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Era un nuevo día, Atsushi despertó temprano al igual que los sacerdotes, el joven tigre se acercó a ellos para aprender a limpiar el templo, disfrutó en grande de aquellas enseñanzas.

Los chicos despertaron más tarde, justo para comer; Atsushi hizo caso a los sacerdotes. Alegre junto sus manos y oro junto con los sacerdotes

Akutagawa estaba algo molesto pero no podía alegrarse de ver al menor sonreír con esas personas.

Después de eso, fue a la sala con los sacerdotes, aprendiendo de historias y leyendas de Byakko. Se sentía bien, era como conocerse así mismo, una familia que jamás tuvo.

Los sacerdotes debían salir a hacer compras así que dejaron a los foráneos allí. Atsushi hablaba bien con Dazai pero no se había acercado a Akutagawa

El mafioso azabache le miraba intensamente, quería que le hiciera caso,
Algo.

Dazai por su parte tallaba la cabeza de Atsushi, sus orejas iban y venían — esta bien Dazai-san. Ya se controlarlas un poco más

— ¿ya sabes por qué son?

Atsushi se puso completamente rojo, — s-si, los sacerdotes me ayudan

— mmm de acuerdo

...

es cortito este solo tiene dos partes pero nos acercamos al final de temporada

¡Gracias por leer!

Rashomon ShipperDonde viven las historias. Descúbrelo ahora