HARALD (Editando)

Epílogo

_ Entonces lo vi. Nunca creí que moriría de esa manera, realmente creí que mi muerte sería más dolorosa.

Estaba sentada en aquella silla con alguien a mi lado. Seguía mojada.

Estábamos en una alberca, pero no pude mirar mucho el hermoso paisaje. Solo sé que alguien puso un arma en mi cabeza. Quise mirar quién era, pero el sonido el gatillo fue lo único que escuché.

Hola jajaja. No se la crean. Ahora sí, el epílogo.

_Entonces lo vi, vi todos los globos. Había un veinticinco gigante. Estábamos en una piscina desconocida, imaginé que era un hotel o algo así.

Y todos estaban allí, Kat, Lila, Lili, Levan, Harald y sus padres.

-Eres muy dramática- dijo Levan detrás de mí.

Me levanté con lágrimas en los ojos. Creí que no lo sabían.

-¡Felicidades!- gritaron todos al mismo tiempo.

Y mis lágrimas se desbordaron. No podía creer que Levan y Alan me habían secuestrado.

¡Dios!.

-No puedo con esto- sequé mis lágrimas. De inmediato todos se acercaron a abrazarme- son unos tontos- le di un beso a Amy- no puedo creer que hayas sido parte del plan, pequeña- entrecerré mis ojos hacia ella.

-Cúlpame a mí- Benson me abrazó con una sonrisa- fui yo- me intenté alejar porque estaba enojada, pero me abrazó más fuerte.

-Eres malo- halé su cabello.

-Te amo- me dio un corto beso en los labios.

-Yo me amo más- me safé de él.

-Sabía que vendrías como una loca, así que sube a la habitación 13 y ponte lo que te dejé en la cama- me pasó una llave.

Todavía estaba aturdida por lo que me habían hecho.

Encima de la cama había un traje de baño y un vestido, además de otro vestido formal.

-Señorita- un camarero me tendió una copa. La tomé y caminé a la orilla de la piscina donde estaban sentados.

-Creí que que no sabían de mi cumpleaños- tomé asiento en el medio de las piernas de Harald, justo con los pies en el agua.

-¿Cómo no sabríamos?. Te amamos- Levan me pellizcó una mejilla. Lo miré con adoración.

-No la toques- Harald dijo detrás de mí. Levan le hizo una mueca.

-No lo toques- me dijo Kat.

-Ridícula- rodeé los ojos con diversión.

-¿Qué es eso?- cuestionó Lili mirando el anillo en mi dedo. De inmediato todos miraron el mismo punto. Sonreí.

-Nos vamos a casar- dije y tuve que tapar mis oídos con tanto griterío que hicieron.

-¡No lo puedo creer!- gritó Lila.

-Nuestro Harald se va a casar- dijo su padre. Su madre asintió.

-¿Qué les puedo decir?. Ebbye es afortunada de casarse con alguien como yo- bromeó detrás de mí. Le di un codazo en el abdomen.

Y así fue como pasamos esa linda tarde. Todos estábamos tranquilos.

-Si vuelves a verte con tu ex en serio voy a matarte- me susurró cuando todos estaban distraídos.

-Creí que lo habías olvidado- tomé un trago de la champaña.

-Lo olvidaré. ¿Sabes por qué te puse ese anillo?. Porque te amo y no quiero verte con nadie más. ¿Sabes a qué me refiero cuando te digo que te mataré?- negué sintiendo su respiración en mi nuca- te voy a follar tan duro que no caminarás.