Capítulo 58

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Se hizo un vibrante silencio, todos mirábamos a Lupin, que parecía tranquilo, aunque estaba muy pálido.

- Están acertando mucho menos que de costumbre – dijo - Me temo que sólo una de tres, no es verdad que haya ayudado a Sirius a entrar en el castillo, y te aseguro que no quiero matar a Harry... - Se estremeció visiblemente - Pero no negaré que soy un hombre lobo.

Ron hizo un esfuerzo por volver a levantarse, pero se cayó con un gemido de dolor, Lupin se le acercó preocupado, pero Ron exclamó:

- ¡Aléjate de mí, licántropo!

Lupin se paró en seco, y con un esfuerzo evidente, se volvió hacia nosotras.

- ¿Desde hace cuánto que lo saben?

- Siglos - contestó Hermione.

- Desde que hice el trabajo para el profesor Snape – le respondí.

- Estará encantado - dijo Lupin con poco entusiasmo - Puso ese trabajo para que alguno de ustedes se percatara de mis síntomas ¿Comprobaron el mapa lunar y se dieron cuenta de que yo siempre estaba enfermo en luna llena? ¿Se dieron cuenta de que el boggart se transformaba en luna al verme?

- Las dos cosas - respondió Hermione en voz baja.

Lupin lanzó una risa forzada.

- Nunca he conocido a brujas de su edad tan inteligentes.

- No soy tan inteligente – susurre - ¡Si lo fuera, le habría dicho a todo el mundo lo que es usted!

- Ya lo saben - dijo Lupin - Al menos, el personal docente lo sabe.

- ¿Dumbledore lo contrató sabiendo que era usted un licántropo? - preguntó Ron con voz ahogada - ¿Está loco?

- Hay profesores que opinan que sí - admitió Lupin - Le costó convencer a ciertos profesores de que yo era de fiar.

- ¡Y ESTABA EN UN ERROR! - gritó Harry - ¡HA ESTADO AYUDÁNDOLO TODO ESTE TIEMPO!

Señalaba a Black, que se había dirigido hacia la cama y se había echado encima, ocultando el rostro con mano temblorosa.

- No he ayudado a Sirius - dijo Lupin - Si me dejan, puedo explicarles, Miren...  - Separó las varitas las lanzó hacia sus respectivos dueños - Ya ven - prosiguió Lupin, guardándose su propia varita en el cinto - Ahora ustedes están armados y nosotros no ¿Quieren escucharme?

- Si no lo ha estado ayudando - dije - ¿cómo sabía que se encontraba aquí?

- Por el mapa - explicó Lupin - el mapa del merodeador, estaba en mi despacho examinándolo...

- ¿Sabe utilizarlo? - le preguntó Harry con suspicacia.

- Por supuesto - contestó Lupin, haciendo con la mano un ademán de impaciencia - Yo colaboré en su elaboración. Yo soy Lunático... es el apodo que me pusieron mis amigos en el colegio.

- ¿Usted hizo...? – pregunte incrédula.

- Lo importante es que esta tarde lo estaba examinando porque tenía la idea de que intentarían salir furtivamente del castillo para visitar a Hagrid antes de que su hipogrifo fuera ejecutado. Y estaba en lo cierto ¿a que sí? - Comenzó a pasear sin dejar de mirarnos, levantando el polvo con los pies - Supuse que se cubrirían con la vieja capa de tu padre, Harry.

- ¿Cómo sabe lo de la capa?

- ¡La de veces que vi a James desaparecer bajo ella! - dijo Lupin, repitiendo el ademán de impaciencia - Que lleven una capa invisible no les impide aparecer en el mapa del merodeador. Los vi cruzar los terrenos del colegio y entrar en la cabaña de Hagrid, veinte minutos más tarde dejaron a Hagrid y volvían hacia el castillo, pero en aquella ocasión los acompañaba alguien.

Slytherin's MasterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora