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Monae despertó muy temprano y revisó sus mensajes, tenía muchísimas notificaciones de Twitter, una en específico la hizo soltar un grito de emoción.

—¡Monae qué sucede! —Maya entró corriendo a la habitación—. ¿Estás bien? ¿Qué pasa, estás loca? —Preguntó molesta al verla bien.

—Me ha contactado alguien de la radio, ¡Capital Fm Maya, quieren entrevistarme! —Gritó—. Esto está saliéndose de control, me asusta, no sé qué pasa, pero por Dios, la radio quiere hablarme, es muy loco, jamás pensé...

—Mon, tranquila, estás alternándote, ¿Qué te dijeron exactamente?

—Que quieren ayudarme con la búsqueda y que me presente a las 12 pm de hoy en las instalaciones para platicar conmigo ¡En vivo! —Tomó a su hermana por los hombros—. ¿Crees que deba aceptar?

—Pues, ¿qué de malo podría tener? Tal vez así encuentres más rápido a la persona que perdió los boletos. Vamos, tienes que arreglarte —La llevó al cuarto de baño—. Te acompañaré, dúchate, mientras elegiré tu atuendo.

Monae hizo caso a su hermana, salió de ducharse y se puso lo que Maya había dejado sobre su cama. Intuyó que ella estaría arreglándose así que preparó un desayuno rápido. Justo cuando terminó Maya la acompañó en la cocina y se sentaron a desayunar.

—¿Tienes la dirección? Debemos irnos temprano, aún no sabemos andar por Londres y no se nos puede hacer tarde.

—Si, me la dieron ellos, creo que está un poco lejos de aquí, llamaré un taxi —Limpió su boca y se acercó al directorio para llamar un taxi.

—Mon espero que no te pongas nerviosa, nunca te ha gustado hablar en público.

Monae suspiró. —Lo sé, pero podré controlarme, además nadie me verá, es la radio y es por una buena causa, después podré seguir normalmente con mi vida y ni si quiera me recordaran —Rió—. Vamos, el taxi está por llegar.

Al llegar a las instalaciones se asombraron por lo grande que este se veía, entraron y rápidamente las hicieron pasar con la persona que contactó a Monae, le explicaron que le harían algunas preguntas al aire para dar la oportunidad de que alguna llamada entrara. El programa comenzó y ella se ponía cada vez más nerviosa. Ni siquiera prestaba atención hasta que se dio cuenta de que le realizaban la primera pregunta.

—¿Cómo decidiste comenzar la búsqueda para regresar los boletos?

—Bueno, supongo que es algo que todos harían, no me pertenecían y no parecía lo correcto robarle a alguien más la oportunidad de ver a su artista favorito.

—Entonces, ¿Te gusta Harry Styles?

—¿Y a quién no? —Rió—. Me encanta su música, claro que daría lo que fuera por asistir a su concierto, pero honestamente, no robando la oportunidad a alguien más.

—Es grandioso, no estoy seguro de haber podido regresarlos, digo si fueran de mi artista favorito lo pensaría dos veces —El entrevistador rió—. Es broma, claro, todos debemos actuar honestamente. Tenemos una llamada, parece que encontramos a la dueña.

—¡Por Dios! ¿en serio? —Monae se emocionó—. Vamos, toma la llamada.

El entrevistador tomó la llamada, era la madre de una niña de 13 años, agradeció a Monae por actuar con tal honradez y explicó lo triste que se encontraba su hija y lo culpable que ella se sentía al haberlos perdido.

—Bien Monae, tu trabajo está hecho, por la tarde llegará la dueña de los boletos y podrás entregárselos personalmente —Anunció el entrevistador aún al aire.

—Genial, sí, no puedo esperar —Rió—. Será agradable conocer a la pequeña.

—Aún hay una sorpresa para ti, Harry Styles escuchó todo el programa, tu buena acción ha tocado su corazón ¡Tiene boletos especiales para ti!

Monae tenía los ojos muy abiertos y su boca dejó escapar un grito ahogado, no podía creerlo. —¿Es real? ¿Nada de bromas? Y-yo, no sé qué decir, no, no esperaba esto, Harry sabe de mi existencia, ¿Harry sabe? ¡Jesucristo, gracias!

El entrevistador despidió el programa, pero Monae tenía su mente por otro lado, ¿Podrá ser posible? ¿Conocería a Harry Styles?

BROKEN DREAMS | H.S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora