9

5K 820 245
                                    

Akutagawa miró el desayuno y trago saliva — Gin

— ¿si hermano?

— ¿porque...?

— Mis decorativos están perdidos

— tiene sentido.

El azabache se levantó — ¿no desayunarás?

El azabache tomó su desayuno — lo iré comiendo

— se educado

— si Gin.

Se marchó acariciando a su gato y continuo su camino. Gin miró al gatito — Creo que no le gusto

— Miaaau — contestó el gato.

Akutagawa siguió su camino por las calles. Siguió viendo aquellas figuras peculiares. Llegó molesto a la base de la mafia — Akutagawa-senpai, ¿quiere unas galletas? — el azabache las vio. Y tapó su cara con el cogin

— Ya déjenme — pidió.

Mientras Atsushi iba caminando, se topó con Gin. Ambos no se dirigieron la palabra pero el gato entre los brazos de la chica maulló — oh. El gatito — dijo Atsushi — Gin, con permiso — mencionó sonriente.

Gin suspiró al verlo irse, el gatito suspiró también.

Gin entró a la veterinaria.

Atsushi siguió caminando. En la agencia, todo era normal, abrió su laptop para ver si trabajo, sorpresivamente había perros

Por otro lado. En la base de la port mafia. Akutagawa limpiaba sus dientes cuando Rashomon se formó — no se por que todo lo que veo tiene forma de tigre — miró a Rashomon — ¿tu sabes? — Rashomon negó — lo peor de todo es que no he podido dejar de pensar en Jinko — suspiró. — vamos a casa.

Rashomon volvió al abrigo, Akutagawa había pasado todo su día frustrado por aquellas figuras de tigre. Desde los hot cake en la mañana con forma de tigre, hasta las galletas de Higuchi con forma de tigre.

Las nubes con forma de tigre
Las marcas
Hasta los globos de los niños.

De regreso a casa, los árboles tenían forma de tigre y el azabache simplemente llamó a Rashomon para cortarlos.

Dazai en una esquina comenzó a reír. Volvió a la agencia donde Atsushi recogía sus cosas — Atsushi-kun, ¿nos vamos a casa?

— oh si — miró a Dazai — Dazai-san ¿usted sabe por que había tantos perro hoy?

— ah, quien sabe... parece que había mucho perro silencioso ¿no?

Atsushi sonrió y comenzó a reír. Ambos fueron

Akutagawa caminaba desolado por la calle, pateo una lata en la calle — maldito Jinko...

Rashomon salió para comer aquella lata y reír. Apenas era el comienzo

...

Esta historia tiene derecho de continuar.

¡Gracias por leer!

Rashomon ShipperDonde viven las historias. Descúbrelo ahora