I love you 3000, kid. [Mini-historias Irondad y Spiderson]

Guardián.

Peter estaba terminando los deberes que el profesor les había mandado cuando por fin después de un día interminable, sonó la campana de la escuela, dando así por terminado el día escolar de hoy. Todos los alumnos inmediatamente saltaron, emocionados y apresurando-se a guardar sus cosas para salir del infierno que para ellos era la escuela y regresar a casa, todos excepto Peter, que no sentía aquella prisa por llegar su hogar como sus demás compañeros.

Todo aquello termino para él cuando su mama murió hace un par de años y desde entonces su vida se convirtió en un infierno, pues su papá cambio, no, ese hombre ya no se podría considerar su padre, Richard desde la muerte de su mujer se había vuelto más frívolo y violento, había comenzado a beber más y a descargar toda su frustración e ira contra el pobre niño de 10 años, quien tenía que soportar los golpes y los malos tratos por parte de su padre.

Lo único bueno que le había pasado desde entonces, fue conocer al Señor Stark, quien le descubrió en una feria de ciencias, a la que su padre ni se molesto en asistir, allí vio su potencial al ganar con su proyecto el primer puesto y le ofreció una mentoria en Industrias Stark. Se convirtió así en su pupilo y poco a poco fueron conociendo-se hasta el punto de formar una bonita relación de amistad y confianza, que más tarde se fortaleció todavía más al descubrir que fue amigo cercano de su madre.

Con Tony encontraba el amor que le faltaba, esa seguridad que debía proporcionar un padre y ese cariño que todo niño necesita.

_ ¡Señor Stark! _corrió el niño sonriente hacia su mentor, emocionado por pasar tiempo con él, tanta era su emoción que no reparo en las piezas que habían esparcidas por el suelo y acabo tropezando con ellas, cayendo al suelo._

_ ¡Peter! _el hombre inmediatamente reaccionó y el niño por simple instinto se protegió a si mismo pensando que había echo enojar al mayor y ahora lo reprendería por ello, como en muchas ocasiones lo había echo su padre quien siempre se molestaba por lo torpe que era, pero en vez de escuchar gritos, sintió unas manos cálidas y reconfortantes posarse en sus hombros y cuando alzo la mirada vio a su mentor mirando-lo fijamente con preocupación y cariño._ Dios mío niño ¿estas bien? _ el chico perplejo al no esperar-se esa reacción asintió a duras penas, encontrando-se de nuevo con la mirada del Señor Stark, queriendo memorizar-la pues nunca antes lo habían mirado así._ Mierda chico, te hiciste un poco de sangre en la rodilla, espera aquí, iré a por el botiquín. _se levanto y tal como se fue regreso, se arrodilló frente a él y comenzó a curar la rozadura que se había echo con tanta ternura y cuidado que a Peter se le saltaron las lagrimas ante la atención y el afecto que estaba recibiendo._ Hey, no llores pequeño, no es nada tranquilo, ¿ves? Ya esta curado. _dijo colocando-le una tirita de Iron Man._ ¿Estas mejor?

_ ¿No... no estas enojado? _pregunto con la voz pequeña y asustada de que fuera así._

_ ¿Qué? ¡No! Claro que no, en todo caso soy yo el que debe disculpar-se, lo siento no debí tener cosas tiradas por el suelo. _coloco una mano sobre su cabeza y acarició sus rizos._ Nunca quise que te lastimarás. _le sonrió y Peter le devolvió la sonrisa, acercando-se para poder abrazar-le._

Y allí, en sus brazos, se sintió a salvo por primera vez desde hace mucho tiempo.

A veces deseaba que su padre fuera Tony y no Richard...

El tiempo que pasaba con él, era el mejor momento de la semana para el niño y siempre deseaba que llegará el viernes para poder verlo, pero a pesar de que era el ultimo día de la semana y que eso en teoría significaba que era día de laboratorio con su mentor e ídolo, debía perderse eso e ir directamente a casa, ya que su padre le había prohibido ir esta mañana cuando olvido fregar los platos.