Rashomon Shipper

24

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Misión escape.

Akutagawa había entrado en pánico. Se ocultaba y se escabullía, estaba evitando a Atsushi a toda costa y eso incluía que Rashomon no lo viera.

Llevaba así dos semanas, lo cual ya lo tenía agotado. Se quedó ese día en casa, no quería salir ni ver a nadie; incluso no quería cocinar.

Pidió comida adomicilio y para su suerte no tardó mucho. Tocaron a su puerta y abrió. De topo con su pesadilla.

Atsushi estaba en la puerta con su paquete — entiendo que te sientas mal pero esto es mucha comida — menciono entrando. El mayor estaba petrificado, su corazón latía como loco

— Ji-Jinko... ¿como?

— Dazai-San me mando.

— oh si, si.

Dejó la caja en la mesa y se acercó tocando su frente — mmm... pareces estar bien. Dazai-san me aseguro que estabas muy caliente

— ¡GATITO! ¡Gatito, gatito! — gritaba Rashomon

— ah, si...

— ¿seguro estás bien?

— se-seguro

— te veo débil

— me siento débil Justo ahora

— bien, me quedaré un rato.

— ¿porque? No soy un niño

— Dazai-san me dijo que me quede contigo a bajarte la calentura

Akutagawa se sonrojó por completo — oh, si que estás mal. Déjame ayudarte

Akutagawa se puso completamente rojo al ver al menor acercarse, y si, salió corriendo.

Rashomon se quedó con forma de perro y ambos se miraron — tu portador se volvió loquito

Rashomon asintió.

Unas horas después Akutagawa salió de su habitación, miró alrededor, el albino no estaba así que fue a la cocina topándose con un festín Celestina, quería probarlo. Era un enorme manjar para saborearlo.

Se acercó tomando una cuchara y metiéndola en la sopa, lo probó saboreando y su expresión fue de completa felicidad.

Vio a Rashomon adunarse desde el mueble y se acercó, Atsushi dormía tiernamente en el mueble — ¿Que rayos estoy haciendo? — se quejó. — es solo un gatito...

— portador es mi gatito

— pero esto no puede ser

— si puede, Dazai-san lo aprueba. Déjame quedarme con gatito

— debo dejarlo ir

— portador, gatito nos quiere

— debo.. eliminarlo

Rashomon enfureció. Tomó su forma de samurai sorprendiendo a Akutagawa— ¿Que?

— gatito va a ser mío — dijo amenazante

El gran estruendo despertó a Atsushi, salió corriendo buscando la causa. Miró a Rashomon encima de su portador. — ¡RASHOMON! — le grito Atsushi

— aléjate Jinko, lo destruiré antes que el a mi

— ¡te hace falta valor para destruirme portador! — gritaba Rashomon

— Rashomon detente ¿no ves lo qué haces?

Rashomon por primera vez ignoró a su amado gatito. Atsushi mordió sus labios — Rashomon, si se destruyen... ya no podremos jugar

Esto hizo a Rashomon detenerse, miró al albino, se sentía triste.

Era obvio, llevaba meses con su plan y cuando creía avanzar su portador quería retroceder. Se inclinó frente a Atsushi queriendo pedir perdón y el albino lo tomó sonriente — ya Rashomon, ya pasó. Yo te cuidaré

— Gatito... hueles tan Rico, mi amado gatito...

Rashomon volvió a ser tela. Akutagawa respiro aliviado y el albino le sonrió.

Se habían sentado a comer — entonces ¿Que está pasando?

— estrés — suspiró el mayor — ¿está bien que nos tengamos confianza?

— confió que no me mataras, no ahora

— confió en que me cuidas, cada día

— ¿te sientes mejor?

— algo, aún debo pensar como recompensar a Rashomon

Atsushi le miró sonriente — ¿Que tal una cita?

— ¿perdón?

— podemos ir al parque de atracciones, seguro que Rashomon la pasa bien.

— ah si, con Rashomon — respondió aliviado

— ¿no quieres?

— no, si, es Perfecto

— de acuerdo, iremos q una cita los tres

Akutagawa suspiró, su corazón no rebaja de latir pero debía de decirlo — no es amor — se quejó el mafioso

...

Akutagawa lo negará hasta el fin del mundo o que Rashomon lo mate.
¿Que pasará primero?

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