Habían pasado seis días desde aquel encuentro a oscuras, estábamos en febrero y esa tarde no dejé de dar vueltas por la casa. Bajé al salón sin la máscara puesta, aunque con la gasa en la mejilla. Me negaba a ir a revisiones médicas hasta que cicatrizara y, según Yoona, que era la única que me la veía, aún quedaba mucho. Ese día, en cuanto me vio, se detuvo frente a mí. Yoona estaba muy estropeada, el tiempo no la había tratado bien. Nos había cuidado desde niños, tanto a mi hermana mayor, Eunha, como a mí, y era alguien especial en nuestra familia.
—¿Qué te tiene tan inquieto? —me preguntó cariñosa, dejando de limpiar
el polvo con un plumero—. ¿Has decidido ya si quieres que tus padres vengan y…?—No, ese es un tema cerrado —la corté—. Diles que no. No quiero la compasión de nadie. —Asintió sin contradecirme—. Se trata de otra cosa. Yo… —titubeé— he conocido a alguien y necesito volver a verlo. Yoona me miró con sorpresa. Sin duda, no esperaba que en tan poco tiempo volviera a rehacer mi vida. ¿Acaso lo estaba haciendo? Simplemente había conocido a un chico con el que conectaba y, desde aquel día, cuando
me fui dejándolo dormido, mi cabeza se inundaba de imágenes de su cuerpo y el mío unidos, devorándonos como locos. Necesitaba aquello de nuevo, ese equilibrio entre la pasión y la conexión
que había sentido estando a su lado. Estaba ansioso, alterado al no saber de él y eso me impedía pensar en otras cosas. Mis cinco sentidos habían grabado cada una de las sensaciones que me transmitió.—Ve a la dirección que te voy a dar y pregunta si Jung Hoseok ha intentado saber algo de Vante —le dije. Yoona volvió a asentir, sin preguntar, pues sabía que era algo que yo odiaba, y buscó bolígrafo y papel para anotar.
—Vante—repitió, suspirando.
—Si no ha dejado su teléfono, dales el mío —continué, sentándome en el sofá, con las manos en la cara—. Haz todo lo posible. Quiero volver a verlo cuanto antes.
—Tranquilo. —Sonrió.
—No empieces, sólo será una noche.— Le di la dirección del local En la oscuridad y dejé que se fuera. Una nueva ansiedad me invadía. Me fui a la cocina y allí traté de comer un poco de la ensalada que Yoona había dejado preparada. Me serví una copa de vino, que terminaron siendo tres… Finalmente, empecé a comer, pues la ansiedad me daba por devorar todo lo que se ponía a mi alcance. Horas más tarde, y tras una dura sesión de entrenamiento en mi casa, ya que lo único que me quedaba para no venirme abajo era cuidar mi cuerpo, volví a la sala. Encendí el ordenador y navegué por internet para matar el tiempo. Cuando oí abrirse la puerta de casa, la angustia me encogió el estómago con fuerza. No soportaría una negativa como respuesta. La fascinación que había sentido por Jung Hoseok no me lo permitiría y, de ser necesario, buscaría el modo de encontrarlo.
—¿Te vas a curar la herida? —Furioso por que no fuera al grano, me levanté de golpe. Yoona sonrió—. Había dejado su teléfono… Aquí lo traigo, pero de todos modos he dejado también el tuyo.— La opresión que sentía se evaporó. Hice crujir los nudillos y sacudí el cuerpo para liberar la tensión acumulada. Iba a verlo, iba a verlo. Las palabras se repetían en mi cabeza, mientras estallaba en mí la desesperación.
«Sólo unas horas…».
—Cúratela por si viene —me animó Yoona, más contenta que de costumbre. Llevaba una bolsa en la mano y de ella sacó un reloj de arena.¿Qué era aquello? Como si nada, me sonrió—. Es un regalo para ti. Para que cuentes las horas antes de su visita —me aclaró, dejando el objeto sobre la mesa. La arena empezó a caer.
—Yoona, él no sabe quién soy. Mantente al margen de esta historia. No tiene nada que ver con lo que tuve con Seojeon.
—Lo sé. —Bajó la mirada y del cajón que había junto al televisor, sacó lo necesario para curarme. Yo seguía esperando algo más que aquella frase que quedó tan en el aire.
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DEPRIVED (VHope)
FanficLos cuerpos están conectados desde el minuto uno. La necesidad indescifrable que poseemos nos consume. Pero el error del pasado nos separa. Las cicatrices en nuestros corazones no han sanado sin importar que las de la piel ya no sean más que solo u...