Harry sabia como convencerme.
- Te odio Potter, ¡Pero solo por esta vez! La próxima le diré a McGonagall, o yo misma te quitare esa capa y el mapa.
- Sabia que no dirías nada – se burló Ron.
- Cállate.
Fuimos a la oficina de correos, luego visitamos la tienda de Zonko, que estaba tan llena de estudiantes de Hogwarts, Harry tuvo que tener mucho cuidado para no pisar a nadie y no provocar el pánico.
Había artículos de broma para satisfacer hasta los sueños más descabellados de Fred y George, Harry susurró a Ron lo que quería que le comprara y le pasó un poco de oro por debajo de la capa.
El día era agradable con un poco de brisa, y a ninguno de los tres nos apetecía entrar a otro sitio, así que seguimos caminando, dejando atrás Las Tres Escobas y subimos una cuesta para ir a visitar la Casa de los Gritos, el edificio más embrujado de Gran Bretaña.
Estaba un poco separada y más elevada que el resto del pueblo, e incluso a la luz del día resultaba escalofriante con sus ventanas cegadas y su jardín húmedo, sombrío y cuajado de maleza.
- Hasta los fantasmas de Hogwarts la evitan - explicó Ron - Le he preguntado a Nick Casi Decapitado... Dice que ha oído que aquí residen unos fantasmas muy bestias. Nadie puede entrar, Fred y George lo intentaron, claro, pero todas las entradas están tapadas.
- No luce tan embrujada – dije.
Baje un poco para acercarme más a la casa.
- ¿Estás loca? ¿A dónde crees que vas? – grito asustado Ron.
- Solo quiero ver mejor la casa.
Seguí caminando, pero una voz me detuvo.
- …Supongo que te encantaría vivir ahí ¿verdad, Ron? – reconocí esa voz, era Malfoy. - ¿Sueñas con tener un dormitorio para ti solo? He oído decir que en tu casa duermen todos en una habitación ¿es cierto?
Desde donde yo estaba solo podía ver a Ron así que volví a subir.
- Te crees muy valiente ¿No Malfoy? – le grite.
- No sabía que estabas con Weasley – me miro extrañado.
- Puedes repetir lo que dijiste hace un momento – quería sacar mi varita, pero Harry que seguía con la capa puesta me detuvo.
- Déjamelo a mí - me susurró al oído.
- Estábamos hablando de su amigo Hagrid - dijo Malfoy - Estábamos imaginando lo que dirá ante la Comisión para las Criaturas Peligrosas ¿Crees que llorará cuando al hipogrifo le corten...?
¡PLAF!
Al golpearle la bola de barro en la cabeza, Malfoy se inclinó hacia delante, su pelo rubio platino chorreaba barro de repente.
- ¿Qué demo...?
Ron se sujetó a la valla para no revolcarse en el suelo de la risa, Malfoy, Crabbe y Goyle se dieron la vuelta, mirando a todas partes, Malfoy se limpiaba el pelo.
- ¿Qué ha sido? ¿Quién lo ha hecho?
- Esto está lleno de fantasmas ¿verdad? —observó Ron.
Crabbe y Goyle parecían asustados, Malfoy daba vueltas y miraba como loco el desierto paraje.
¡PATAPLAF!
Crabbe y Goyle recibieron algo esta vez, Goyle saltaba sin moverse del sitio, intentando quitarse el barro de sus ojos pequeños y apagados.
- ¡Ha venido de allá! - dijo Malfoy.
Crabbe fue hacia delante dando traspiés, estirando como un zombi sus largos brazos.
Crabbe se dirigía asía Ron, pero al parecer Harry estiró la pierna haciendo que tropezara, trastabilló y su pie grande y plano pisó la capa de Harry.
Durante una fracción de segundo, Malfoy lo miró fijamente.
- ¡AAAH! - gritó señalando la cabeza de Harry.
Dio media vuelta y corrió colina abajo como alma que llevara el diablo, con Crabbe y Goyle detrás.
Harry se puso bien la capa, pero ya era demasiado tarde.
- Harry - dijo Ron, avanzamos a trompicones hacia el lugar en que había aparecido la cabeza Harry.
- Más vale que huyas, si Malfoy se lo cuenta a alguien... lo mejor será que regreses al castillo... – le advertí.
- ¡Nos vemos más tarde! - dijo Harry.
Ron y yo corrimos hacia Hogsmeade, llegamos rápido y nos subimos una carroza los dos, esta empezó a avanzar.- ¡Te lo dije Ron! ¡te lo dije!
- No es mi culpa.
- Si, si es tu culpa y mía también.
- No hicimos nada malo.
- ¿Noooo? Tú lo convenciste de que viniera, y yo no lo impedí.
- No es como si Sirius Black lo hubiera encontrado.
- No, pero lo vio Malfoy, ira a decirle a un profesor.
- ¿A quién crees que le diga?
- ¿Tu quien crees?
En cuanto llegamos al colegio, fuimos directo al despacho de Snape, llegamos sin aliento, el profesor Lupin también se encontraba ahí.
- Yo... le di... a Harry... ese objeto - dijo Ron con la voz ahogada - Lo compré en Zonko hace mucho tiempo...
- Yo estaba… con Ron… cuando lo compro – añadí.
- Bien - dijo Lupin mirando contento a su alrededor - ¡Parece que eso lo aclara todo! Me lo llevo, Severus, si no te importa - Plegó el mapa y se lo metió en la toga - Harry, Ron, Abi vengan conmigo, tengo que decirles algo relacionado con el trabajo sobre los vampiros. Discúlpanos Severus.
Los cuatro caminamos hasta el vestíbulo sin hablar, luego Harry se volvió hacia el profesor Lupin.
- Señor profesor yo...
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Slytherin's Master
FantasyEl tercer año escolar esta apunto de comenzar en Hogwarts el Colegio de Magia y Hechicería para Abigail Lestrange, una joven sangre pura. Compartiendo año nada más y nada menos que con el trío de oro y un chico rubio que no es para nada de su agrado...