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Después de recorrer la ciudad por horas finalmente regresaron al hotel. Había anochecido y apenas subieron al piso donde se encontraban sus habitaciones la banda de Harry comenzó a felicitarlos.

—¡La nueva pareja! Llegaron —Mitch abrazó a Harry riendo.

—¿Sabes lo incómodo que habría sido tu comentario si Monae hubiera dicho que no? —Rió Harry correspondiendo el abrazo.

—Oh vamos, la pensé bien antes de decirlo. Además, vimos las fotos, lucen encantadores.

Monae giró velozmente su cabeza hacia Harry.

—¿Fotos? ¿Qué fotos? —Preguntó Harry al percatarse del repentino terror que se reflejó en los ojos de Monae.

—Están en internet y las han pasado por televisión toda la tarde. —Respondió esta vez Sarah.

Harry tomó la mano de Monae tranquilizándola, ya que palideció y se veía bastante preocupada.

—Mon tranquila, no pasará nada. No vale la pena.

—No quiero meterte en problemas, es todo —Suspiró.

—No lo harás, estamos juntos en esto.

Monae sonrió débilmente y se disculpó con todos, prefirió entrar a su habitación. Tomó una ducha y al salir cargó su celular, esperando que este encendiera.

Apenas encendió pudo ver la cantidad de llamadas y mensajes que tenía de su hermana, pero no tenía ganas de hablar, así que solo le respondió con un mensaje.

"Te explicaré todo apenas llegue, salgo mañana temprano."

Después de pulsar "enviar" entró a sus redes sociales y lo primero que salió fueron las ultimas noticias sobre Harry Styles, fotografías de ellos durante el pícnic, al bailar, comiendo y...¡El beso! Esta vez Harry no podría negarlo. Por suerte las fotografías eran lo suficientemente bajas en calidad como para no poder observar al 100% el rostro de Monae, eso la hizo relajar un poco, aún un poco de suerte estaba de su lado.

Titulares como "La nueva novia de Harry Styles" "La chica misteriosa de Harry" "Harry confirma relación al besar a la chica misteriosa" y más, resonaban en su cabeza, decidió dejar de lado el internet y descansar un rato viendo una película.  A los pocos minutos tocaron a su puerta, no tenía ganas de ver a nadie, pero no quería ser descortés, así que la abrió con pesadez encontrándose con Harry, al instante se relajó.

—Harry... —Sonrió al verlo parado frente a ella tendiéndole un pequeño ramo de flores de colores. Negó con la cabeza abriendo un poco más la puerta—. Pasa.

—Así no era como quería terminar nuestro primer día de relación —Suspiró haciendo una mueca— Disculpa Mon, sé lo difícil que es salir con alguien como yo.

Monae se acercó a él y besó su mejilla.

—Estamos juntos en esto —Repitió las palabras que él le había dicho antes—. No es culpa tuya, discúlpame por reaccionar así. Me preocupa que estés en la mira por mi culpa, que se metan con tu privacidad solo por sacar nuevos chismes.

—No te preocupes por eso, cariño —Tomó sus mejillas y besó su frente—. Puedo con esto, tendremos más cuidado. Confía en mi.

—Lo hago, Harry. Confío en ti —Sonrió—. Estaba viendo una película, ¿quieres quedarte?

—Me encantaría.

Ambos se sentaron en la cama, Harry colocó su brazo al rededor de los hombros de Monae mientras ella recargó su cabeza en El Fuerte pecho de él. Así hasta que la película finalizó. Harry se marchó más tarde dándole una beso en la mejilla. Monae estaba muy feliz, el día estuvo maravilloso a pesar de todas las noticias, su sueño de tener a Harry tan cerca se había cumplido.

(...)

A la mañana siguiente Monae ya tenía sus cosas listas para regresar a Londres, todo el equipo se encontraba desayunando en el restaurante del hotel. Sarah y Monae habían entablado una buena amistad, y habían conversado durante todo el desayuno, intercambiaron números y cuando llegó el momento de irse Sarah se despidió con un abrazo.

Harry acompañó a Monae al aeropuerto pero ella le pidió que se quedara resguardado en la camioneta, asegurándole que ella iría sola a abordar, Harry tuvo que aceptar a regañadientes después de discutirlo todo el camino.

—¿De verdad tienes que irte? Podrías quedarte conmigo, tengo unas cuantas fechas más y después regresaré a Londres por una semana.

Monae sonrió —Me encantaría quedarme, pero tengo que trabajar, el hospital me espera mañana.

—Tienes razón, también debes trabajar —Hizo una mueca—. Apenas pude verte un fin de semana, te extrañaré.

Monae rió.

—Te extrañaré también, pero nos veremos pronto, cuando regreses a Londres. Amas tu trabajo y disfrutarlo hará que los días pasen más rápido.

—Tienes razón —Sonrió—. Te veré pronto, seguiremos hablando cada noche, te avisaré cuando llegue a Londres porque no te dejaré ir ni un instante.

Monae asintió riendo, Harry se acercó para besar sus labios, se despidieron y partió en dirección al aeropuerto, se sentía feliz por un lado, pero por el otro, sabía que le esperaba una larga charla apenas llegara a casa.

BROKEN DREAMS | H.S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora