I love you 3000, kid. [Mini-historias Irondad y Spiderson]

🐺El lobo y su cachorro🐺

Ante la presencia del hombre Peter no pudo evitar sonreír extasiado.

_ ¡Tony! _inmediatamente se lanzó a sus brazos disfrutando de la cercanía del hombre el cual no tardó en rodearlo también, posando una de sus manos sobre su cabeza._ Te extrañé aunque siempre te sentí conmigo.

_ Siempre he estado a tu lado cachorro. _susurro apretando su agarre en el niño._

_ ¿Pero como...? _se separo buscando respuestas y de repente comenzó a mirar a su alrededor._ ¿Donde esta...?

_ Hey Bambino. _lo interrumpió tomando con delicadeza su rostro y guiándolo de nuevo hacia sus ojos._ Hay una historia que necesito contarte.

~•°•~

Hace mucho, mucho tiempo, el primer hombre lobo apareció en el humanidad como un ser superior al resto de los seres humanos, con el paso de la vida ese hombre lobo se reprodujo y más aparecieron. Unos, convivieron en paz sin dejarse ver por el ojo humano, viviendo su vida alejados de la civilización, pero otros querían sangre, odiaban al ser humano, querían conquistar el mundo doblegándolos, haciendo que sus corazones se oscurecieran, y se convirtieron en bestias. El linaje de los hombre lobos de sangre pura se vio amenazado por las bestias al no compartir las mismas ganas de destrucción que tenían ellos, por lo que se produjo una guerra entre esos dos bandos.

Una guerra que lleva siglos existiendo. Y aunque los hombres lobo fueron desapareciendo con el paso de los años, algunos pocos todavía caminan sobre la tierra y esa guerra sigue latiendo a día de hoy.

Hace 38 años un lobo de sangre pura nació en el mundo de los humanos y creció como uno de ellos.

El nombre de ese lobo era Tony Stark, heredero de los sangre de lobos auténticos, alfa de la manada de los pocos que quedaban y ahora...

~•°•~

Padre de un cachorro que lo miraba con grandes ojos de bambi intentando comprender todo lo que le acababa de contar su figura paterna.

_ ¿T-tu? ¿Eres... Eres...? _titubeo confundido._

_ Peter yo... _pronuncio con temor._ Se que puede ser difícil de entender pero sólo quiero protegerte y no tienes porque tener miedo, jamás haría nada que te hiciera daño.

_ ¡Lo se, tu me salvaste! _grito de repente volviendo a abrazar a su padre, haciendo que todos los miedo del mayor se marcharán, porque su hijo no lo temía._

La razón por la que no le dijo antes era el miedo que sentía por el posible rechazo del pequeño niño que amaba con todo su corazón.

Pero su hijo no le tenía miedo, lo quería y él lo quería todavía más si eso era posible.

_ Gracias... _murmuro acurrucando la cabeza de su hijo con una de sus manos y liberando aquellas lagrimas que llevaba mucho tiempo conteniendo._ Gracias por creer en mi.

[...]

_ Bien con esto tu pierna ya no te dolerá. _dijo terminando de vendar el tobillo de su niño aplicando unas ultimas caricias en la zona queriendo consolarlo._

El chico provó a levantar-se y a apoyar-se sobre su pie dolorido, sin encontrar ninguna dificultad en ello por lo que sonrió agradecido a su salvador.