- ¿Dónde está Buckbeak, Hagrid? - preguntó Ron.
- Lo... lo tengo afuera - dijo Hagrid, derramando la leche por la mesa al llenar la jarra - Está atado en el huerto, junto a las calabazas. Pensé que debía ver los árboles y oler el aire fresco antes de...
A Hagrid le temblaba tanto la mano que la jarra se le cayó y se hizo añicos.
- Yo lo haré, Hagrid – dije, Hermione y yo inmediatamente nos apresuráramos a limpiar el suelo.
- Hay otra en el aparador - dijo Hagrid sentándose y limpiándose la frente con la manga.
- ¿No hay nada que hacer Hagrid? - preguntó Harry sentándose a su lado - Dumbledore...
- Lo ha intentado - respondió Hagrid - No puede hacer nada contra una sentencia de la Comisión, les ha dicho que Buckbeak es inofensivo, pero tienen miedo. Ya saben cómo es Lucius Malfoy... me imagino que los ha amenazado... Y el verdugo, Macnair, es un viejo amigo suyo. Pero será rápido y limpio, y yo estaré a su lado.
Hagrid tragó saliva, sus ojos recorrían la cabaña buscando algún retazo de esperanza.
- Dumbledore estará presente, me ha escrito esta mañana, dice que quiere estar conmigo. Un gran hombre, Dumbledore...
- Nosotros también estaremos contigo, Hagrid - dije, pero Hagrid negó con la despeinada cabeza.
- Tienen que volver al castillo, les he dicho que no quería que lo vieran, y tampoco deberían estar aquí. Si Fudge y Dumbledore te encuentran, Harry, te verás en un aprieto.
Por el rostro de Hermione corrían lágrimas silenciosas, pero disimuló ante Hagrid preparando el té. Tome la botella de leche para verter parte de ella en la jarra, pero adentro de la caja había otra cosa.
- ¡Ron! – lo llame.
- No.… no puedo creerlo ¡Es Scabbers! – dijo Hermione quitándome la caja.
Ron nos miró boquiabierto.
- ¿Qué dices?
Hermione acercó la jarra a la mesa y la volcó. Con un gritito asustado y desesperado por volver a meterse en el recipiente, Scabbers apareció correteando por la mesa.
- ¡Scabbers! - exclamó Ron desconcertado - Scabbers, ¿qué haces aquí?
Tomó a la rata, que forcejeaba por escapar, y la levantó para verla a la luz. Tenía un aspecto horrible, estaba más delgada que nunca, se le había caído mucho pelo, dejándole amplias lagunas, y se retorcía en las manos de Ron, desesperada por escapar.
- No te preocupes, Scabbers - dijo Ron - No hay gatos, no hay nada que temer.
De pronto Hagrid se puso en pie, mirando la ventana fijamente. Su cara habitualmente rubicunda, se había puesto del color del pergamino.
- Ya vienen...
Nos dimos rápidamente la vuelta, un grupo de hombres bajaba por los lejanos escalones de la puerta principal del castillo, delante iba Albus Dumbledore, su barba plateada brillaba al sol del ocaso.
A su lado iba Cornelius Fudge, tras ellos marchaban el viejo y débil miembro de la Comisión y el verdugo Macnair.
- Deben irse - dijo Hagrid, le temblaba todo el cuerpo - No deben verlos aquí...
Ron se metió a Scabbers en el bolsillo y Hermione tomó la capa.
- Salgan por detrás.
Fuimos hacia la puerta trasera que daba al huerto, nos encontramos a Buckbeak a pocos metros, atado a un árbol, detrás de las calabazas. Buckbeak parecía presentir algo, volvió la cara afilada de un lado a otro y golpeó el suelo con la zarpa, nervioso.
- No temas Buckbeak - dijo Hagrid con voz suave – Bien, váyanse
Pero no nos movimos.
- Hagrid, no podemos... Les diremos lo que de verdad sucedió.
- No pueden matarlo...
- ¡Váyanse! - ordenó Hagrid con firmeza - Ya es bastante horrible y sólo faltaría que además se metieran en problemas.
Mientras Hermione nos ponía la capa, escuchamos hablar al otro lado de la cabaña, Hagrid miró hacia el punto por el que acabábamos de desaparecer.
- Váyanse rápido.
Y volvió a entrar en la cabaña al mismo tiempo que alguien llamaba a la puerta de delante. Lentamente como en trance, rodeamos silenciosamente la casa, al llegar al otro lado, la puerta se cerró con un golpe seco.
- Vámonos rápido, por favor - susurró Hermione - No puedo seguir aquí, no lo puedo soportar...
- Pero debemos ayudarlo – insistí.
- Abi – hablo Harry – no podemos hacer nada.
Sin ganas, empezaron a subir hacia el castillo, el sol se apresuraba a ocultarse, el cielo se había vuelto de un gris claro teñido de púrpura, pero en el oeste había destellos de rojo rubí.
Ron se detuvo en seco.
- Por favor Ron –le dije.
- Se trata de Scabbers... quiere salir.
Ron se inclinaba intentando impedir que Scabbers se escapara, pero la rata estaba fuera de sí, chillando como loca, se debatía y trataba de morder a Ron en la mano.- Scabbers, soy yo - susurró Ron.
Escuchamos abrirse una puerta a nuestras espaldas y luego voces masculinas.- ¡Por favor Ron, vámonos, están a punto de hacerlo! - insistió Hermione.
- Vale, ¡quédate quieta, Scabbers!
¡Hola! ¡Espero y les este gustando la historia!
Maldito Scabbers! Jaja sólo me agradó una vez y fue cuando se lanzó contra Crabbe y Goyle
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💙

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Slytherin's Master
FantasyEl tercer año escolar esta apunto de comenzar en Hogwarts el Colegio de Magia y Hechicería para Abigail Lestrange, una joven sangre pura. Compartiendo año nada más y nada menos que con el trío de oro y un chico rubio que no es para nada de su agrado...