobas... Cuando suene el silbato... ¡Tres, dos, uno!

Lee Jordan empezó a narrar el partido.

- Han empezado a jugar y el objeto de expectación en este partido es la Saeta de Fuego que monta Harry Potter, del equipo de Gryffindor. Según la revista El mundo de la escoba, la Saeta es la escoba elegida por los equipos nacionales para el campeonato mundial de este año.

- Jordan ¿te importaría explicar lo que ocurre en el partido? —interrumpió la voz de la profesora McGonagall.

- Tiene razón, profesora, sólo daba algo de información complementaria. La Saeta de Fuego, por cierto, está dotada de frenos automáticos y...

- ¡Jordan!

- Esta bien, está bien, Gryffindor tiene la pelota, Katie Bell se dirige a la meta...

Harry aceleró la Saeta al rodear los postes de la meta de Ravenclaw, seguido de Cho la buscadora de Ravenclaw.

Katie Bell conseguía el primer tanto del partido y las gradas ocupadas por los de Gryffindor y yo enloquecíamos de entusiasmo.

Harry descendió en picado, Cho lo vio y salió rápidamente tras él, Harry aumentó la velocidad, estaba a tres metros de distancia...

Entonces, una bludger impulsada por uno de los golpeadores de Ravenclaw surgió ante Harry veloz como un rayo, Harry la esquivó por un centímetro.

Los seguidores de Gryffindor dieron un grito de decepción y los de Ravenclaw aplaudieron a rabiar a su golpeador.

- Vamos Harry – grite.

- Tu puedes Harry – me siguió Ron.

George Weasley desfogó su rabia enviando la segunda bludger directamente contra el golpeador que había lanzado contra Harry.

El golpeador tuvo que dar en el aire una vuelta de campana para esquivarla.

- ¡Gryffindor gana por ochenta a cero! ¡Y miren esa Saeta de Fuego! Potter le está sacando partido, vean cómo gira, la Cometa de Chang no está a su altura, la precisión y equilibrio de la Saeta es realmente evidente en estos largos...

- ¡JORDAN! ¿TE PAGAN PARA QUE HAGAS PUBLICIDAD DE LAS SAETAS DE FUEGO? ¡SIGUE COMENTANDO EL PARTIDO!










Amo como Jordan narra los partidos 😂
💙

Slytherin's MasterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora